No toda pareja que viva en una misma casa tiene que casarse y mucho menos salir juntos. Este parece ser el lema de la mayoría de los chipriotas griegos que, a juzgar por los pronósticos, votarán contra la unificación. La mayoría turca empero, que ocupa el norte de Chipre desde hace 30 años, votaría a favor de ella y la consecuente entrada en la nueva UE de los 25 a partir del próximo 1° de mayo. Esto no aportaría mucho, ya que un resultado positivo implicará que ambas partes voten el sí.

La isla reñida

Chipre es una construcción política anacrónica. Como país es reconocida internacionalmente sólo la parte griega, mientras la parte turca sufre el aislamiento, el embargo económico y el consecuente retraso desde hace 3 décadas, cuando Ankara ordenara su invasión militar.

Hasta ahora todo intento de acuerdo entre ambas partes ha fracasado. Las heridas provocadas por la ocupación turca, la pérdida de territorios y el desplazamiento de miles de familias griegas siguen abiertas. Ahora, y a pesar de la "oportunidad de oro" que les ha brindado las Naciones Unidas y la UE los sondeos arrojan un resultado negativo.

Si dices sí, yo digo no...

Favorecer o no la unificación ha sido para los chipriotas una cuestión de coyuntura. Los griegos que siempre la han predicado, ahora la rechazan con un sonoro "oxi" y los turcos, que siempre se habían opuesto, esta vez la aprueban con un parco "evet". No así el líder turco Rauf Denktasch que se sigue oponiendo e insiste en que la historia le concederá la razón aunque ahora lo tilden de terco.

Por lo pronto, se cuece un castigo para el líder turco, pues un 60% de la ciudadanía dice apoyar el plan del secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan, que la constitución de un Estado federal chipriota bajo un gobierno central. Pero mientras la vieja casta política turca dice hayiv!, No!, el pueblo escandea evet!, evet!

El padrino de Ankara

Pero los turcos isleños no están solos. El gobierno de Turquía, en persona del primer ministro Recep Tayyip Erdogan, ha asumido una especie de padrinazgo en favor de la unificación de Chipre. Las buenas intenciones dejan entrever intereses propios: allanar el camino a la entrada de Turquía en la Unión Europea.

"¡No y punto!"

La inesperada "buena disposición" de los turcos sorprende a los griegos. "Estupefacto, casi paralizado, el gobierno greco-chipriota se ha dejado arrollar por los hechos", afirma Takis Chadjidimitriou, antiguo coordinador de la Unión Europea de la parte griega. Los políticos griegos desdeñaron, desde un principio, el plan de Annan, sin ofrecer alternativas. Tras si dejan a un electorado confuso que prefiere rechazar la unificación porque, presumiblemente, no tiene nada que perder. Sea cual fuere el resultado de su votación, es un hecho que el Chipre griego pasará a formar parte de la UE.

Ni contigo, ni sin ti

Pero las cosas no son tan fáciles como parecen. El fantasma de la invasión militar turca de 1974 sigue rondando. Para los griegos chipriotas es una pesadilla que Turquía - aún tras una unificación - pueda seguir esgrimiendo el "derecho de invasión". Actualmente, hay unos 40.000 soldados turcos estacionados en el norte. Las críticas al plan de Annan no paran ahí: sólo la mitad de los 160.000 griegos desplazados podrían regresar a su terruño norteño. Los griegos chipriotas están pues entre la espada y la pared. Un no a la unificación les restaría apoyo internacional en su causa.

Pero, al fin y al cabo, son los chipriotas mismos quienes deben elegir su propio camino. Así como no hay peor boda que una obligada, también es cierto que hay felices parejas casadas por conveniencia.