Se viene la noche para Silvio Berlusconi. No solo los ministros de su partido Forza Italia lo dejaron solo en su afán por romper el Gobierno de coalición encabezado por Enrico Letta hace unos días, sino que además este jueves (21.11.2013) se hizo pública la sentencia del Tribunal de Milán que investiga el caso de “Ruby Rompecorazones”, la muchacha menor de edad con la que el expremier habría tenido sexo en una de sus famosas fiestas de “bunga bunga”.

Según el informe de 331 páginas evacuado por el tribunal, “está demostrado que el acusado tuvo sexo con Karima El Mahroug a cambio de grandes sumas de dinero y otras ventajas, como joyas”. Asimismo, la sentencia asegura que los investigadores no tienen motivos para dudar que Berlusconi, de 77 años, sabía que la bailarina marroquí era menor de edad. El documento se conoció gracias a la presión de los medios de prensa.

El ex primer ministro italiano fue condenado en primera instancia en junio de 2013 a siete años de cárcel por tener sexo con prostitutas menores de edad y abuso de poder. El tribunal consideró entonces probado que Berlusconi había pagado por tener sexo con menores durante sus fiestas, celebradas en su residencia de Villa Ancore, en Milán. En aquella ocasión Berlusconi apeló a la sentencia. El resultado de sus esfuerzos por exculparse sigue pendiente.

Berlusconi, el director

La argumentación de la sentencia, que justifica la condena inicial de siete años, asegura que “Ruby” participaba de un “sistema de prostitución” en la residencia de Berlusconi, donde las jóvenes, “algunas de ellas prostitutas profesionales, practicaban relaciones sexuales en múltiples contextos”. Los jueces afirman que el hecho de que Karima El Mahroug haya negado su vinculación con la red “refuerza aún más” la culpabilidad de Berlusconi.

Esto, pues acusan directamente al expremier de haber pagado por los testimonios prestados durante el juicio. El Mahroug negó en entrevistas y ante los tribunales haber mantenido sexo con Berlusconi e incluso realizó una protesta defendiendo su honra. La sentencia es aun más dura con el político, al que acusan de tener “capacidad de delinquir” basada en su actividad “sistemática” para empañar los testimonios.

Finalmente, Berlusconi recibió la pena de seis años y cuatro meses por abuso de poder, por haber presionado en su condición de primer ministro a la policía para que pusiera en libertad a Ruby, y otros ocho meses por inducción a la prostitución de menores. La Corte considera “probado” que la persona que dirigía las “exhibiciones sexuales de las jóvenes” era el mismo Berlusconi.

DZC (dpa, Reuters, Europa Press)