Son diferentes pero tienen intereses comunes: las Cámaras de Comercio de once países latinoamericanos aúnan esfuerzos para, desde Bruselas, incentivar a empresarios europeos a que vayan a hacer negocios a la región.
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Desde "el corazón de Europa”, las Cámaras de Comercio que representan a 11 países latinoamericanos -Chile, Colombia, Perú, México, Panamá, República Dominicana, El Salvador, Honduras, Costa Rica, Nicaragua y Belice- acaban de crear un plataforma para actuar conjuntamente en busca de incentivar la inversión y el comercio entre ambos continentes. "Es la culminación de muchos años de esfuerzo”, dice a DW Carlos Cabrejos, presidente de BelgoPerú.
"Con la creación de este cluster, se trata básicamente de que cuando haya intereses comunes actuemos en conjunto. Cada país conserva su propia identidad y sus proyectos individuales, informando a los otros”, explica a DW, por su parte, Christian Ghymers, presidente de la Cámara de Comercio Belgo-Chilena.
Se trata de un centro de información, en Bruselas, que se encargará de talleres y conferencias para motivar a los empresarios a detectar los nuevos negocios que los esperan al otro lado del océano.
Los más recientes
Hay que resaltar que todos los países de la Alianza del Pacífico tienen tratados de libre comercio con la Unión Europea. Los de Centroamérica, exceptuando Belice, un acuerdo de asociación.
Según un informe de la Comisión Europea, en los primeros dos años del acuerdo con Perú, 1.133 nuevas empresas exportaron de Perú al mercado europeo; 38% eran del sector agrícola, la mayoría de ellas (97,4%) pequeñas y medianas empresas (PYMES). El otro 2,6% fueron grandes exportadores que fueron responsables del 68% del volumen.
En el caso de Colombia, se han creado 526 empresas, de las cuales sólo 8 exportaron más de un millón de dólares al mercado europeo.
Por otra parte, desde la aplicación del Acuerdo de Libre Comercio con ambos países (2013), las exportaciones de productos agrícolas de la UE ha aumentado considerablemente (73% , Perú; 82%, Colombia).
En el caso de Centroamérica, las exportaciones hacia el bloque comunitario han aumentado, en promedio, un 13,8%. Por el contrario, la utilización de las preferencias existentes se mantiene más bien baja en cuanto a exportaciones de la UE a Centroamérica.
Tiempo de alianzas
"El objetivo es salir de la hiper especialización tradicional y poner en común las ventajas comparativas. Entre los países de la Alianza del Pacífico hasta el 2020 no habrá trabas arancelarias, lo cual permite concebir cadenas de valor donde cada país ponga lo mejor para contribuir a una exportación intrarregional y también hacia la UE”, sigue Ghymers. "Para ello queremos atraer la inversión a la región: a mayor inversión, mayor flujo de comercio de exportación”, añade.
Por otra parte, "Costa Rica tiene acuerdos de libre comercio con los cuatro países de la Alianza del Pacífico, se trata de una reducción arancelaria para el 70% de los productos”, recuerda a DW Istvan Alfaro, embajador de Costa Rica ante la UE, quien subraya que Centroamérica tiene con la Unión Europea el único acuerdo de región a región que existe.
"Somos países muy diferentes los de la Alianza del Pacífico y los centroamericanos, pero los de la UE también lo son. Estamos dispuestos a cooperar entre nosotros, generando más oportunidades de negocios para generar oportunidades de empleo”, agrega.
Con un acuerdo con UE-Mercosur en el umbral, con un Argentina que querría incorporarse a la Alianza del Pacífico, economistas como Ghymers ven en el incremento de los lazos económicos –también los no tradicionales como la economía digital- sólo virtudes. "Hay que recordar que países como Chile tienen acuerdos comerciales con muchos países y que ha rescatado la Alianza Transpacífica. Sólo nos falta incluir a China y habremos rescatado el multilateralismo de las actuales tendencias proteccionistas”, recalca.
¿En concreto?
Así las cosas, con el pragmatismo como base, la plataforma busca poner la miel en los labios a los empresarios europeos. Minería y bienes primarios tradicionales, también gastronomía, movilidad, servicios, infraestructura, digitalización, turismo: las posibilidades para invertir en la región se pintan a todo color.
El punto está en que antes de invertir, hay que conocer el terreno. "Entre 800 y 1000 dólares diarios cuesta un consultor para hacer la prospección de mercado en primera fase. Para la pequeña y mediana empresa es un presupuesto demasiado alto”, explica Cabrejos.
"Nosotros ofrecemos el trabajo de primera línea: las agendas, los contactos. En ambos sentidos”, agrega Cabrejos. Y si bien hay diferentes intereses y volúmenes, "hay puntos en los que convergen y nosotros les abrimos el camino sea para frutas tropicales, cacao, café, ferias o hacia los clusters industriales y tecnológicos que están ubicados, por ejemplo, en puertos como el de Amberes”, concluye.
Autora: Mirra Banchón (CP)
Patrimonio Cultural Inmaterial en América Latina
Cada país cuenta con valiosas tradiciones heredadas de los antepasados y que dan sentido a la comunidad. Aquí, algunas expresiones latinoamericanas del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO.
Imagen: DW/Rosa Muñoz Lima
México: Parachicos
Ataviados con una colorida indumentaria que incluye máscaras de madera, los parachicos danzan desde la mañana hasta la noche en la tradicional fiesta grande de Chiapa de Corzo, que se celebra entre el 4 y el 23 de enero. La festividad, que incluye artesanía y gastronomía, tiene un profundo arraigo en la comunidad.
Imagen: UNESCO/Coord. Ejec. Bicentenario Independencia y Centenario Revolución. Estado de Chiapas
Sombrero de paja toquilla
Tejer un sombrero es mucho más que fabricar una pieza de artesanía o vestuario. Es parte de la ientidad de los pueblos de la zona costera de Ecuador. Las complejas técnicas, que han pasado de generación en generación, incluyen desde la preparación de la fibra que se extrae de una particular palma del litoral, hasta el tejido. Dependiendo de la complejidad del diseño, puede tomar hasta ocho meses.
Imagen: UNESCO/Instituto Nacional Patrimonio Cultural
Colombia y Ecuador: Marimba
La música de marimba, el xilófono de madera de palma con tubos resonadores de bambú, se acompaña con tambores y maracas, en bailes y cantos tradicionales que forman parte de la identidad de la población afrodescendiente de la región colombiana del Pacífico Sur y de la provincia ecuatoriana de Esmeraldas. Imprescindible en danzas, rituales, ceremonias religiosas y festivas.
Imagen: UNESCO/Fundación Pilifonía
Cuba: Rumba
La rumba cubana funde raíces africanas con elementos del flamenco español. La fuerza de la percusión, que marca el ritmo de estos sonidos contagiosos, se suma a una serie de elementos de comunicación entre quienes se dejan llevar por este sonido que contagia entusiasmo, y que las familias y comunidades se han encargado de cultivar y mantener vivo.
Imagen: UNESCO/Medina Hernández, AHS
Perú: Danza de las tijeras
Esta danza ritual en forma de competencia se realiza con hojas metálicas que los bailarines entrechocan, al compás de la música, realizando pasos cada vez más complejos. El duelo puede durar hasta diez horas. Es practicada por los pueblos quechuas del sur de la cordillera andina central del Perú y comunidades de zonas urbanas del país.
Imagen: Ministerio de Cultura de Perú
Colombia: Carnaval de Barranquilla
Cuna de mestizaje de distintas culturas, la diversidad se expresa en Barranquilla en diversos géneros musicales, bailes y tradiciones. En el carnaval no faltan representaciones, disfraces y carros y amplia cobertura mediática. “La creciente comercialización constituye una amenaza potencial para la supervivencia de numerosas expresiones tradicionales”, advierte la UNESCO.
Imagen: picture alliance / Demotix
Bolivia, Chile y Perú: Música Aymara
El proyecto de CRESPIAL “Salvaguardia del Patrimonio Cultural de la Comunidades Aymara de Bolivia, Chile y Perú” fue reconocido en el Registro de Buenas Prácticas del Patrimonio Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO. Las medidas de conservación incluyen el registro en terreno de expresiones musicales que acompañan actividades agrícolas y religiosas.
Imagen: Ministerio de Cultura y Turismo de Bolivia
Uruguay: Candombe
El sonido de los tambores en tres barrios de Montevideo, con población de origen africano, anuncia el desfile y la fiesta que une a estas comunidades. A la cabeza, los tambores principales y tras ellos los demás tamborileros. Su ritmo marca las llamadas y respuestas entre los barrios, en un signo profundo de identidad y práctica social colectiva.
Imagen: Comisión Patrimonio Cultural Uruguay/Rodrigo López
Argentina y Uruguay: Tango
Nacido en la cuenca del Río de la Plata, entre las clases populares de Buenos Aires y Montevideo, el tango es quizás la expresión latinoamericana más conocida a nivel mundial. “Ha difundido el espíritu de su comunidad por el mundo entero, adaptándose a nuevos entornos y al paso del tiempo”, dice la UNESCO. Compositores, músicos, coreógrafos, bailarines y la comunidad toda, mantienen al tango vivo.
Imagen: UNESCO/Min. Cultura Buenos Aires
Argentina: Fileteado porteño
Esta técnica pictórica tradicional de Buenos Aires, que combina colores vivos y estilos tipográficos, se puede apreciar en autobuses, camiones, letreros de tiendas y almacenes. Dibujos de personajes célebres, con dichos y refranes, son parte de este particular estilo, que los artesanos se encargan de transmitir a nuevas generaciones.
Imagen: UNESCO/Diego Arquimbau
Chile: Tesoros humanos vivos
En Chile, tomando la recomendación de la UNESCO, el Ministerio de la Cultura reconoce a personas y comunidades cultoras del patrimonio cultural inmaterial. Algunos son los últimos que mantienen vivas antiguas tradiciones. Amalia Quilapi, artesana mapuche del sur de Chile, fue premiada por su dominio de la técnica del trarikan, tejido a telar de diseños iconográficos.
Imagen: CNCA-Chile
Rapa Nui: tradición del Kai Kai
Otro Tesoro Humano Vivo distinguido por el Estado chileno es Isabel Pakarati, conocedora de la tradición oral del Kai Kai de la cultura Rapa Nui, en Isla de Pascua. Se trata de relatos ancestrales por medio de juegos de hilos, que combinan tradición oral y canto. Isabel transmite también este saber, a través del cual se conserva la memoria de su pueblo, a las nuevas generaciones.