La organización terrorista Boko Haram inició este domingo (25.1.2015) una ofensiva en la capital del estado de Borno, Maiduguri, ubicada en el noreste de Nigeria. Así lo informó vía Twitter el Ministerio de Defensa de ese país africano. La última vez que los milicianos intentaron tomar el control de esa urbe fue en diciembre de 2014, cuando lanzaron un ataque contra una base aérea y una base militar cercana. Hacerse de Maiduguri sería una hazaña simbólica para los insurgentes, quienes aspiran a fundar un Estado islámico regido por la sharía.

El Ejército nigeriano está respondiendo a las agresiones de Boko Haram por tierra y aire. El Ministerio de Defensa impuso un toque de queda en Maiduguri “hasta nuevo aviso”. Hasta el momento no se han reportado víctimas mortales ni heridos. El encargado de la cartera de Exteriores de Estados Unidos, John Kerry, voló a Lagos para intentar persuadir tanto al presidente nigeriano, Goodluck Jonathan, como a los otros candidatos presidenciales de reconocer los resultados de las elecciones pautadas para el 14 de febrero.

Violencia post-electoral

Kerry se reunió con Jonathan y se encontrará también con su rival, el exmandatario y militar Muhammadu Buhari. A Estados Unidos le interesa que la situación se estabilice en Nigeria, uno de los países emergentes con mayor crecimiento económico. La meta concreta de Kerry es que ambos aspirantes –Jonathan y Buhari– se comprometan a convencer a sus seguidores de no incurrir en actos de violencia posteriores a los comicios. La victoria de Jonathan en 2011 fue controvertida y desató tumultos que dejaron aproximadamente 800 muertos.

Ahora, con Boko Haram en el horizonte, Nigeria no puede darse el lujo de ocupar a sus fuerzas de seguridad en el restablecimiento del orden interno. El monopolio estatal de la violencia debe ser usado para responder a la amenaza de los terroristas. Hace unas semanas, Boko Haram atacó la pequeña ciudad de Baga. En el marco de una gran ofensiva en la región han matado ya a centenares de personas y provocado la huida de decenas de miles.

ERC ( dpa / AP / Reuters )