El presidente boliviano rechazó un arreglo con la española Abertis y Aena por la nacionalización de su filial Sabsa el 18 de febrero pasado. "No hay nada que negociar, porque esa compañía se apropió de tres aeropuertos, y más bien nos debe pagar", señaló Morales. Abertis creó en alianza con Aena la sociedad Airport Concessions and Development Limited, que adquirió la empresa Sabsa y administra los aeropuertos de Santa Cruz, Cochabamba y El Alto, ciudad vecina a La Paz.

Abertis se mostró sorprendida por las declaraciones de Morales. Un portavoz de la empresa en Madrid dijo que llevan meses negociando con Bolivia un acuerdo "amistoso", tras suspender un arbitraje internacional que había iniciado antes de la nacionalización, porque el Gobierno no le debaja subir las tasas aeroportuarias. En febrero pasado, el grupo español pidió una compensación de 90 millones de dólares por la nacionalización de su operadora.

Sí habrá compensación para Iberdrola

Sin embargo, Bolivia optó por resolver el conflicto con la empresa española Iberdrola por la nacionalización de cuatro de sus filiales en diciembre del año pasado. El mandatario boliviano justificó la expropiación de las filiales de la eléctrica Iberdrola porque no podía sostener tarifas bajas en el área rural de Bolivia. "No podía asumir esa responsabilidad y nos vimos obligados a la nacionalización", dijo. En diciembre del año pasado, el mandatario decidió la nacionalización de Electricidad de La Paz (Electropaz), Luz y Fuerza de Oruro (ELFEO), Compañía Administradora de Empresas Bolivia (CADEB) y Empresa de Servicios (Edeser), filiales de la española Iberdrola.

Morales instruyó al procurador general del Estado, Hugo Montero, a acelerar la resolución del conflicto de las cuatro filiales de Iberdrola y proceder al pago por las acciones que la española tenía en las cuatro empresas. "Hay que acelerar este tema. Bolivia no puede ser mal visto por los inversionistas (extranjeros)", agregó.

Más empresas españolas en Bolivia

En Bolivia siguen operando otras empresas españolas, como la petrolera Repsol, que desde 1995 tiene a su cargo la explotación de un 45 por ciento de las reservas de gas y un 39 por ciento de petróleo del país. También sigue activo el holding español GSA, que realizó inversiones en la construcción de multicines y galerías comerciales en las ciudades de Santa Cruz, Cochabamba y La Paz. El banco BBVA administra un fondo de pensiones (Previsión AFP) que representa el 53 por ciento del total de este tipo de fondos en Bolivia. Pero en los próximos meses deberá realizar un traspaso de sus acciones a la Gestoría Social, por lo que pasarán a depender del gobierno de Bolivia. Otras empresas españolas presentes en Bolivia son la Unión Española de Explosivos y Santillana Ediciones, según informó la oficina económica y comercial de la embajada de España en Bolivia.

MS (dpa/Reuters)