Berlín ofrece tecno como cebo para para reacios a vacuna
12 de agosto de 2021
Para acelerar inmunización, Berlín organiza fiestas tecno en el club Arena de Alt-Treptow, que tras el cierre por pandemia, se transformó en uno de los cinco centros de vacunación masiva que hubo en la capital alemana.
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Mientras que el DJ mezcla en su mesa, las luces y los flashes de la iluminación giran en torno a los pacientes que acaban de recibir su dosis de la vacuna, y que aguardan el tiempo necesario tras la inyección antes de poder irse a casa.
La idea de combinar música y vacunas la tuvo Markus Nisch, que dirige el centro de vacunación instalado por la Cruz Roja en el club Arena. "Al principio, teníamos unas expectativas limitadas", afirma Nisch, "pero la fila de espera se alarga hasta allá", explica extendiendo el brazo hacia las decenas de personas que esperan en el exterior.
Alrededor de 420 personas vinieron a vacunarse en la primera fiesta. El club recibió 1.500 dosis para las tres fiestas, según el Ministerio de Salud de Berlín. El mensaje se propagó rápidamente por las redes sociales. "Lo vi en Instagram, mucha gente lo había compartido", cuenta Olga Kapuskina, de 27 años, que se mudó hace poco a la capital.
"Vacunarse en una fiesta es una experiencia berlinesa", bromea. Alemania arrancó su campaña de vacunación con buen ritmo en la primavera (boreal), llegando a administrar más de un millón de vacunas diarias, pero los pinchazos se ralentizaron con la llegada del verano.
Alrededor de 52 millones de personas tienen ya al menos una dosis en Alemania (el 62,5% de la población), según el Instituto Robert Koch, encargado de monitorear la salud pública.
A partir del 11 de octubre no vacunados tendrán que pagar test
Para empujar a los reticentes a vacunarse, ya que no se plantea hacerla obligatoria, el gobierno de Angela Merkel anunció el martes el fin de los test gratuitos a partir del 11 de octubre.
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Las personas que rechacen vacunarse tendrán que pagar un test que muestre que son negativos al covid-19 para poder ir, por ejemplo, al cine, al restaurante o al gimnasio. Pero no solo se busca reprimir. "Necesitamos llegar ahora a los más jóvenes, motivarles y convencerles para que se vacunen", declaró Dilek Kalayci, el ministro de Salud de Berlín.
Las autoridades apuestan por la creatividad para distribuir las dosis. Más allá de la iniciativa del Club Arena, Berlín organizó centros de vacunación en aparcamientos de tiendas de Ikea, muy frecuentadas por los alemanes el fin de semana.
En Sajonia, donde la tasa de vacunación es la más baja de Alemania, un municipio ofrecía salchichas gratuitas a cada vacunado. También se llevaron a cabo campañas en estadios de fútbol, para atraer a los hinchas. "Es mi primera dosis de vacuna", explica en Berlín Oriane Dosda, de 23 años. "Estaba un poco nerviosa, pero me dije que tenía que hacerlo un día". Además de la música, los jóvenes le ven el lado práctico: no hace falta hacer papeleo ni pedir cita.
"Tuve antes problemas para pedir cita, aquí todo es fácil", confirma Claudio Keil, un profesor de Berlín, de 26 años. "Vine sobre todo por la vacuna, la música lo hace más agradable".
jov (efe, rki, mdr)
Los más famosos clubes de música electrónica de Berlín
Berlín es la capital mundial del “techno”. Miles de turistas de todo el mundo pasan días y noches entre penumbras y juegos laser en “raves” de electro, techno o house. He aquí los mejores sitios.¡No aptos para familias!
Imagen: IOSONO GmbH
Tresor Club
En 1989, la caída del Muro de Berlín dió vida a una "cultura de las subculturas musicales" en la capital alemana. La reunificación también tuvo lugar en los clubes, como el Tresor. En sus salas y largos túneles se celebra con techno y extravangancia. El resurgimiento de Berlín como la metrópoli de las fiestas sería impensable sin el fin de la dictadura en el este del país.
Imagen: IOSONO GmbH
Berghain
Antes operaba aquí una planta de energía, hoy es uno de los “techno-clubs” más importantes del mundo. DJs como Ben Klock, André Galluzi, Marcel Dettmann, Tama Sumo o Norman Nodge ponen y mezclan aquí. Quien logre pasar a los malhumorados porteros puede vivir allí “la aventura de su vida”, si no cree tener que sacar energías de ciertas drogas, claro está.
Imagen: picture-alliance / schroewig
Watergate
A orillas del río Spree, a la altura del puente de Oberbaum, el Watergate es para gente exigente. Son dos plantas de puro electro, house y techno. El "Waterfloor" en el área inferior, sirve como embarcadero en el verano. No pocos esperan aquí la salida del sol.
Imagen: Imago Images/Travel-Stock-Image
Salon zur Wilden Renate
Ya sea en la sala de ajenjo o en el jardín, donde un barco cuelga de los árboles, el "Salón de Renata, la loca", es conocido por sus noches de salvajes fiestas. Los fines de de semana hay música electrónica para todos los oídos. Y a sus asiduos visitantes les gusta celebrar mucho y duro.
Imagen: Imago Images/M. Schwarz
://About Blank Club
A veces sucede que algunos invitados a la fiesta siguen haciendo cola el lunes por la mañana cuando los primeros ya están saliendo del local para ir directamente a sus oficinas de trabajo. Aquí se topan hipsters en jeans ajustados con "alternativos" de corte de pelo iroqués y chaqueta de tachuelas. Los "gorilas" del club hacen una implacable selección a la entrada. No. Los "://" no son un error.
Imagen: Juska Wendland
Golden Gate
"Si la música techno fuera un recurso natural, el Golden Gate sería la veta principal de oro", comenta un visitante. El club es frecuente objeto de cobertura nacional e internacional. Hay menciones en el New York Times y el británico The Guardian, que lo nombran como ejemplo de que a los berlineses todavía les gusta celebrar entre ruinas. La impresión no es muy traída de los cabellos.
Imagen: Juska Wendland
Ritter Butzke
Aquí no solo se escucha y se baila, sino que se canta y se declama. En Ritter Butzke tienen lugar eventos como "Bastard Poetry Slam", o "Escapada amorosa de una noche". En el Butzke hay otras muy buenas fiestas, como Monkee's Madness, Lila o Steyoyoke. Este club se encuentra en un antiguo complejo industrial. Su nombre Ritter Butzke proviene de la antigua fábrica de grifos "Aqua Butzke".
Imagen: Imago Images/M. Müller
Kater Blau
El Kater Blau, sobre el río Spree, es un punto de partida para los entusiastas del techno y amantes de los vestuarios coloridos, el confeti y el brillo. Este es el epicentro de los "techno hippies" a los que les asustan algunas figuras depresivas que van a otros clubes. La simpática "gorila" que decide si entras o te devuelves a casa, te seleccionará como invitado entre más colores lleves encima.
Imagen: Imago Images/PEMAX
Suicide Circus Club
"Feiner Electro, feine Bude", dicen algunos visitantes encantados de este lugar y su música, resaltando que es uno de los clubes a los que se entra sin haber sufrido un ataque de nervios por el pánico que causan algunos vigilantes en las puertas, más conocidos como "gorilas de discoteca". A propósito, no está demás recordar que el nombre del local no hay que tomárselo al pie de la letra.
Imagen: Getty Images/AFP/J. McDougall
Club der Visionaere
La vista de paisaje romántico engaña. Aquí no se escuchan canciones en donde se jura amor eterno, sino la mejor música electrónica de América Latina que ha llegado a Berlín, en persona del DJ y productor chileno Felipe Valenzuela, así como de Argenis Brito. El local se incendió recientemente y ya ha reabierto sus puertas. ¡No necesitará escafandra de bombero para festejar!
Imagen: picture-alliance/Global Travel Images
Rooftop
Coronando la Alexanderplaz, el Rooftop, la terraza del antiguo House of Weekend, ofrece música con la mejor panorámica de la capital alemana. Allí se pone hip hop, R&B, Back to the 90s, fiesta latina y electro. Aquí han celebrado Lenny Kravitz, Beth Ditto, Joop y hasta George Clooney. Cuenta con "Surround Soundsystem, 26 altavoces y una consola de DJ. ¡Qué vista! Autor: José Ospina-Valencia