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Brasil, sin pena ni gloria

PK27 de junio de 2006

Los aficionados esperaban un fútbol bonito, inteligente, genial. Pero el campeón mundial apenas administró el partido y pasó a cuartos de final sin pena ni gloria.

Ronaldo celebra el primer gol de Brasil.Imagen: AP

Ronaldo, la estrella algo entrada en kilos del Real Madrid, logró en el minuto cinco el 1 a 0 para Brasil: su gol número quince en los Mundiales, lo que le supuso superar el récord de goles de todos los tiempos en los Mundiales, que tenía el alemán Gerd Müller, con 14.

Adriano festeja el segundo.Imagen: AP

Y eso fue quizás lo más notable del partido. Poco antes del final del primer tiempo, Adriano anotó en fuera de juego el segundo gol y Zé Roberto hizo el 3 a 0 final, que deja la ilusión óptica de una gran victoria.

En realidad fue una victoria administrada, burocrática, sin grandes momentos de fútbol, apenas con un par de destellos de genialidad, que no bastaron para borrar la impresión de opacidad que está dando esta selección brasileña.

No refleja el partido

Matthew Amoah, de Ghana: faltó definición.Imagen: AP

"Ganamos, pero el resultado no refleja el verdadero discurrir del partido", reconoció el técnico de Brasil, Carlos Alberto Parreira, que comenzó su carrera de entrenador hace casi 40 años, justamente en Ghana.

"Ghana tuvo buenas oportunidades en el primer tiempo y en realidad debió hacer un gol. Por suerte, nosotros aprovechamos nuestras oportunidades", agregó. Que no fueron muchas.

Kingston batido, a los cinco minutos de haber comenzado el partido.Imagen: AP

Con las esperanzas de todo un continente a cuestas, Ghana entró a jugar el partido como último representante de África. A los cinco minutos perdía ya por uno a cero. Kaká envió un pase en profundidad hacia Ronaldo, que eludió al guardameta con gran habilidad y envió el balón a las mallas.

Faltó definición

Diez minutos después, los ghaneses se habían recuperado y comenzaron a jugar fluidamente, con buen toque de balón, juego rápido y entradas en profundidad. Lo que les faltó fue definición, uno o dos delanteros con instinto y fuerza de gol. Una y otra vez tiraron sobre el arco de Dida, pero más bien disparos inofensivos o a las tribunas.

Y vino como tenía que venir: Brasil, de contragolpe, genera el 3 a 0, luego de centro de Cafú, que Adriano introduce por la derecha en el arco, en posición fuera de juego, pero que el árbitro asistente no vio por estar algo adelantado junto a la banda de costado.

Administración burocrática

El resto fue administración burocrática del resultado por parte de Brasil, que no gustó mucho a los aficionados, volcados en gran parte hacia Ghana, que corrió, luchó, lo intentó todo, aunque al final bastante sin cabeza, con pelotazos largos y tiros de larga distancia a las tribunas.

Cuando Ghana llegó cerca del arco de Dida, no supo definir. "Claro que no estoy satisfecho con el resultado", dijo el entrenador de Ghana, Ratomir Dujkovic. "Es un día triste para nosotros, pero igualmente estoy orgulloso de nuestros jugadores, que hicieron frente con valor a Brasil. Felicitaciones a Brasil. Perder contra ellos no es ninguna vergüenza", concluyó.

Brasil - Ghana 3:0 (2:0)

Goles:

1:0 Ronaldo (5.)
2:0 Adriano (45.)
3:0 Zé Roberto (84.)

Brasil: Dida - Cafú, Lucio, Juan, Roberto Carlos - Kaká (83. Ricardinho), Emerson (46. Gilberto Silva), Zé Roberto, Ronaldinho - Ronaldo, Adriano (61. Juninho).

Ghana: Pantsil, Mensah, Shilla, Pappoe - Eric Addo (60. Boateng), Appiah, Muntari, Draman - Amoah (70. Tachie-Mensah), Gyan.

Árbitro: Michel (Eslovaquia)

Espectadores: 65.000 (completo)

Tarjetas amarillas: Adriano, Juan / Appiah, Muntari, Paintsil, Eric Addo

Tarjeta amarilla-roja: Gyan (81./ por dejarse caer en el área de Brasil)

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