Bolivia: persisten disturbios tras renuncia de Evo Morales
10 de noviembre de 2019
Después de 14 años en el poder, el presidente boliviano cedió ante la presión de tres semanas de protestas contra su polémica reelección y tras perder el apoyo de las Fuerzas Armadas y la Policía.
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Los disturbios se extendieron la noche del domingo (10.11.2019) en varias ciudades de Bolivia, tras la renuncia del presidente Evo Morales, con incendios, saqueos y ataques a viviendas, entre estas la del propio exmandatario, en un ambiente de tensión e incertidumbre sobre el destino político inmediato del país.
La Paz, El Alto y Cochabamba, entre otras ciudades del país, registraron incidentes violentos mientras muchos ciudadanos pidieron ayuda a la Policía y las Fuerzas Armadas a través de redes sociales.
Más tarde, se denunció que un grupo de encapuchados irrumpió y se "tomó" la sede de la embajada de Venezuela en Bolivia.
Morales y su vicepresidente, Álvaro García Linera, anunciaron juntos la dimisión a sus respectivos puestos y, en el caso del segundo, también a la presidencia del Congreso. Alegaron que lo hacían para "salvar a las familias" sumidas en la ola de violencia y de esa forma "pacificar" al país.
Hasta altas horas de la noche (local) no se había informado en Bolivia quiénes asumirán el control del país en las próximas horas, ante la ausencia de Morales y de García Linera.
Detenida presidenta del TSE
También María Eugenia Choque Quispe renunció de manera "irrevocable" a la presidencia del Tribunal Supremo Electoral (TSE) y fue detenida posteriormente, en un operativo que realizó el Departamento de Análisis Criminal e Inteligencia (DACI) de la Policía Boliviana en La Paz.
La detención de Choque Quispe ocurrió después que la Fiscalía anunciara el inicio de un procesamiento a los miembros del TSE por irregularidades detectadas por la OEA en las elecciones, que pueden conllevar "ilícitos penales y electorales vinculados al cómputo de los resultados oficiales".
Al presentar su renuncia, Choque Quispe dijo que lo hacía para someterse a "cualquier investigación", luego de un informe de la OEA que señala "presuntos hechos irregulares" en las elecciones del 20 de octubre.
Evo Morales, por su parte, se recluyó en la zona cocalera de Chimoré, su cuna política en la región central de Cochabamba, para hacer el anuncio de su dimisión. Aterrizó en el avión presidencial acompañado de García Linera.
En las redes sociales se especuló que Morales viajaría al exterior, aunque horas después de su renuncia el exmandatario denunció vía Twitter que tenía información sobre una supuesta orden de arresto en su contra, lo cual fue desmentido por el jefe nacional de la Policía.
"Renuncio a mi cargo de presidente para que (Carlos) Mesa y (Luis Fernando) Camacho no sigan persiguiendo a dirigentes sociales", dijo Morales a través de la televisión, en alusión a los líderes opositores que convocaron protestas en su contra, desatadas el día siguiente de los cuestionados comicios del 20 de octubre.
Opositores celebraron dimisión
Evo Morales, que denunció ser víctima de un "golpe de Estado" para echarlo del poder, pidió a los líderes opositores Carlos Mesa y Luis Fernando Camacho que "no maltraten" a los bolivianos y les "dejen de patear".
"No queremos enfrentamientos", agregó, a la vez que dijo renunciar para que "vuelva la paz social".
Inmediatamente después del anuncio, las calles de La Paz se convirtieron en un carnaval, con el estallido de petardos y miles de manifestantes ondeando banderas bolivianas.
Fuerzas Armadas y Policía le "sugirieron" renunciar
"Sugerimos al presidente de Estado que renuncie a su mandato, permitiendo la pacificación y el mantenimiento de la estabilidad por el bien de nuestra Bolivia", dijo el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, Willimas Kaliman, en un comunicado que leyó en conferencia de prensa, justificando el llamado "ante la escalada de conflicto que atraviesa el país".
Asimismo, el comandante en jefe pidió al "pueblo boliviano y sectores movilizados deponer las actitudes de violencia para no manchar con sangre, dolor y luto a nuestras familias". Paralelamente, el comandante de la Policía Boliviana, Yuri Calderón, leyó un comunicado en el que se sumaba "al pedido del pueblo boliviano de sugerir al señor presidente Evo Morales presente su renuncia para pacificar al pueblo de Bolivia en estos duros momentos".
Morales perdió un gran aliado: el sindicato obrero
En el mismo tono que las Fuerzas Armadas y de Orden, la Central Obrera Boliviana (COB), la mayor entidad sindical del país y que había sido aliada del Gobierno en los últimos años, le pidió también al presidente Evo Morales que renunciara si era necesario "para pacificar al país".
"Si seguramente es una acción y una medida para que el pueblo se pacifique, compañero presidente le llamamos a la reflexión de que pueda asumir esta responsabilidad. Si hay la necesidad de renunciar, por pacificar al pueblo, lo hacemos, lo decimos desde la Central Obrera Boliviana”, manifestó el líder de la COB, Juan Carlos Huarachi, en una conferencia de prensa en La Paz. Huarachi agregó que la convocatoria de nuevas elecciones es también un reclamo de su organización y que "no serán cómplices del derramamiento de sangre".
El presidente de la Cámara de Diputados, Víctor Borda; el ministro de Hidrocarburos, Luis Alberto Sánchez, y el titular de Minería de Bolivia, César Navarro, renunciaron a sus puestros.
rrr/mg/gs (afp,efe, la razón, reuters)
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Bolivia: hitos de una crisis política
Tras renunciar Evo Morales, en medio de protestas contra un presunto fraude electoral y tras perder apoyo militar, Bolivia vivió casi un año de crisis y transición hacia lo que se perfila como un nuevo gobierno del MAS.
Imagen: Ueslei Marcelino/Reuters
Dijeron que no, pero...
La crisis se propició tres años antes. El 21 de febrero de 2016 se realizó un referéndum constitucional en Bolivia para evaluar una modificación a la Carta Magna, que permitiera al jefe de Estado reelegirse en dos ocasiones sucesivas. El "No" ganó con el 51,3 % de los votos, lo que significaba que Evo Morales quedaba imposibilitado de competir en las presidenciales de 2019. No obstante, compitió.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/Bolivia's Communication Ministry/R. Martinez
Derecho humano a ser candidato
Morales argumentó ante la Justicia que si no podía competir en las elecciones se coartaba el "derecho humano" de todo ciudadano a elegir y ser electo. El Tribunal Constitucional dio por buena esta premisa y Morales inscribió su candidatura ante el Tribunal Supremo Electoral en diciembre de 2018. Las protestas opositoras no se hicieron esperar.
Imagen: Reuters/D. Mercado
Carlos Mesa vuelve al ruedo
Carlos Mesa, expresidente del país y una de las voces más críticas con Morales, dijo que la decisión de la Justicia era una "herida de muerte a la democracia". Otros opositores incluso hablaron de un "golpe de Estado" institucional y del comienzo de una "dictadura". El 6 de octubre de 2018, Mesa anunció que enfrentaría a Morales en las elecciones e inscribió su candidatura en noviembre de ese año.
Imagen: AFP/A. Raldes
Un giro sorpresivo
Finalmente, el 20 de octubre de 2019 se realizaron las elecciones generales. El 88,31 % de los votantes participó del proceso, cuyos resultados se fueron entregando a cuentagotas, lo que despertó sospechas en la oposición y en organismos internacionales. En un comienzo, Morales no logró los votos necesarios para ganar en primera vuelta, pero un giro sorpresivo le dio finalmente el triunfo.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/J. Karita
Triunfo estrecho
Tras varios días, se entregaron por fin los resultados definitivos: Morales obtuvo el 47,08 %, contra el 36,51 % de Carlos Mesa. Con esas cifras, el mandatario superaba por más de 10 puntos a su principal rival y cumplía con la norma que da el triunfo en primera ronda a quien venza por esa cantidad de votos a su más cercano perseguidor. La oposición acusó fraude y salió a las calles.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/J. Karita
Llamados a manifestaciones
Carlos Mesa llamó a sus seguidores a defender los votos y forzar la realización de una segunda vuelta. "Todos nosotros tenemos que estar decididos, sin ningún tipo de reparo, a salir a la calle para demostrar que no aceptamos el fraude", dijo el exmandatario. Las protestas y los enfrentamientos comenzaron poco después de las elecciones, y fueron ganando violencia con el paso de los días.
Imagen: Reuters/K. Pfaffenbach
La rabia no cede
El gobierno de Evo Morales y la OEA acordaron la realización de una auditoría, una medida que no aplacó la rabia en la calle. Poco después, el jefe de la misión de la OEA renunció y las protestas arreciaron nuevamente en distintas ciudades del país. Al 9 de noviembre se contaban 3 muertos y casi 350 heridos, en un ambiente de creciente polarización.
Imagen: Reuters/K. Pfaffenbach
Surgen nuevos líderes
A la figura de Carlos Mesa se sumaron otros liderazgos. Quizás el más convocante fue el de Luis Fernando Camacho, líder del comité cívico de Santa Cruz. Camacho logró convocar a distintas organizaciones para pedir la renuncia de Morales. "Nosotros hemos asumido una posición totalmente ciudadana. No queremos segunda vuelta, queremos un nuevo proceso eleccionario", exigía Camacho.
Imagen: Getty Images/AFP/D. Walker
Rebelión policial
Al ya agitado ambiente se sumaron la noche del viernes 8 de noviembre de 2019 los policías, que en distintas regiones del país se amotinaron. Un agente dijo a la prensa que "no podemos seguir con este narco-gobierno, con esta democracia injusta". Si bien el Gobierno dijo que no desplegaría militares para enfrentar la rebelión, Evo Morales sí denunció que había un golpe de Estado "en marcha".
Imagen: Reuters/L. Gonzalez
Renuncia
El 10 de noviembre de 2019, tras 14 años en el poder, Evo Morales renunció. La presión de las protestas, y la pérdida del apoyo de las Fuerzas Armadas y la Policía, apuraron su decisión. Morales aseguró que su salida fue causada por un "golpe de Estado". Los disturbios se extendieron en varias ciudades tras su renuncia, con incendios, saqueos y ataques a viviendas como la del propio exmandatario.
Imagen: picture-alliance/dpa/J. Karita
México concede asilo político a Evo Morales
Tras la renuncia de Morales, el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, informó en rueda de prensa que el político boliviano había aceptado la oferta de asilo ofrecida por México. Ebrard expresó que México "ha decidido conceder asilo por razones humanitarias" a Morales "en virtud de la urgencia que afronta en Bolivia, donde su vida e integridad corren peligro".
Imagen: picture-alliance/dpa/G. Granados
Presidenta interina
El 12 de noviembre, la senadora Jeanine Áñez fue proclamada nueva presidenta interina de Bolivia. Tras la renuncia de todos los que constitucionalmente podían suceder a Morales, la abogada de 52 años pasó de segunda vicepresidenta a presidenta del Senado, accediendo así a la vía sucesoria. Desde México, Morales aseguró que este era "el golpe más artero y nefasto de la historia" de su país.
Imagen: picture-alliance/dpa/J. Karita
De México a Cuba, y a Argentina
En diciembre de 2019, el exmandatario boliviano viajó a Argentina en un operativo secreto, para ser acogido como refugiado, con la condición -luego incumplida- de no hacer declaraciones políticas. Morales viajó a Buenos Aires desde Cuba, donde se hizo un chequeo médico. Lo acompañaron el exvicepresidente Álvaro García Linera, la exministra de Salud Gabriela Montaño y el excanciller Diego Pary.
Imagen: picture alliance/ZUMA Wire/M. Ramos
Incendios, pandemia, corrupción, denuncias contra Morales
Entre cambios drásticos en política exterior, acusaciones de persecución a partidarios del MAS, escándalos de corrupción en el manejo de la pandemia de COVID-19, declaración de desastre nacional por incendios forestales, denuncias contra Evo Morales por "estupro", "asesinatos y torturas", Áñez llegó a cumplir su tarea como presidenta interina: el llamado a nuevas elecciones, pospuesto dos veces.
Imagen: picture-alliance/dpa/M. P. d. Carpio
Nuevas elecciones, casi un año después
Tras dos fechas pospuestas, por la pandemia mundial de coronavirus, el electorado boliviano votó finalmente en nuevas elecciones este 18 de octubre de 2020, para elegir otro presidente y vicepresidente. Casi un año después de la renuncia de Evo Morales, que el exmandatario aún achaca a un "golpe", los bolivianos eligieron también a 130 diputados y 36 senadores, para renovar el Congreso bicameral.
Imagen: Martin Mejia/AP Photo/picture-alliance
Arce celebra el retorno del MAS, a boca de urna
Pasada la medianoche de la jornada electoral, se conoció que las encuestas a boca de urna otorgan más del 50 % de los votos al candidato del MAS, Luis Arce. Le seguirían Carlos Mesa, de Comunidad Ciudadana, con más del 30%, y Luis Fernando Camacho, de Creemos, con alrededor del 14 %. Arce celebró en La Paz un triunfo que dio por seguro, mientras el recuento oficial iba por alrededor del 7%.
Imagen: Ronaldo Schemidt/AFP/Getty Images
Evo: "Tarde o temprano vamos a volver"
Evo Morales, que dirigió desde Argentina la campaña electoral del MAS, también celebró el triunfo. "Tarde o temprano vamos a volver" a Bolivia, afirmó. Sin embargo, dirigentes del MAS como la presidenta del Senado y la Asamblea Legislativa de Bolivia, Eva Copa, manifestaron que aún "no es el momento adecuado" para su regreso, porque Morales todavía tiene "problemas que solucionar".
Imagen: Manuel Cortina/NurPhoto/picture-alliance
Mesa será "cabeza de oposición"
Con el recuento oficial de votos aún en curso, Carlos Mesa, líder y candidato presidencial de Comunidad Ciudadana, compareció en La Paz ante los medios, para reconocer que los sondeos a boca de urna auguran un "claro triunfador en primera vuelta": el exministro Luis Arce, del Movimiento Al Socialismo (MAS). Comunidad Ciudadana ejercerá de "cabeza de la oposición", informó en Twitter.
Imagen: Luis Gandarillas/AFP/Getty Images
Presidenta interina felicita y pide esperar resultados oficiales
También la presidenta interina del país, Jeanine Áñez, que había retirado su candidatura tras verse relegada en las encuestas, reconoció que (aún sin el cómputo oficial) la victoria del MAS parece segura. Felicitó a sus candidatos, pidiéndoles "gobernar pensando el Bolivia y en la democracia". A los ciudadanos y partidos, les pidió "paciencia" y "madurez" para esperar los resultados oficiales.
Imagen: Presidencia de Bolivia/AFP/Getty Images
Felicitaciones de Trump, Maduro, la OEA, la UE y la ONU
Los principales aliados regionales del expresidente Evo Morales -los presidentes de Venezuela, Cuba, Nicaragua, México, y Argentina- fueron los primeros en celebrar el retorno del MAS al poder en Bolivia. Pero también EE. UU., la OEA, la UE y la ONU felicitaron al virtual futuro presidente, Luis Arce. Washington anunció su disposición de trabajar con el nuevo gobierno.