Bernd das Brot: el personaje de culto alemán llega a EE. UU.
25 de septiembre de 2025
"¡Maldita sea! Todo esto no tiene sentido. Mi vida es un infierno". Bernd das Brot, también conocido por el público en español como "Bernd el pan", es quizás el personaje infantil más insólito de la televisión alemana. Desde hace 25 años, este malhumorado pan de molde recorre la televisión infantil con una mezcla de melancolía y comentarios sarcásticos, y ahora también ha cruzado el Atlántico: Bernd fue presentado en un programa de entrevistas estadounidense y se convirtió inmediatamente en un personaje de culto.
El público estadounidense celebra a Bernd, el pan triste
En el programa Last Week Tonight, el presentador John Oliver dio a conocer al público estadounidense al pan malhumorado de Alemania, y las risas no se hicieron esperar. Bernd cumple todos los clichés del alemán sin sentido del humor, hosco, y que siempre tiene algo de qué quejarse. Oliver comentó con ironía: "Es lo más alemán que jamás he visto”. En internet reina el entusiasmo por el "weird German bread guy", ese "pan alemán extraño ". Muchos espectadores estadounidenses se convirtieron en fans de la noche a la mañana.
Voice of America, la emisora internacional de Estados Unidos, declaró con cierta incredulidad: "Bernd das Brot, el pan alemán depresivo, es un clásico de culto de la televisión desde hace 25 años".
¿Cómo se convirtió Bernd das Brot en un fenómeno de culto en Alemania?
El personaje fue creado para ser la mascota del canal de televisión KiKa (abreviatura de Kinderkanal, Canal Infantil). En septiembre de 2000 se emitió el primer programa con Bernd y sus amigos, la oveja Chili y el floreciente arbusto Briegel. Sin embargo, el trío solo se podía ver durante el día, ya que el canal infantil no emitía entre las 21:00 y las 6:00 horas. Esto cambió el 1.º de enero de 2003, ya que el canal comenzó a emitir durante la noche, incluyendo episodios de Bernd das Brot en repetición continua. De este modo, atrajo a un público adulto, a menudo, a personas que regresaban del trabajo, o de una larga noche de fiesta. Las apariciones nocturnas convirtieron a Bernd definitivamente en un clásico de culto alemán.
Según su creador, Tommy Krappweis, lo más destacado es que tanto los niños como los adultos se ríen del personaje, pero no por las mismas razones.
En 2004, Bernd das Brot ganó el premio Adolf Grimme de televisión, el equivalente alemán a los premios Emmy de la televisión estadounidense. El jurado dictaminó que el "guerrillero antidiversión" se tomaba "el derecho a estar de mal humor, en medio de una cultura de eventos divertidos con espectáculos altamente emotivos y exagerados". Al fin y al cabo, dijeron, él no había pedido salir en televisión.
¿Qué hace a Bernd tan especial?
Bernd no es para nada convencional. Mientras que la televisión infantil suele ser colorida, alegre y motivadora, Bernd es un nerd depresivo , con el ceño siempre fruncido, que se ve envuelto en aventuras absurdas. En realidad, lo único que quiere es estar tranquilo, que lo dejen en paz, y eso es precisamente lo que lo hace tan divertido. O, como decía un comentario en YouTube tras la aparición de Bernd en Estados Unidos: "Para ser un programa infantil que se emite a las cuatro de la madrugada, resulta absolutamente entretenido".
A los fans les encanta su humor estoico, su eterna apatía y sus extravagantes amigos Chili y Briegel. Además, Bernd parece sincero: no quiere brillar ni ser perfecto, solo quiere regodearse tranquilamente en su Weltschmerz, su desengaño del mundo.
¿Por qué Bernd está tan triste?
Una vez, Bernd contó la historia de una baguette delgada de la que se enamoró. Pero ella solo tenía ojos para un "pan multigrano con diez tipos de cereales". Eso le resultó muy deprimente. "Desde entonces, mi corazón es un trozo de masa seca", señaló.
Tommy Krappweis, creador de Bernd, ha dejado en claro que el amor no correspondido no era la verdadera causa de la depresión de Bernd; lo que le deprimía principalmente era el hecho de existir. El mayor problema de Bernd es que nació contra su voluntad. Considera que él y su vida no tienen sentido. Su actividad principal consiste en mirar fijamente a la pared y defenderse de sus molestos y alegres amigos Chili y Briegel.
Bernd sigue siendo, por tanto, lo que es: un pan refunfuñón que conquista, sin proponérselo, los corazones en Alemania, en internet y ahora también en la televisión de EE. UU. Al final de su aparición en el programa de John Oliver, Bernd das Brot se despidió de la audiencia estadounidense con una frase como era de esperarse: "Mi vida es un infierno". Con ello dejó una impresión que perdurará, y ganó miles de nuevos fans, por supuesto, en contra de su voluntad.
(jm/cp)