China y Nepal se ponen de acuerdo en la altura del Everest
8 de diciembre de 2020
Un anuncio conjunto de los ministros de Exteriores de ambos países termina con años de polémica sobre la altura de la montaña más alta del mundo.
Publicidad
Nepal y China fijaron este martes (08.12.2020) la altura del monte Everest en 8.848,86 metros, según revelaron en un anuncio conjunto tras colaborar en una medición que pone fin a años de polémica y preguntas sobre cuánto mide el pico más alto del mundo.
"La altura del monte Everest es de 8.848,86 metros", dijo el ministro de Exteriores de China, Wang Yi, desde Pekín, mientras mantenía una comparecencia conjunta por videoconferencia con el ministro de Exteriores de Nepal, Pradeep Gyawali, desde Katmandú.
Hasta ahora, Katmandú, país al que pertenece la vertiente sur del Everest fijaba la altura en 8.848 metros, respetando una medición internacionalmente reconocida realizada por la India en 1955, mientras que para Pekín el monte medía 8.844,43 metros, según su última medición efectuada en 2005.
Esta es pues la primera vez que los dos países, Nepal y China, se ponen de acuerdo en la altura del Everest, poniendo así fin a una controversia que rodea al techo del mundo desde que fue medido por primera vez en 1849 por los británicos.
"Para Nepal, este es un momento especial para todos. El monte Sagarmatha (nombre del Everest en nepalí), Qomolangma (en tibetano), se ha mantenido como un símbolo eterno de buena relación y amistad continua entre Nepal y China", aseguró el ministro Gyawali.
lgc (efe/dpa)
En lo alto: las montañas más bellas de Alemania
Desde 2003, la ONU celebra el 11 de diciembre como Día Internacional de las Montañas para poner en relieve la protección de estos especiales paisajes. Aquí algunos de los picos más famosos y notables de Alemania.
Imagen: picture-alliance/Dumont/C. Baeck
El Zugspitze, en los montes Wetterstein
Con 2962 metros de altura, el Zugspitze en los Alpes bávaros es la montaña más alta de Alemania. Un teleférico lleva a los visitantes a la cima en solo diez minutos, donde los espera una zona de esquí, un hotel iglú, pistas de trineo y restaurantes con espectaculares vistas panorámicas.
Imagen: picture alliance/dpa/S. Schuldt
El monte Brocken, en la Sierra del Harz
La montaña más alta del norte de Alemania es un gran destino para los amantes de la literatura, la historia y la naturaleza. A una altitud de 1.141 metros, un museo ofrece información sobre la flora y la fauna, así como acerca de los mitos y leyendas de la región. Durante la Guerra Fría se construyó una estación de escucha soviética en Brocken.
Imagen: picture-alliance/dpa/S. Pförtner
Wasserkuppe, en el Rhön
Aunque el Wasserkuppe, en el centro de Alemania, mide solo 950 metros de altura, tiene una temperatura especial, por lo que se convirtió en la cuna de la práctica del vuelo en planeador en el país a principios del siglo XX. El Wasserkuppe es el pico más alto del sistema montañoso del Rhön. La cordillera baja se encuentra en la frontera entre los estados federados de Hesse, Baviera y Turingia.
Imagen: picture alliance/ImageBROKER/M. Siepmann
El peñasco de Loreley, en el Rin
Según la leyenda, una sirena de pelo dorado llamada Loreley vivió una vez en esta peña, atrayendo a la muerte a los marineros con su canto. Hoy en día, Loreley es uno de los destinos turísticos más populares del romántico Valle del Rin, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO por su importancia cultural, geológica e histórica.
Imagen: picture alliance/J.W. Alker
La montaña Feldberg, en la Selva Negra
La Selva Negra le hace honor a su nombre: bosques densos y oscuros aún dominan la cadena montañosa baja en el suroeste de Alemania. Con buen tiempo, la torre de observación de Feldberg (1.493 metros) ofrece luz y buena visibilidad. Además, numerosos senderos de senderismo y pistas de esquí esperan a los visitantes en la montaña más alta de la Bosque Negro.
Imagen: picture alliance/Dumont/M. Kirchner
El Bastei, en las montañas de arenisca del Elba
Con sus 305 metros de altura, el Bastei no se lleva precisamente un récord, pero debido a su forma llamativa se convirtió en el monumento más famoso de las montañas de arenisca del Elba, en el este de Alemania. En el siglo XIX los poetas y pintores románticos descubrieron el rocoso mirador, y hoy en día los turistas se juntan allí en masa.
La montaña Drachenfels, en la Siebengebirge (Siete Colinas)
Esta montaña esconde quizás la leyenda alemana más importante: el Cantar de los Nibelungos. Se dice que aquí Sigfrido mató a un dragón, se bañó en su sangre y se volvió invencible. Si no hubiera sido por la hoja de tilo... Lo más destacado del turismo hoy en día son las ruinas del castillo de Drachenfels, y además, el castillo de Drachenburg, una mansión del siglo XIX de estilo neogótico.
Imagen: picture alliance/dpa/H. Kaiser
El Hohe Acht, en el Eifel
El Hohe Acht es, con 746 metros, un cono volcánico inactivo y la montaña más alta del Eifel, una cadena montañosa baja del oeste de Alemania. La región es conocida por sus amplios bosques, sus ríos caudalosos y sus pintorescos pueblos, alejados del turismo de masas. Su torre de observación ofrece una amplia vista del Eifel.
Imagen: Imago/H. Blossey
El Watzmann, en Berchtesgaden, Baviera
Se eleva majestuosamente a 2.700 metros de altura en medio de los Alpes bávaros. La leyenda del malvado rey Watze, de quien se dice que alguna vez aterrorizó la zona, gira en torno a su peculiar forma. Para castigarlo, Dios lo convirtió en piedra (arriba, a la derecha en la foto), junto con su esposa (arriba, a la izquierda) y sus hijos (los pequeños picos en el centro).