El periódico Het Laatste Nieuws de Bélgica escribe: "Benito Mussolini estaría orgulloso. Pasó un poco de tiempo, pero después de 50 años Italia vuelve a contar con un "jefe de gobierno poderoso", que controla la prensa, la política y la justicia. Comenzó en Italia, ahora le toca a Europa ser reeducada. Calificar a los diputados europeos de "turistas de la democracia", proponerlos como intérpretes de un papel de carcelero nazi, esto y otras "audacias" han convertido, en sólo dos días, al Parlamento Europeo en el cementerio de la presidencia italiana."

El zar de los medios

El diario inglés Financial Times escribe: "La falta de sensibilidad de Berlusconi podría ensombrecer sus seis meses de presidencia al frente de la Unión Europea. Pero Berlusconi está seguro de que la prensa italiana lo tratará con amabilidad. Después de todo es el propietario del mayor conglomerado de medios de comunicación y los periodistas lo saben. Incluso para Berlusconi debería estar claro que la comparación de un político alemán con un vigilante de una campo de concentración sobrepasa todas las fronteras de la decencia."

Seis meses son mucho tiempo

El periódico suizo Basler Zeitung sostiene que el primer ministro italiano es un peligro para la UE: "Seis meses no son mucho tiempo. Silvio Berlusconi tiene razón. Sus detractores dentro de la Unión Europea podrían sentarse cómodamente, como él mismo lo ha sugerido, y esperar a que transcurra rápido el periodo de la presidencia italiana de la UE. Una idea tentadora, pero desde ayer peligrosa.

Las declaraciones de Berlusconi resultan desagradables, pero lo realmente preocupante es saber que el más alto representante de la Unión Europea no se puede controlar y que está medio loco. Quien reacciona como lo hizo Berlusconi es un riesgo para la Unión Europea."

Lo que nos temíamos

El diario italiano Corriere della Sera escribe: "Lo que se temía no tardó en llegar. En el debut de su presidencia al frente de la Unión Europea, Silvio Berlusconi no logró mantener los nervios y su lengua bajo control. Para Italia y su primer ministro, que hasta ese momento había hecho una buena figura, el semestre a la cabeza de la Unión Europea no podría haber comenzado de peor forma."

Un triste récord

El tono del diario La Repubblica es un poco más duro: "Exactas 3 horas y 25 minutos -el tiempo entre el inicio de la sesión en el Parlamento de Estrasburgo y las observaciones de Berlusconi- fueron suficientes para convertir en añicos el papel formal de presidente de la Unión Europea que asumió Italia. En pocas ocasiones un líder político ha desperdiciado en tan poco tiempo una oportunidad tan valiosa. Un récord."

Habrá más de un perdedor

El periódico alemán Frankfurter Allgemeine Zeitung advierte sobre el mismo tema: "Los acontecimientos son de lamentarse pues el alboroto generalizado ha hecho que el debate formal de la presidencia de la Unión Europea haya sido desplazado a un segundo plano. Si los próximos meses se caracterizan por discusiones tontas, será difícil impulsar la tarea europea. ... Si la presidencia de la Unión Europea bajo mando italiano se hunde en un clima de "Berlusconifobia" y de barullo político, habrá más de un solo perdedor."