Chileno premiado en Alemania por luchar por el agua
22 de septiembre de 2019
Rodrigo Mundaca criticó que su país lleve a cabo una agricultura intensiva para abastecer a los supermercados europeos.
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El chileno Rodrigo Mundaca fue distinguido este domingo (22.09.2019) en Alemania con el Premio Internacional de Derechos Humanos de Núremberg, dotado con 15.000 euros, por su incansable lucha en favor del libre acceso al agua potable.
La política luxemburguesa Anne Brassseur, miembro del jurado, elogió en su discurso el "incansable compromiso" de Mundaca, con el que tanto el activista, de 58 años, como aquellos que le apoyan "luchan no sólo por un derecho elemental" en Chile, sino lanzan asimismo un llamamiento al mundo para hacer un uso diferente y más responsable de este "valioso recurso que es el agua".
Mundaca, por su parte, dedicó el premio, que calificó de "distinción inesperada", a los ciudadanos asesinados y detenidos en Chile. Su lucha no busca ser aplaudida, dijo, sino que representa la inquietud de una parte de la población que lamenta que se le esté quitando el agua y que quiere alzarse en favor del alimento más importante del mundo: el agua.
Denunció que desde hace 39 años los derechos del agua se encuentran en manos privadas. Mundaca lamentó que el 90% de la tierra agrícola en Chile se dedique al cultivo de aguacate, una fruta tropical, recordó, que requiere mucha agua y para la cual se tiene que buscar este recurso a cien metros de profundidad.
Criticó, asimismo, que se llevé a cabo una agricultura intensiva para abastecer a los supermercados en Europa y China. En su opinión, los niños nacidos en Chile ya no saben qué es un río.
Mundaca, que en su discurso hizo un llamamiento a la solidaridad internacional, sufre en su país constantes intimidaciones debido a su actividad y ha tenido que comparecer ante los tribunales en repetidas ocasiones.
Alrededor de 2.100 millones de personas en todo el mundo no tienen acceso regular a agua potable.
El Premio Internacional de Derechos Humanos de Núremberg, que este año celebra su 13ª edición, fue creado en 1995 con el objetivo de honrar, cada dos años, el valiente compromiso de activistas que con frecuencia asumen riesgos personales en defensa de los derechos humanos.
eal (efe, sueddeutsche.de)
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Cambio climático: maravillas que hay que visitar antes que desaparezcan
Desde la Gran Barrera de Coral hasta los majestuosos glaciares, crece el número de turistas que visita lugares que se teme desaparecerán con el cambio climático.
Imagen: picture-alliance/McPhoto/SBA
Tesoro con fecha de caducidad
Dos millones de personas visitan anualmente la Gran Barrera de Coral. Una encuesta realizada en 2016 descubrió que el 69% de ellos quería ver este patrimonio mundial de la Unesco "antes que fuera demasiado tarde". Y no debe sorprendernos. El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático dijo que si no se limita el calentamiento global, el 99 por ciento de los corales desaparecerá.
Imagen: picture-alliance/dpa/N. Probst
Por ver a los osos
¿Pero no resulta desastroso volar en avión para visitar estos lugares? Un estudio de 2010 descubrió que los safaris para ver osos polares en Churchill, Canadá, dejan una huella de carbono de 20 megatones. La mayoría de los turistas llega en avión, y si bien el 88% asume que los humanos somos responsables del cambio climático, solo el 69% está de acuerdo en que viajar en avión daña el planeta.
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Arte apocalíptico
Junto con el oso polar, los icebergs esculpidos por el aumento de la temperatura son imágenes icónicas del cambio climático. Deslizarse entre los gigantes que se derriten en un crucero es una experiencia inolvidable por la que los turistas están dispuestos a pagar fuertes sumas. A principios de los 90, solo 5.000 personas visitaban la Antártida cada año. En 2018 fueron 46.000.
Imagen: S. Weniger/M. Marek
Temporada alta
No hay que visitar los polos para ver cómo se derriten los hielos. La nevada cima del Kilimanjaro es una de las postales más impresionantes que se ven en la sabana ecuatorial, donde los negocios relacionados con el turismo generan anualmente 44 millones de euros. Muchos visitantes suben al glaciar Furtwängler, que en el último siglo ha perdido el 85 por ciento de su hielo.
Imagen: picture-alliance/dpa/R. Schnoz
Rey sin corona
El Parque Nacional de los Glaciares tenía más de 100 de esos glaciares en 1910. Ahora hay poco más de dos docenas. Tan dramático es este retroceso que el parque se ha convertido en un centro para la investigación climatológica. Unas 3 millones de personas visitan anualmente la "corona del continente" para observar los últimos restos de una gloria que estuvo cubierta de hielo.
Imagen: Imago Images/Aurora/J. Miller
Paraíso perdido
Las Maldivas son un paraíso turístico. 1.200 islas de coral con playas de arenas blancas que se encuentran apenas a 2,5 metros sobre el nivel de las aguas. En 2017, el presidente decidió construir nuevos aeropuertos y resorts para recibir siete veces más turistas y usar los ingresos en la construcción de nuevas islas y reubicar comunidades. Luego fue expulsado del cargo y acusado de corrupción.
Imagen: Colourbox
Pantanos de agua salada
No solo las islas quedarán sumergidas ante el crecimiento del nivel de los océanos. Humedales como los Everglades de Florida también están desapareciendo. En el último siglo, cerca de la mitad fue drenada para ser utilizada como terreno agrícola. Ahora, el agua salada se está filtrando, haciendo que éste sea el único patrimonio mundial de Estados Unidos que se halla en peligro.
Imagen: Imago/Robertharding/F. Fell
Perturbando la paz
Charles Darwin notó que la fauna única de las Galápagos respondía a generaciones de vida aislada. Hoy, las islas son invadidas y asediadas por los turistas y el cambio climático, que está ocurriendo demasiado rápido, impidiendo que las especies se adapten a estas transformaciones. El calentamiento global ha dejado a criaturas únicas, como la iguana marina, al borde de la desaparición por hambre.