"No hay ganadores en una guerra comercial", dijo el ministro de Comercio Zhong Zhang en el marco de la Asamblea Nacional Popular. "Solo traerá desastres a China, Estados Unidos y el mundo".
Publicidad
El ministro chino de Comercio, Zhong Zhang, descartó que su país vaya a iniciar una guerra comercial con Estados Unidos cuyos resultados, dijo, serían "desastrosos" para ambos países y el resto del mundo. Zhang señaló en una rueda de prensa en Pekín en el marco de la Asamblea Nacional Popular (previa a la del Partido Comunista) que en las guerras comerciales no hay nunca ganadores y que se podría poner en peligro el crecimiento económico global.
Aunque descartó el inicio de una guerra comercial, recordó que China puede hacer frente al desafío y defenderá los intereses nacionales. El gigante asiático ha criticado con dureza los nuevos aranceles anunciados el jueves que, en su opinión, tendrán un "grave impacto" sobre el comercio internacional y ha pedido a Estados Unidos que los retire "lo antes posible".
Por su parte, la Asociación China del Hierro y el Acero (CISA) ha pedido a las autoridades chinas que responda ante estos aranceles que "violan las normas de la Organización Mundial del Comercio" con otras medidas sobre las importaciones estadounidenses, apuntando al sector del carbón, central para la base política de Trump y su compromiso electoral de relanzar la industria y los empleos en el país.
La decisión de Trump, que argumentó que el acero y el aluminio son "vitales" para la "seguridad nacional", ha suscitado una gran preocupación acerca de una posible guerra comercial por represalias de otros socios comerciales, entre ellos Europa o China. Zhang afirmó que las cifras oficiales de déficit comercial de Estados Unidos habían sido sobreestimadas en aproximadamente un 20 por ciento y, en cualquier caso, sería mucho menor si los estadounidenses relajaran las restricciones a la exportación de productos de alta tecnología.
LGC (EFE/Reuters)
Deutsche Welle es la emisora internacional de Alemania y produce periodismo independiente en 30 idiomas. Síganos enFacebook | Twitter | YouTube |
Cuenca del Ruhr: el brillo de la historia
Las torres de extracción de las antiguas minas de carbón se extienden por todo el territorio de la Cuenca del Ruhr. El lugar se destaca especialmente de noche por su brillo especial.
Imagen: DW/J.Stroisch
Huellas de la industrialización
Las torres de extracción de las antiguas minas de carbón se extienden por todo el territorio de la Cuenca del Ruhr, como aquí, en la mina Zollverein, de Essen. El lugar se destaca especialmente de noche por su brillo especial.
Imagen: DW/J.Stroisch
Museo al aire libre
La antigua planta siderúrgica Duisburg-Meiderich produjo hasta 1.000 toneladas de hierro por día durante décadas. Hoy se puede visitar el parque temático y las ruinas industriales durante las 24 horas. Los altos hornos ofrecen un bello panorama de la región.
Imagen: DW/J.Stroisch
Algo más que nostalgia
Las torres de extracción no solo avivan el recuerdo de épocas pasadas. También hay que ocuparse de ellas y bombear para extraer el agua que se acumula allí. La superficie del terreno se desniveló y está hoy por debajo del nivel del mar, por lo cual la zona está amenazada de hundimiento.
Imagen: DW/J.Stroisch
Las escombreras
Con el paso de los años se formaron escombreras en las minas, lugares donde se depositaban las rocas extraídas que no se utilizaban en la industria. En la escombrera Haniel, una cruz recuerda la visita a la mina del Papa Juan Pablo II en 1987.
Imagen: DW/J.Stroisch
Tetraedro
Muchas de las escombreras fueron marcadas con un mojón. El tetraedro colocado en 1995 sobre la escombrera de la Beckstraße –una torre panorámica en forma de pirámide- se ha convertido, entretanto, en un símbolo de la ciudad de Botropp.
Imagen: DW/J.Stroisch
Arte moderno
Otra de las marcas se encuentra desde 2010 en el Angerpark, un museo al aire libre de la ciudad de Duisburgo. Se la llamó “Tiger and Turtle”, y fue construida con forma de montaña rusa. El tramo de 200 metros de largo se puede recorrer en parte, y está iluminado por la noche.
Imagen: DW/J.Stroisch
Auslaufmodell Zeche
Zwei Zechen im Ruhrgebiet fördern derzeit noch Kohle. Die Zeche Prosper Haniel in Bottrop etwa baut 3,2 Millionen Tonnen im Jahr ab. Spätestens 2018 jedoch wird auch sie geschlossen - zu teuer ist die Förderung.
Imagen: DW/J.Stroisch
Espectáculo impresionante
La planta de producción de carbón de coque trabajaba día y noche. Cada 15 minutos se ponían en marcha los hornos de los que se extraía luego la hulla hirviente. Para que no se transformara en cenizas, se lo apagaba con agua, lo que producía un vapor que salía por las tuberías.
Imagen: DW/J.Stroisch
Plantas siderúrgicas con futuro
Las plantas metalúrgicas seguirán trabajando después de 2018 con carbón importado. Esta fábrica de Duisburg produce 5,2 millones de toneladas anuales de acero y es la segunda mayor planta en toda Alemania.