El 10 de diciembre de 2012 un desconocido depositó en la estación central de trenes de Bonn, en Alemania, un bolso de color azul en cuyo interior había material suficiente para fabricar una bomba. Las autoridades se pusieron en alerta y empezaron rápidamente la búsqueda del sospechosos, sin resultados hasta la fecha.

Primero se repartieron carteles con la fotografía de un hombre de color al que se sindicó como el responsable. Se habló de salafistas y terroristas árabes, pero no se pudo probar nada. Ahora, la policía habría obtenido nuevas evidencias, mientras versiones de prensa hablan de una historia bastante más rocambolesca de lo que nadie hubiera imaginado.

Recompensa

Este miércoles (23.01.2013) la Oficina Federal de Investigación Criminal y la Procuraduría General aseguraron que se dispone de nuevas imágenes que hacen que todos los ojos se centren en la búsqueda de un hombre de entre 20 y 40 años que circula por la estación cargando el bolso. Los videos con las imágenes están colgados de distintios sitios de internet, para que los ciudadanos puedan ayudar a identificar al desconocido.

Esa campaña será reforzada con la distribución de folletos y carteles con los nuevos registros en distintas ciudades, como Colonia, Fráncfort y Aquisgrán. Asimismo, la empresa Deutsche Bahn ofreció una recompensa de 50.000 euros a quien entregue información que permita capturar al sospechoso, que es el mismo que aparecía en el primer video dado a conocer poco después del hallazgo del bolso, donde se le ve dentro de un restorán de comida rápida ubicado en la estación.

Versiones de prensa aseguran que el sujeto que aparece en el video habría robado el bolso azul a otro viajero y, al darse cuenta de su contenido explosivo, lo depositó en el andén 1 de la estación y huyó del lugar. Las autoridades prefirieron no comentar esos detalles.

DZ (General Anzeiger, WAZ.de)