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Cinco muertos en ataque terrorista en capital kurda

19 de noviembre de 2014

Un atacante suicida hizo estallar un automóvil cargado con explosivos en un puesto de control cerca de un edificio del gobierno provincial.

Imagen: AFP/Getty Images

Erbil siempre se ha jactado de ser la ciudad más segura de Irak. En medio del territorio del Kurdistán iraquí, la capital kurda es una boyante ciudad con instalaciones de lujo que no se encuentran en otras regiones del país. Esa tranquilidad se vio azotada este miércoles (19.11.2014) luego de que un atacante suicida hiciera estallar un vehículo cargado con explosivos en un puesto de control cerca de un edificio provincial.

En el atentado perdieron la vida cinco personas (entre ellas tres guardias y dos civiles) y una treintena quedó herida, de acuerdo a los reportes de las autoridades kurdas. Testigos relataron a la página de noticias Rudaw que el atacante intentó ingresar al edificio con su vehículo, pero los guardias de seguridad abrieron fuego. El automóvil explotó antes de llegar a su destino.

El Estado Islámico reivindicó el ataque, el primero de esta magnitud en un año. El alcalde Nihad Latif Koja dijo a la agencia Reuters que el suicida quería atacar el complejo del gobernador, que está protegido por muros contra estallidos. Las imágenes del lugar mostraban a varios vehículos carbonizados y lo que parecía ser un rastro de sangre en el adoquinado fuera de la oficina del gobernador.

La lucha continúa

El último ataque en Erbil ocurrió el 23 de agosto, provocando heridos, pero no víctimas mortales. Una serie de explosiones en septiembre de 2013 dejó al menos seis muertos. Los atentados, casi inexistentes en años anteriores, se han incrementado desde que las autoridades kurdas plantaron cara al Estado Islámico. Las fuerzas peshmerga han tenido éxito en impedir la infiltración del EI en el Kurdistán, aunque este último episodio demuestra que no son invulnerables.

Fuentes citadas por la agencia EFE aseguran que, tras la explosión, las fuerzas de seguridad cercaron el lugar por temor a otros atentados y no descartaron que aumente el número de víctimas mortales, debido a la gravedad de los heridos. De cualquier modo, el gobernador del Kurdistán, Nuzad Hadi, dijo que nada atemorizará a las fuerzas peshmerga y que la lucha contra el EI continuará.

DZC (dpa, Reuters, EFE)

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