Checos recuerdan la anexión de los Sudetes por Hitler
22 de septiembre de 2018
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Varias asociaciones de historia militar de la República Checa escenificaron este sábado (22.09.2018) en la localidad de Starkov, al norte del país centroeuropeo, el ambiente que se respiraba en la región de los Sudetes antes de su anexión por la Alemania de Adolf Hitler hace 80 años.
Casi un millar de personas asistieron a esta puesta en escena, en la que ha participado una comparsa de 150 actores y en la que han resonado las balas de fogueo de las carabinas Mannlicher y rifles cortos Mauser utilizados en la época.
En septiembre de 1938 Checoslovaquia atravesaba momentos de máxima tensión después de que Hitler arengara a sus seguidores, en la cumbre del Partido Nacionalsocialista (NSDAP) celebrada en septiembre de 1938 en Núremberg, con un discurso incendiario sobre las nuevas fronteras de una Alemania que pretendía anexionar los Sudetes.
En esta región checoslovaca vivían entonces más de dos millones de checo-alemanes autóctonos, y ante esas amenazas de Hitler, Praga movilizó el 23 de septiembre a más de un millón de hombres para hacer frente al desafío nazi. La escenificación consistió en la toma del control por la fuerza paramilitar pronazi "Freikorps" del ayuntamiento de Starkov, sin que carabineros y policías de fronteras pudieran impedirlo, pero tras la llegada de efectivos del Ejército se ha podido reducir a los insurrectos.
Richard Stepanek, presidente de la asociación de historia militar "T-S 20 Plan", dijo que esta conmemoración tiene un carácter más bien "folclórico", sin peligro de enturbiar las relaciones con el vecino germano, si bien los más viejos de la localidad siguen, a la vuelta de los años, sin ver con buenos ojos a los alemanes y lamentan lo que significó el Tratado de Múnich, que entregó esa región a la Alemania nazi.
"Fue innecesario. Deberíamos habernos defendido. Teníamos búnkeres y capacidad para vencer", dijo a EFE Olda, que vive en la localidad vecina de Hronov y cuya familia fue enviada a repoblar esta zona tras la expulsión de los checo-alemanes de los Sudetes tras la Segunda Guerra Mundial.
Esos momentos trágicos precedieron a la firma del Tratado de Múnich, del que ahora se cumplen 80 años y que supuso la primera ruptura del país al serle arrebatados, sin que los checos pudieran intervenir, 22.608 kilómetros cuadrados de territorio. El documento que lleva el nombre de la capital bávara y firmado el 29 de septiembre de 1938, fue una claudicación europea al imperialismo nazi, pero entonces se vio como paso a la paz. (EFE)
Rusia conmemora 75 aniversario de victoria de Stalingrado
Moscú ha capitalizado el concepto unificador que supone el triunfo de la Unión Soviética sobre la Alemania nazi en Stalingrado. El 75 aniversario se celebra a solo dos meses de las presidenciales rusas.
Imagen: Reuters/M. Shemetov
Un triunfo que marcó la Segunda Guerra Mundial
Rusia celebró el 75 aniversario de la exitosa defensa de Stalingrado el viernes (02.02.2018) ante sus imponentes memoriales y desfiles militares cargados de patriotismo. El presidente Vladimir Putin fue figura omnipresente, dejando coronas, dirigiéndoe a los veteranos y asistiendo a las paradas militares. Acá lo vemos ante la estatua "¡La Madre Patria Llama!" en Volgogrado, la antigua Stalingrado.
Imagen: Reuters/M. Shemetov
Putin pide respeto para los veteranos
El presidente ruso dijo a los veteranos que la victoria en Stalingrado era inspiradora. "La resistencia y la disposición al sacrificio fueron invencibles, incomprensibles y aterradores para el enemigo", dijo. "Los defensores nos han legado una enorme enseñanza: amor por la madre patria, disposición a proteger sus intereses y su independencia, mantenerse firmes para enfrentar cualquier desafío".
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Desfiles militares
Las cifras oficiales calculan en 30 mil el número de personas que se acercaron a presenciar la parada militar conmemorativa realizada a lo largo de las avenidas de Volgogrado, a pesar de las gélidas temperaturas bajo cero que marcaron la jornada. La parada incluyó a unos 1.500 soldados, vehículos armados y aviones de combate sobrevolando la ciudad.
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Imponentes vehículos armados
En el desfile participaron también 75 tanques, uno por cada año transcurrido desde la victoria, así como un sistema de misiles Iskander y un avanzado sistema de misiles S-400 tierra-aire, que Rusia desplegó en Siria. Las fuerzas de tierra incluyeron tanques T-90 y vehículos de infantería Tigr, también conocido como GAZ-2975.
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Nostalgia del Ejército Rojo
El desfile incluyó el paso de personas (controladores de tráfico, según algunas fuentes) vestidas con los uniformes de invierno del Ejército Rojo. El triunfo de la Unión Soviética sobre los nazis es uno de los pilares de la identidad de la moderna Rusia y Moscú lo utiliza cada vez más para avivar el patriotismo. Por cierto, es casi un hecho que Putin será reelecto en las presidenciales de marzo.
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Iconografía soviética por doquier
Otras manifestaciones de la nostalgia del viejo esplendor militar comunista incluyeron el desfile de miembros de la Yunarmiya (Ejército Joven), un movimiento patriótico y militar. A eso hay que sumar el paso de soldados con imágenes de héroes de guerra soviéticos y pancartas al estilo soviético.
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Una derrota aplastante
La batalla de Stalingrado comenzó el 23 de agosto de 1942 y se extendió por casi seis meses. Fue uno de los enfrentamientos más sangrientos de la historia, en el que murieron más de dos millones de personas, entre soldados y civiles. El VI Ejército nazi, bajo el mando del mariscal Friedrich Paulus, se rindió el 2 de febrero de 1943, la primera rendición nazi desde el comienzo de la guerra.