Quienes necesiten un albañil para su casa, tendrán que esperar mucho tiempo para fijar una fecha. Los libros de pedidos están llenos. Debido a la crisis de deuda de la eurozona y el temor a la inflación, cada vez más alemanes invierten su dinero en el sector inmobiliario. Trabajadores alemanes, como el pintor magdeburgués Frank Drescher, están contentos: su negocio está en auge.