Cárcel para alemán que azuzó a su perro contra un refugiado
11 de diciembre de 2018
Publicidad
Un tribunal alemán condenó este martes (11.12.2018) a cuatro años de cárcel a un joven que insultó y escupió a una familia de refugiados sirios, para luego azuzar a su perro contra el padre, que recibió varios mordiscos mientras protegía al resto.
La Audiencia Provincial de Magdeburgo (este de Alemania) condenó por un delito de lesiones graves al joven de 24 años, que tenía un historial violento, no sólo con extranjeros.
El juez siguió el criterio de la fiscalía, que había pedido cuatro años, mientras que la defensa pedía la libre absolución del acusado, que ha negado en todo momento los hechos.
Según la reconstrucción de los hechos, el condenado se encontró a la familia de refugiados en un parque de Magdeburgo el pasado mayo y en un primer momento se limitó a insultarles, humillarles y a escupir frente a ellos.
Luego instigó a su perro para que atacase al padre, de 29 años, que se había puesto delante del resto para protegerlos. El condenado había ya azuzado a su perro contra otra persona en marzo y en febrero había agredido a un extranjero en el tranvía.
El condenado llevaba en prisión preventiva desde mayo. (EFE)
Deportaciones de Alemania a Afganistán
En diciembre de 2016 tuvo lugar la primera deportación colectiva de 34 afganos a los que les había sido denegado el asilo en tierras germanas. Alemania suspendió los vuelos en mayo de 2017, pero resolvió reanudarlos.
Imagen: picture-alliance/dpa/M. Balk
Vuelos polémicos
El 12 de septiembre de 2017, un avión despegó del aeropuerto de Düsseldorf con rumbo a Afganistán, llevando a bordo a 15 personas cuyas solicitudes de asilo habían sido rechazadas. Fue la primera deportación colectiva a ese país desde la explosión de un coche-bomba cerca de la embajada alemana en Kabul, en mayo. Los Verdes y La Izquierda calificaron la reanudación de las deportaciones de "cínica".
Imagen: picture-alliance/dpa/B. Roessler
Luchando por una oportunidad
En marzo de 2017, estudiantes de secundaria de Cottbus provocaron titulares con una campaña para salvar a tres compañeros afganos de la deportación. Hicieron manifestaciones, recolectaron firmas y dinero para contratar a un abogado que apelara contra la denegación del asilo. Sabían que sus amigos, entre ellos Wali (foto), no podían ser deportados mientras hubiera un proceso en curso.
Imagen: DW/S.Petersmann
"Kabul no es seguro"
"Viaje hacia el peligro mortal", dice este cartel que levanta un manifestante en el aeropuerto de Múnich, en febrero. En los aeropuertos alemanes suele haber protestas cuando se llevan a cabo deportaciones. Los manifestantes consideran que Afganistán es demasido peligroso como para que los refugiados regresen allí.
Imagen: picture-alliance/dpa/M. Balk
De Wuerzburgo a Kabul
Badam Haidari pasó siete años en Alemania antes de ser deportado a Afganistán, en enero de 2017. Previamente había trabajado para USAID en Afganistán y huyó de los talibanes, a los que sigue temiendo. Todavía alberga la esperanza de poder regresar a Alemania.
Imagen: picture-alliance/dpa/C.F. Röhrs
Minorías perseguidas
En enero de este mismo año, el afgano hindú Samir Narang fue deportado desde Hamburgo, donde había vivido cuatro años con su familia. El joven señaló en una entrevista radial que Afganistán "no es seguro". Afirmó que los miembros de minorías que regresan son blanco de presecución religiosa en ese país musulmán. La deportación de Samir "pone en peligro su vida", según change.org.
Imagen: picture-alliance/dpa/H. Wiedl
Ayuda a los retornados
Los solicitantes de asilo rechazados en Alemania y deportados a Kabul pueden dirigirse a la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) en busca de asistencia. También una organización de especialistas en materia psicosocial asesora a los retornados.