Chile: protestas contra Gobierno dejan más de 60 capturas
7 de marzo de 2021
Pese al habitual cerco de policías apostado en la zona de la Plaza Italia, un numeroso grupo logró tomar el sitio entre lienzos, banderas y batucadas.
Imagen: Luiz Hidalgo/Aton Chile/imago images
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El Cuerpo de Carabineros (policía militarizada chilena) informó este sábado (06.03.2021) de la detención de más de 60 personas durante las protestas que se produjeron en la tarde del viernes en el centro de la capital en contra del Gobierno de Sebastián Piñera, donde participaron más de 600 personas y se registraron disturbios el término de la jornada.
Pese al habitual cerco de policías apostado en la zona para proteger la emblemática Plaza Italia, punto neurálgico de las protestas desde el inicio del llamado estallido social en octubre de 2019, un numeroso grupo logró tomar el sitio entre lienzos, banderas y batucadas. Los intentos policiales por disuadir a la multitud, con el uso de carros lanza aguas y tanquetas lanza gases además de personal a pie, derivaron en fuertes enfrentamientos callejeros, que se extendieron varias cuadras hasta el poniente de la capital chilena a poca distancia del Palacio de La Moneda.
En medio de los disturbios, un grupo de manifestantes incendió el monumento instalado en el centro de la renombrada como Plaza de la Dignidad, estatua dedicada a una figura militar chilena del siglo XIX que se alza en medio de la rotonda. Cerca de las 21:00 hora local (00:00 GMT), un carro lanza aguas de Carabineros apagó el fuego mientras el tráfico permanecía interrumpido por la acción de barricadas incendiarias en calles aledañas.
Después de la quema del monumento al general Manuel Baquedano, veterano de la Guerra del Pacífico y latifundista, el Ejército de Chile emitió un comunicado condenando los hechos, catalogando de "cobardes desadaptados" a los "antichilenos" que "cometieron un acto indignante y repudiable".
El país vive desde finales de 2019 movilizaciones continuas con reflujos que se ven casi todas las semanas, dejando en su etapa más grave a decenas de muertes, cientos de personas con trauma ocular producto de acciones de agentes del Estado y miles de pacientes con lesiones.
ama (efe, dpa, europa press)
Chile: la semana en que se desató la furia (octubre de 2019)
Las protestas por el alza del pasaje del Metro se convirtió rápidamente en una expresión de descontento popular que no ha logrado ser controlada, ni siquiera por intermedio de la presencia de militares.
Imagen: picture-alliance/AP Images/E. Felix
Todo partió con la evasión
Las manifestaciones contra el alza en el precio del boleto del Metro comenzaron el 14 de octubre y fueron convocadas por secundarios, que se coordinaron a través de las redes sociales. Cuando los entrevistaban, decían hacerlo por sus padres, que ya gastan mucho dinero en transporte. El llamado era a evadir el pago saltando las barreras en las estaciones del ferrocarril urbano de Santiago.
Imagen: Reuters/C. Vera
Vandalismo y enfrentamientos
La manifestación, originalmente pacífica, fue reprimida por la policía militarizada chilena, lo que generó malestar entre los jóvenes. La consigna "basta de abusos", sin embargo, comenzó a permear otras capas sociales en un país donde la desigualdad no ha podido ser eficientemente combatida en los últimos años. Comenzaron, así, los primeros enfrentamientos con la policía.
Imagen: Reuters/I. Alvarado
El caos se extiende
Las protestas se extendieron rápidamente por todo Santiago, y al comienzo tímidamente en otras regiones del país. También empezaron los saqueos a supermercados y la destrucción de bienes públicos y privados. Al mismo tiempo, la ciudadanía siguió expresando su malestar por el alto costo de la vida, bajos salarios, pensiones miserables y otros problemas a través de ensordecedores cacerolazos.
Imagen: Getty Images/AFP/C. Reyes
La destrucción del Metro
Quizás las escenas más desoladoras para los santiaguinos, siempre orgullosos de su Metro, fueron las que mostraban la destrucción de casi un centenar de estaciones del tren urbano, las que fueron incendiadas y vandalizadas por hordas. Algunos ataques parecieron coordinados. A estas alturas, las fuerzas de seguridad se vieron superadas por la acción de inadaptados.
Imagen: AFP/J. Torrest
Militares a la calle
El viernes 18 de octubre, el presidente Sebastián Piñera decretó el estado de excepción y ordenó que las Fuerzas Armadas salieran a las calles para ayudar a restaurar el orden. Pronto los militares, ya a cargo de la seguridad, decretaron toque de queda en la capital y otras ciudades, pues las protestas, pero también los saqueos, se habían extendido a todo el país.
Imagen: picture-alliance/AP Images/AP Photo/E. Felix
Toque de queda y problemas
El toque de queda, una medida constitucional que no se utilizaba desde la dictadura de Augusto Pinochet, generó una serie de dificultades. El aeropuerto de Santiago se vio totalmente colapsado debido a que se suspendieron vuelos porque las tripulaciones no pudieron llegar a trabajar y muchos turistas quedaron varados en el terminal aéreo, sin recibir información ni tener acceso a alimentación.
Imagen: Imago-Images/Aton Chile/D. Yankovic
Medida ineficaz
A pesar del toque de queda y de la cada vez más dura represión, las protestas siguieron su curso, incluso una vez que imperaba la prohibición de salir de los hogares. Las fuerzas de seguridad seguían viendo con impotencia los saqueos, incendios de centros comerciales y siendo muchas veces desbordados por las masivas manifestaciones pacíficas, en las que -de todas formas- actuaban con dureza.
Imagen: imago images/Aton Chile/J. Torres
Numerosas denuncias de abusos
Los desmanes y la represión han dejando una veintena de muertos, casi 200 heridos a bala, más de 5.000 detenidos y daños, solo en el Metro, que superan los 300 millones de dólares. El Instituto de Derechos Humanos denunció que al menos cinco de las muertes fueron obra de la acción desmedida de las fuerzas de seguridad, y en un caso un militar fue detenido por haber disparado contra un ciudadano.
Imagen: Getty Images/AFP/M. Bernetti
Un paquete de medidas
El martes 22 de octubre en la noche, el presidente Piñera presentó un paquete de medidas con las que pretende calmar la furia ciudadana. Entre ellas está un aumento de la pensión básica y del salario mínimo, la reducción del sueldo de los parlamentarios y la creación de un seguro de salud para enfermedades catastróficas. El paquete surgió tras una reunión con partidos de gobierno y oposición.