Cientos de migrantes intentaron entrar este viernes a la ciudad española de Melilla, en el norte de África, desde Marruecos, y una treintena de ellos lo consiguieron, a pesar del despliegue del Ejército en la frontera.
Migrantes saltan la valla fronteriza de Melilla. (Archivo).Imagen: picture alliance/AP Photo/S. Palacios
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Los intentos de entrada de personas migrantes, seis en total, se produjeron a lo largo de toda la noche del jueves (20.05.2021), mientras agentes de la Policía y Guardia Civil tratan de controlar esta zona fronteriza con territorio marroquí.
Hasta el momento se desconoce dónde han sido trasladados los treinta inmigrantesen situación ilegal que consiguieron acceder a la ciudad, todos hombres marroquíes adultos, aunque las fuentes confirmaron que ninguno está herido.
Es la primera vez que Melilla sufre una entrada irregular tan numerosa de personas originarias de Marruecos en saltos a la valla fronteriza que, hasta el momento, había sido una vía empleada prácticamente en exclusiva por inmigrantes subsaharianos.
Tranquilidad en la frontera de Ceuta
Mientras tanto la frontera del Tarajal que separa la ciudad española de Ceuta, también en el norte de África, de Marruecos, permanece tranquila este viernes, después de la llegada de 8.000 inmigrantes de esta semana, muchos de los cuales, 6.000 según las ultimas informaciones oficiales, han regresado a su país.
Los Gobiernos de España y Marruecos alcanzaron el acuerdo de permitir el regreso de estos grupos de personas con un máximo de 40 cada dos horas. (EFE).
Ceuta: miles de migrantes llegan nadando al enclave español en el norte de África
Esta semana, un número récord de migrantes ha llegado a Ceuta, un pequeño territorio español en el norte de África, nadando o remando en botes inflables.
Imagen: Fadel Senna/AFP
Nadando hacia el enclave europeo
Alrededor de 6.000 migrantes consiguieron cruzar desde Marruecos hasta el pequeño territorio español de Ceuta este martes (18.05.2021). Muchos de ellos nadaron o utilizaron botes de goma. Un joven se ahogó cuando intentaba llegar al enclave.
Imagen: Fadel Senna/AFP
Caminando por aguas bajas
En algunos lugares, la marea estaba tan baja que los migrantes podían incluso caminar por las aguas poco profundas desde las playas que se encuentran a pocos kilómetros al sur de Ceuta.
Imagen: Fadel Senna/AFP
Un puente hacia Europa
Los migrantes africanos consideran a Ceuta como un trampolín hacia Europa. Pero el enclave español en el norte de África nunca había visto una afluencia tan rápida de llegadas. Las autoridades locales acusaron a Marruecos de relajar sus controles fronterizos. Las relaciones entre ambos países son tensas desde que España aceptó que un líder rebelde marroquí recibiera tratamiento hospitalario.
Imagen: Fadel Senna/AFP
El viaje comienza en las playas de Fnideq
Muchos migrantes comenzaron su viaje trepando por los acantilados de Fnideq, una ciudad del norte de Marruecos. Aprovecharon la oportunidad cuando Marruecos relajó sus controles fronterizos el lunes.
Imagen: Fadel Senna/AFP
Detenidos a su llegada
Pero una vez que llegaron a Ceuta, los guardias civiles españoles los detuvieron. España no concede el estatuto de asilo a los marroquíes: solo los menores no acompañados pueden permanecer bajo la supervisión del Gobierno.
Imagen: Antonio Sempere/AFP
Ceuta se enfrenta a una crisis humanitaria
La repentina llegada de miles de migrantes ha puesto en apuros al Ejército español, a la Guardia Civil y a los trabajadores de emergencias en Ceuta, una pequeña ciudad de 85.000 habitantes. España envió al territorio 200 agentes más, entre policías antidisturbios y profesionales especializados en el control de fronteras, según informó el Ministerio del Interior.
Imagen: Javier Fergo/AP Photo/picture alliance
España quiere acelerar el retorno
Las autoridades españolas trasladaron a los adultos que llegaron a un estadio de fútbol, donde tienen que esperar a ser reenviados a Marruecos.
Imagen: Javier Fergo/AP Photo/picture alliance
Niños y adolescentes también llegaron a Ceuta
Muchos de los migrantes que llegaron eran menores de edad. Las autoridades trasladaron a los que se pensaba que eran menores de edad a almacenes gestionados por organizaciones humanitarias como la Cruz Roja.