Perpetua para mercenario que mató al presidente de Haití
27 de octubre de 2023
El exmilitar Germán Alejandro Rivera García, detenido en Estados Unidos junto a sospechosos del asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moise, en 2021, fue condenado en una corte federal de Miami a cadena perpetua.
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Germán Rivera, de 44 años, se había declarado culpable el pasado mes de cuatro cargos por conspiración para realizar homicidio y secuestro. Durante la sentencia, que tuvo lugar este viernes en una corte federal de Miami ante el juez José E. Martínez, un "intérprete juró y el acusado fue posteriormente sentenciado", según documentos judiciales a los que tuvo acceso EFE.
El mercenario había comparecido ante la Justicia en Miami junto a los haitianos-estadounidenses James Solages, Joseph Vincent y Christian Sanon. Los cuatro habían sido trasladados a comienzos de año desde Puerto Príncipe, la capitalHaití,a Miami, donde, a excepción de Sanon, afrontaban un cargo de conspiración para cometer un asesinato o secuestro de una persona fuera de Estados Unidos.
Tres haitiano-estadounidenses, los autores intelectuales
Moise fue acribillado a tiros por un comando con armas y equipo militar que irrumpió en su residencia a las afueras de Puerto Príncipe el 7 de julio de 2021, el cual también hirió de gravedad a su esposa, Marine Moise. De acuerdo con la Fiscalía del Distrito Sur de Florida, los tres haitiano-estadounidenses se reunieron en abril de 2021 en el sur de este estado para discutir cómo promover un cambio en la Presidencia de la nación caribeña y, tras el encuentro, se elaboró una lista con equipo y armamento que incluía rifles, ametralladoras, gases lacrimógenos, granadas, municiones y chalecos antibalas.
El 10 de junio de 2021, Sanon envió desde el sur de Florida 20 chalecos balísticos para sus fuerzas militares privadas, sin las licencias de exportación correspondientes. Días después, Solages, Vincent, Rivera y otros intentaron sin éxito arrestar al presidente y secuestrarlo, tras lo cual el 28 de junio de 2021 Solages viajó desde Haití al sur de Florida para cerrar la operación contra Moise y luego, el 1 de julio, regresó a la isla para presuntamente participar en el asesinato.
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Exsenador haitiano ya fue condenado a cadena perpetua
El 6 de julio, Solages, Vincent, Rivera y otros se reunieron en una casa cercana a la residencia del presidente Moise, en la que "Solages anunció que la misión era matar al presidente Moise" y se procedió a la distribución de armas de fuego y chalecos antibalas, según la Fiscalía estadounidense.
Otros que fueron detenidos por este caso son el colombiano Mario Antonio Palacios Palacios, el empresario haitiano-chileno Rodolphe Jaar y el exsenador haitiano Joseph Joel John, arrestados el año pasado. Jaar se declaró culpable en marzo de brindar apoyo al comando que perpetró el asesinato del presidente haitiano y en junio pasado también fue sentenciado por un juez federal de Miami (Florida) a cadena perpetua.
Sobre Rivera, el tribunal recomendará que sea designado a una instalación federal ubicada "el sur de Florida o lo más cerca posible de ella", según indica la sentencia.
jov (efe, MiamiHerald)
Haití, entre el caos y los intentos de resurgir
Tras el devastador terremoto de Haití en enero de 2010, las donaciones fluyeron en miles de millones. Diez años después, la pobreza y la corrupción dominan los titulares del Estado caribeño. Pero hay esperanza de cambio.
12 de enero de 2010, poco antes de las 5 de la tarde: La tierra tiembla en el pequeño país que comparte la isla con República Dominicana. Intesidad de 7.0 en la escala de Richter. En algunos lugares se derrumbó el 90% de los edificios. Al menos 200.000 personas mueren y más de un millón se quedan sin hogar. Con 6.600 millones de dólares, los daños superan el producto interno bruto del país.
Imagen: AP
Catástrofe en el país de las crisis
Enero de 2011: Cruces en una fosa común cerca de la capital Puerto Príncipe. El terremoto golpeó a un país ya de por sí en crisis: en 2010, Haití era -y sigue siendo- el país más pobre del hemisferio occidental, sufriendo de sobrepoblación y corrupción. Los desastres naturales no son raros. Una epidemia de cólera que siguió al terremoto mató a miles de personas más.
Imagen: A.Shelley/Getty Images
Solidaridad global
Un momento de diversión en un campamento para víctimas del terremoto, construido en 2010 con la ayuda de la ONU, ONGs y particulares: el dinero fluyó desde todo el mundo para la reconstrucción. A nivel local, muchas organizaciones de ayuda han hecho un trabajo eficaz, construyendo casas, por ejemplo, dice a DW Bert Hoffmann, politólogo del Instituto Leibniz de Estudios Globales (GIGA).
Imagen: AP
Ayuda que destruye
Las donaciones de alimentos de Estados Unidos ayudaron a los afectados a corto plazo, explica Hoffmann. "Pero a largo plazo, el arroz gratis de EE.UU. ha llevado a los productores de arroz de Haití a una masiva bancarrota. Este tipo de ayuda no ha creado estructuras sostenibles para el país y ha aumentado la dependencia".
Imagen: AP
La crisis después de la crisis
Esperando trabajo: diez años después del terremoto, la calidad de vida de la mayoría de los haitianos ha empeorado. Más de la mitad de la población vive por debajo del umbral de pobreza de 2 dólares estadounidenses al día. Según la ONG alemana “Welthungerhilfe”, el 35% depende de las donaciones de alimentos. La ONG Médicos sin Fronteras demanda una atención médica básica adecuada.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/R. Blackwell
Protestas mortales
El desempleo masivo, la inflación, el crimen y el nepotismo han llevado a los haitianos a las calles durante el último año y medio, como aquí en noviembre de 2019, donde los enfrentamientos entre la policía y los manifestantes cobraron muchas vidas. "El peligro de una guerra civil está creciendo en Haití", advierte Pirmin Spiegel, director general de Misereor, una organización alemana.
Imagen: imago images/Agencia EFE/J. M. Herve
El presidente Moïse no quiere irse
Jovenel Moïse (centro), ocupa el cargo desde febrero de 2017. Entre otras cosas, se le acusa de haber malversado miles de millones de un fondo de solidaridad venezolano. Pero él se niega a renunciar. Cuando el parlamento se reúna de nuevo este 13 de enero, el mandato de la mayoría de los miembros habrá expirado, y Moïse podría teóricamente gobernar por decreto.
La oposición está fragmentada, pero los activistas quieren seguir luchando por el cambio. "Necesitamos un gobierno que responda a nuestras necesidades", dice Rese Domini (foto), de 31 años, de la organización MONEGAF. La activista Velina Charlier, de 39 años, le dijo a DW en diciembre que pidió "la renuncia de Moïse, un proceso anticorrupción y un cambio radical del sistema".
Imagen: Reuters/V. Baeriswyl
"Europa calla "
Mientras tanto, las organizaciones de ayuda humanitaria hacen un llamamiento a la comunidad internacional para que actúe. La ayuda alimentaria debe dar prioridad a los productos locales "para impulsar la economía nacional", declaró Welthungerhilfe en noviembre. Alemania y la Unión Europea también deben trabajar por un cambio político en Haití, exigió el director de Misereor.
Diciembre 2019, Puerto Príncipe: Dos amigos en la playa. La crisis actual no debe ocultar el hecho de que hay "muchas estructuras familiares y locales en Haití que funcionan", dice el politólogo Hoffmann. El Estado caribeño no es "un infierno en la tierra". Es un país muy pobre, pero generalmente pacífico y con una gran cultura. (jov/eal)