Bajo el lema “No al odio”, más de 25.000 personas tomaron las calles de la capital alemana para expresar su rechazo a la marcha convocada por el partido populista de derecha AfD, a la que asistieron 5.000 simpatizantes.
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Manifestación de la ultraderecha en Berlín
02:14
Desde la estación central de ferrocarriles de Berlín hasta la emblemática Puerta de Brandeburgo, cinco mil simpatizantes del partido populista de derecha Alternativa para Alemania (AfD) marcharon este domingo (27.5.2018) a orillas del río que cruza a la ciudad, articulando consignas contra el Islam y la política de asilo del Gobierno de Angela Merkel. Mientras tanto, en las aguas del Spree y al otro lado del río, 25.000 personas expresaron su rechazo al discurso xenófobo, homófobo e islamófobo del AfD en barco, en bicicletas y a pie, al ritmo de música electrónica bailable que traía a la memoria los mejores días de la Loveparade.
Esas cifras fueron ofrecidas por la Policía local. Trece contramanifestaciones oficiales opacaron las proclamas de los seguidores de AfD, que el año pasado se convirtió en la tercera fuerza política del Bundestag, por detrás de los conservadores cristianos y de los socialdemócratas. La marcha de AfD comenzó al mediodía bajo el lema "A favor de la libertad y la democracia” y concluyó con un discurso de los presidentes de esa formación, Jörg Meuthen y Alexander Gauland. Meuthen calificó a Merkel como "la suma sacerdotisa del cinismo del poder”. Gauland acusó a los partidos tradicionales de hacer más por los extranjeros que por los propios alemanes.
Manifestación de la ultraderecha en Berlín
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La movilización de AfD contó con la protección de unos 2.000 agentes policiales, desplegados para la ocasión en una jornada que transcurrió sin disturbios. Por su parte, los contramanifestantes tomaron diversos puntos de la capital alemana. "No al odio”, "El racismo no es una alternativa”, "Stopp AfD” y "Nunca más” se leía en algunas de las pancartas que celebraban el carácter abierto y multicultural de Berlín. En señal de apoyo a diversas organizaciones sociales, varias discotecas de Berlín organizaron un desfile de treinta vehículos cargados con potentes altavoces a lo largo de la calle 17 de junio, que atraviesa el célebre Tiergarten.
Sólo en ese tramo, los organizadores calcularon la presencia de 10.000 participantes. Además, aproximadamente veinte barcos y balsas navegaron por el Spree desde el barrio Friedrichshain hasta la estación central de trenes.
ERC ( dpa / Deutschlandfunk )
¿Por qué toda Alemania habla tanto de AfD? (15.03.2016)
El partido de extrema derecha apeló a un discurso antiinmigración y obtuvo excelentes resultados en las últimas elecciones regionales alemanas.
Imagen: Getty Images/A. Hassenstein
Al comienzo era el euro
En abril de 2013 se realizó en Berlín el primer congreso del partido Alternativa para Alemania (AfD), que acababa de ser fundado en febrero. Bajo el liderazgo del profesor de Economía de la Universidad de Hamburgo Bernd Lucke, el partido surgió como una variante un poco a la derecha de la Unión Cristianodemócrata (CDU) y tuvo como principal tema la crítica a la política de rescate del euro.
Imagen: Reuters
Los "euroescépticos"
El objetivo de AfD era convertirse en una alternativa real a los partidos de centro. Numerosos militantes de la Unión Cristianodemócrata (CDU), del partido liberal FDP e incluso de La Izquierda se plegaron a la propuesta, que buscaba el fin de los millonarios rescates financieros, el retorno de las monedas nacionales y la disolución de la eurozona. La prensa empezó a llamarlos "euroescépticos".
Imagen: Reuters
Los tres presidentes
Lucke compartió la presidencia del partido con la empresaria Frauke Petry y Konrad Adam, un reconocido periodista que había trabajado en el Frankfurter Allgemeine Zeitung. Con las bases listas para competir, se presentaron en las elecciones federales de 2013 con Lucke como principal rostro. Obtuvieron el 4,7 por ciento, muy poco por debajo del 5 por ciento necesario para ingresar al Bundestag.
Imagen: picture-alliance/dpa
Los primeros éxitos electorales
Tras un fracaso en las elecciones regionales de Hesse, AfD comenzó a dar sus primeros golpes electorales en 2014, cuando obtuvo el 7 por ciento en las elecciones al Parlamento Europeo, lo que permitió que Lucke y otros seis militantes se convirtieran en eurodiputados. Luego obtuvo asientos en los parlamentos de Sajonia, Turingia y Brandeburgo, donde alcanzó un 12,2 por ciento de la votación.
Imagen: picture-alliance/dpa
Las dos almas se separan
Pese a nuevos éxitos en Bremen y Hamburgo, las dos almas del partido poco a poco empezaban a chocar. Por un lado, los liberales económicos capitaneados por Lucke, y, por el otro, los ultraconservadores tutelados por Frauke Petry. En el congreso de julio de 2015, Petry fue elegida presidenta y se produjo un cisma. Cinco de los siete europarlamentarios dejaron el partido, entre ellos Lucke.
Imagen: picture-alliance/dpa/F. Gambarini
Giro a la derecha
Lucke se llevó consigo a unos dos mil militantes de AfD, algo así como el 10 por ciento del total. Con muchos de ellos fundó ALFA, Alianza para el Progreso y el Resurgir. Petry organizó el giro hacia la derecha de Alternativa para Alemania. Hubo reuniones con los islamófobos de Pegida e incluso Petry dijo que la policía debería usar armas de fuego, como último recurso, para proteger las fronteras.
Imagen: picture-alliance/dpa/J. Stratenschulte
Discurso antiinmigración rinde frutos
El discurso contra la política de refugiados propugnada por la canciller Angela Merkel, así como la radicalización en distintas áreas, las soflamas nacionalistas y la cercanía con la ultraderecha rindió sus frutos. En las elecciones regionales de Baden-Wurttemberg, Renania-Palatinado y Sajonia-Anhalt (13.03.2016), la AfD obtuvo sus mejores resultados históricos.
Imagen: picture alliance/dpa/S. Willnow
El tiempo hablará
Nadie quiere negociar con ellos. Pero la AfD se ha convertido en un actor de la política alemana, sin que le afectaran las críticas por la cercanía con Pegida o las apariciones de miembros del partido en manifestaciones junto a neonazis.