Colombia: entre el miedo al pasado y el miedo al futuro
José Ospina-Valencia
12 de junio de 2018
El miedo a que tanto Duque como Petro no respeten el Estado de derecho dominó la campaña electoral en Colombia. Temas como la inequidad en Colombia y la crisis en Venezuela quedaron relegados por la polarización.
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¿Un candidato de derecha versus uno de izquierda? “Eso se llama democracia”, apunta en entrevista con DW Hubert Gehring, director de la Fundación Konrad Adenauer en Colombia. En Colombia es la primera vez que dos candidatos realmente antagónicos se disputan la presidencia. Iván Duque, del derechista Centro Democrático y Gustavo Petro, de la izquierdista Colombia Humana. A esto se suma que Petro militó en los 80 en la guerrilla urbana M-19.
Tras la primera ronda del 27 de mayo, ambos candidatos han tenido que suavizar, empero, su discurso para cautivar a unos 7 millones de votantes de centro y centro-izquierda. “Los colombianos no quieren los extremos y buscan más bien un presidente que una al país”, destaca Gehring.
Cambian miedo por votos
“La diferencia entre los candidatos y sus programas de campaña es, en efecto, una ganancia para la democracia colombiana”, agrega, por su parte, la politóloga colombiana Viviana García Pinzón, del Instituto de Investigaciones sobre América Latina (GIGA), en Hamburgo. Y recuerda que “en décadas pasadas varios candidatos de izquierda fueron asesinados”. García Pinzón destaca además, que “por primera vez desde hace más de medio siglo, no son las FARC el tema en una campaña a la presidencia”. En efecto, las FARC como guerrilla desaparecieron, entregaron sus armas, gracias al Acuerdo de Paz, y fueron estruendosamente derrotadas por los electores en las urnas el 11 de marzo, cuando recibieron solo 0,5% de los votos, no ganando un solo escaño en el Parlamento por esfuerzo propio.
Pero Duque y Petro han polarizado, casi por igual, marcando el común denominador de esta campaña electoral: el miedo. El miedo a lo que el contendor pueda hacer de Colombia. A pesar de que las FARC desaparecieron, la derecha y ultraderecha, representada por Iván Duque, se han obstinado en mantener vivo el fantasma de esa guerrilla. Según la propaganda del bloque en torno a Duque, “Petro busca hacer de Colombia una segunda Venezuela”. Por su parte, las huestes de Petro aducen que Duque es un supuesto "títere de Uribe", como describe Héctor Riveros, en el portal de análisis La Silla Vacía en "Esconder a Uribe".
Certezas e incertidumbres
Además del miedo, esta campaña se ha movido entre certezas e incertidumbres, unas reales, otras virtuales. Algo que toca a ambos candidatos. Una de las certezas, por ejemplo, es la falta de experiencia de Iván Duque, quien no ha desempeñado ningún cargo administrativo por votación. De Petro, quien fue alcalde de Bogotá (2012-2015), se dice que llevó una administración “caótica”, como le endilgó el exprocurador Alejandro Ordóñez.
“Al tecnócrata Duque no hay nada que evaluarle, aparte de un cargo en el Banco Interamericano de Desarrollo (BID)”, recuerda la politóloga García Pinzón, con máster en la Universidad de Chile. Pero el mayor temor a una eventual presidencia de Duque es el regreso del uribismo, ligado al paramilitarismo, financiado por el narcotráfico, según la politóloga. "Uribe, su mentor, se hizo reelegir truculentamente, por lo que varios de sus ayudantes fueron condenados y pagaron cárcel”, señala la experta. Las cortes, periodistas y opositores fueron “espiados”, añade, bajo los gobiernos de Álvaro Uribe, hechos por los que tuvo que disolverse la agencia de espionaje que era el DAS.
Estado de derecho
El hecho es que si gana Iván Duque, sus fuerzas concentrarían casi el poder absoluto: “Este es un gran peligro para la institucionalidad de Colombia”, advierte García Pinzón: “Duque tendría el Poder Ejecutivo y las mayorías del Congreso en una persona. Además ha propuesto abolir diferentes cortes para crear una, posiblemente a su medida”.
Si ganara Petro, “la equiparación de fuerzas sería más factible”, concluye esta analista de la Universidad Nacional de Colombia. La politóloga se refiere a que Petro no contaría con las mayorías en el Parlamento y tendría que llegar a consensos.
Aún así, los temores que ha despertado Petro con su postura ambigua frente a la democracia en Colombia y la dictadura en Venezuela son tan grandes que la Alianza Verde lo conminó a esculpir en mármol, y no es metáfora, los 12 mandamientos que debe respetar, a cambio de su apoyo. Por ejemplo: “Impulsaré la iniciativa privada", reza el IV mandamiento, mientras el VI dice: “Respetaré el Estado social de Derecho”.
Campesinos: olvidados y excluidos
“Lo que realmente esperan los colombianos es que el próximo presidente oriente el país al futuro”, concluye el director de la KAS en Colombia, quien no ve el peligro en que Colombia vaya a ser dirigida por la izquierda o la derecha sino en “el populismo”, cualquiera que sea. La mayoría de los electores colombianos opta, por lo general, por el centro.
Por otra parte, Hubert Gehring, administrador de empresas, extraña que los candidatos hablen mucho de Producto Interno Bruto (PIB) y poco de reducir las inequidades. “Promover una economía con espíritu social en las comunidades rurales en donde aún la paz no se ha materializado, así como ampliar las ofertas de educación y empleo”, son para Gehring prioridades que el próximo presidente debe atender.
Acuerdo de Paz protegido por la Constitución
En lo que concierne a la paz "está jurídicamente asegurada, porque hace parte del sistema legal colombiano”, recalca desde La Haya a DW el profesor de la Universidad del Rosario Walter Arévalo, por lo que "a Duque no le puede interesar violar la Ley”. Y, en efecto, Duque ahora solo quiere "introducir cambios, pero respetar el modelo”.
En caso de una victoria de Petro, Sabine Kurtenbach, directora encargada del Institito para Estudios sobre América Latina (GIGA), ha advertido en DW que la paz en Colombia puede correr el riesgo del proceso en Guatemala: "Allí el Congreso ha asfixiado la paz no aprobando los recursos financieros necesarios”.
Crisis humanitaria en Venezuela: “Una bomba de tiempo”
Por último, un verdadero desafío regional es la crisis humanitaria en Venezuela y sus consecuencias para Colombia. Tanto que el director de la Fundación Konrad Adenauer en Colombia considera el problema “una bomba de tiempo”. “Ninguno de los candidatos presentó programas de integración de los venezolanos migrantes al mercado laboral y la sociedad colombianas”, destaca Gehring, quien advierte que el problema es también de “seguridad”.
“Como en Alemania con los sirios, también en Colombia crece el escepticismo y el rechazo frente al millón de migrantes venezolanos que llegaron en los últimos doce meses, en buena parte sin educación ni recursos”, dice Gehring, quien urge a la comunidad internacional a respaldar más a Colombia. Pero será el próximo presidente de Colombia, elegido para los próximos cuatro años, el que tiene que proponer una solución.
La decisión la tienen ahora los 36 millones de electores colombianos habilitados de quienes la politóloga Viviana García Pinzón espera que aprovechen “esta ventana de oportunidad inédita para hacer de Colombia un país en donde los corruptos sí se persigan y no se mate a los líderes sociales”. En Colombia, los unos parecen querer votar por uno de los candidatos por miedo al futuro, mientras los otros lo harán, por el otro, por miedo al pasado. Pero como dice el refrán, "el miedo no es buen consejero".
Autor: José Ospina-Valencia (CP)
El valor de la paz: una mirada al proceso en Colombia
Originado en enfrentamientos sangrientos de décadas anteriores, el conflicto armado colombiano estalló en 1964. Un recuento de sus principales hitos.
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El arduo camino hacia la paz
La firma del histórico acuerdo de paz entre el Gobierno colombiano y las FARC marcó un hito clave, pero no el fin del camino. La implementación de lo pactado no ha estado exenta de contratiempos. Prueba de que hay que consolidar esa paz es que ante los comicios presidenciales se volviera a discutir sobre ese acuerdo que hizo callar las armas tras más de cinco décadas de conflicto armado.
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Los años cuarenta y cincuenta: “La Violencia”
El conflicto tuvo su origen en los años veinte del siglo pasado con la lucha por la tierra. Pugnas entre liberales y conservadores provocan miles de muertes. El asesinato del liberal Jorge Eliécer Gaitán (foto), en 1948, origina las protestas conocidas como El Bogotazo. Los comunistas son reprimidos. Se fundan grupos clandestinos. El Ejército asalta poblados y persigue a "campesinos comunistas".
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1964: las FARC y el ELN
Se fundan las guerrillas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Ejército de Liberación Nacional (ELN). Las FARC pretenden enfrentar la concentración de tierras. El ELN nace de la radicalización del movimiento estudiantil y teólogos de la liberación como Camilo Torres (foto). El Gobierno intenta combatirlas a ambas con asistencia de Estados Unidos.
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Los años setenta y ochenta: el M-19
Surgen otros movimientos clandestinos como el M-19 –que protagonizaría acciones como la trágica toma del Palacio de Justicia en 1985 (foto)−, MAC y MOIR. El Gobierno negocia por primera vez con las FARC y el ELN, pero las conversaciones fracasan tras el asesinato del ministro de Justicia.
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La década de los ochenta: los paramilitares
Surgen varios grupos paramilitares de ultraderecha, al servicio de la protección de terratenientes y sus tierras contra los ataques rebeldes. Con el tiempo, los paramilitares se involucran con los cárteles de la droga. Cuatro candidatos presidenciales y numerosos políticos de izquierda fueron asesinados por los paramilitares entre 1986 y 1990. También la guerrilla tuvo vínculo con el narcotráfico.
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1989: el M-19 se desmoviliza
El M-19 entrega las armas en octubre de 1989 y se convierte en partido político. Su entonces líder, Carlos Pizarro, se lanza como candidato presidencial y es asesinado en campaña en 1990.
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1996: los escuadrones de la muerte
Los grupos paramilitares se integran en las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC). Los llamados escuadrones de la muerte llegan a tener hasta 30.000 miembros.
Imagen: AP
1998-99: Pastrana intenta negociar
El Gobierno de Andrés Pastrana negocia con las FARC. Conversa también con el ELN (foto) y las AUC. Se desmilitariza un amplio territorio controlado por las FARC en el sur del país. Una masacre interrumpe las conversaciones con las AUC.
Imagen: picture-alliance/dpa
2002: Íngrid Betancourt y Álvaro Uribe
Tras el secuestro de una aeronave en febrero, el gobierno interrumpe las negociaciones con las FARC, durante las que cientos de personas murieron. El 23 de febrero, las FARC secuestran a la candidata presidencial Íngrid Betancourt (foto). Álvaro Uribe gana la presidencia en mayo, intensifica el combate militar y rechaza las negociaciones. Es reelegido en 2007. Betancourt fue liberada en 2008.
Imagen: AFP/Getty Images
2003-2006: desparamilitarización y amnistía
Tras largas negociaciones, unos 32.000 paramilitares de las AUC deponen las armas (foto). Unos 4.200 de ellos son juzgados por violaciones a los derechos humanos hasta 2014. Muchos vuelven a tomar las armas. En junio de 2005 se aprueba la Ley de Justicia y Paz, una amplia amnistía para miembros de los escuadrones de la muerte.
Imagen: picture-alliance/dpa
2007-2008: “falsos positivos”
En 2007 son detenidos los primeros políticos de derecha, acusados de vínculos con los paramilitares, también en el entorno de Uribe. En septiembre de 2008 estalla el escándalo de los "falsos positivos": sobre todo entre 2004 y 2008, más de 3.000 personas fueron asesinados por el Ejército, para falsear la estadística de guerrilleros eliminados. Cientos de militares han sido juzgados desde entonces.
Imagen: Jesús Abad Colorado
2012: comienza el diálogo de paz con las FARC
El 20 de junio de 2010 es elegido presidente el exministro de Defensa Juan Manuel Santos. En 2012 entra en vigor la Ley de Víctimas y Restitución de Tierras para reparar a las víctimas y desplazados. En noviembre, se inician oficialmente los diálogos de paz entre el equipo de negociadores del Gobierno (foto) y las FARC.
Imagen: Reuters
2014-2015: se fija fecha tope para el pacto
El Gobierno colombiano anuncia que prepara conversaciones con el ELN. Santos es reelegido en junio de 2014. Las negociaciones con las FARC se traban o suspenden varias veces por acciones militares de ambas partes hasta que, el 23 de septiembre de 2015, Santos y Rodrigo Londoño Echeverri (Timochenko), líder las FARC, se encuentran en La Habana y fijan el objetivo de firmar la paz en seis meses.
Imagen: picture-alliance/dpa/A. Ernesto
2016: diálogos de paz con el ELN
El 30 de marzo, Frank Pearl, representante del Gobierno de Colombia, y Antonio García, jefe de la delegación del ELN (foto), anunciaron en Caracas el inicio de un proceso formal de diálogos de paz. Mientras, las FARC y el Gobierno aplazaron, por desavenencias, la firma del acuerdo de paz definitivo, que se pretendía inicialmente conseguir antes del pasado 23 de marzo de 2016.
Imagen: Reuters/M. Bello
Firma del acuerdo de cese el fuego
El Gobierno de Colombia y las FARC alcanzaron un acuerdo para el cese el fuego bilateral y definitivo, cuyos detalles se darían a conocer en La Habana en un acto con presencia del presidente Santos y mandatarios de los países garantes y acompañantes del proceso de paz, entre otros, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, delegaciones de Cuba y Noruega, Chile y Venezuela. (23.06.2016)
Imagen: picture-alliance/dpa
Pacto final
El Gobierno de Colombia y las FARC rubricaron el acuerdo final que cierra las negociaciones de paz desarrolladas en La Habana, y que debía ser refrendado en un plebiscito. El documento fue rubricado por los jefes negociadores, Humberto de la Calle, por el Gobierno y Luciano Marín Arango, alias "Iván Márquez", por la guerrilla, y por los embajadores de Cuba y Noruega. (24.08.2016)
Imagen: Reuters/A. Meneghini
Se anuncia el plebiscito
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, anunció la convocatoria a un plebiscito el 2 de octubre para refrendar o rechazar el acuerdo de paz logrado con la guerrilla de las FARC. "Queda en manos de ustedes los colombianos decidir con su voto si apoyan este acuerdo histórico", dijo Santos en una alocución por radio y televisión.( 24.08.2016)
Imagen: picture-alliance/Xinhua/Colprensa
“Timochenko” ordena bajar las armas
“En mi condición de comandante del Estado Mayor Central de las FARC-EP, ordeno a todos nuestros mandos, a todas nuestras unidades, a todos y cada uno de nuestros combatientes, a cesar el fuego y las hostilidades de manera definitiva contra el Estado colombiano a partir de las 24 horas de la noche de hoy”, decretó desde Cuba el líder de las FARC, Rodrigo Londoño, alias “Timochenko”. (28.08.2016)
Imagen: Getty Images/AFP/Y. Lage
Cesa el fuego en Colombia
El alto el fuego definitivo entre el Gobierno colombiano y la guerrilla de las FARC comenzó a las cero horas del 29 de agosto. "Este 29 de agosto empieza una nueva historia para Colombia. Silenciamos los fusiles. ¡SE ACABÓ LA GUERRA CON LAS FARC!", escribió a la medianoche en punto el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, en Twitter. (29.08.2016)
Imagen: Getty Images/AFP/G. Legaria
Una pregunta concreta
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, dio a conocer la pregunta que sus compatriotas responderán en el plebiscito del próximo 2 de octubre: “¿Apoya usted el acuerdo final para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera?”. Santos insistió en que la pregunta no debía ser tendenciosa o manipuladora, sino clara y concreta. (30.08.2016)
Imagen: picture-alliance/dpa/L. Munoz
Los primeros menores abandonan las FARC
Ocho niños y adolescentes fueron entregados por las FARC al Comité Internacional de la Cruz Roja para luego ser sometidos a exámenes médicos integrales y procesos de comprobación de identidades. Los menores quedan bajo responsabilidad de UNICEF. (10.09.2016)
Imagen: picture-alliance/AP Photo/S. Dalton
Observadores para Colombia
El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó unánimemente el plan presentado por el secretario general de esa organización, Ban Ki-moon, para apoyar la aplicación de los acuerdos de paz entre el Estado colombiano y las FARC. 450 observadores en cuarenta localidades de ese país verificarán el desarme y monitorizarán el alto el fuego. (13.09.2016)
Imagen: picture-alliance/dpa/M. Rajmil
La última conferencia de las FARC
El líder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, Rodrigo Londoño –alias “Timochenko”–, inauguró la décima y última Conferencia Nacional Guerrillera de las FARC, donde sus comandantes aprobaron el acuerdo de paz con el Gobierno. Timochenko hizo hincapié en que las FARC seguirán luchando por la justicia social y los más pobres, pero como un partido político. (17.09.2016)
Imagen: picture-alliance/dpa/M. Duenas Castaneda
Santos en la ONU: “La guerra llegó a su fin”
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, agradeció el 21 de septiembre de 2016 en la ONU el respaldo de la comunidad internacional al proceso de paz con la guerrilla de las FARC y dijo con contundencia que el conflicto armado en su país terminó.
Imagen: picture-alliance/dpa/A. Gombert
Las FARC ratifican el acuerdo
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) anunciaron el 23 de septiembre de 2016 la ratificación unánime del acuerdo de paz alcanzado con el Gobierno colombiano y, de este modo, dejarán las armas tras 52 años de conflicto armado.
Imagen: Reuters/J. Vizcaino
El ELN facilitará la celebración del referendo
El Ejército de Liberación Nacional (ELN), la segunda organización guerrillera de Colombia, anunció un cese de las acciones ofensivas –que no de las “defensivas”– para facilitar la participación de la población en el plebiscito del 2 de octubre en torno al acuerdo de paz alcanzado con las FARC. El ELN no descarta negociar un pacto similar al sellado con las FARC. (26.09.2016)
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Firmado el pacto de paz con las FARC
El 26 de septiembre de 2016, el presidente Juan Manuel Santos, en representación del Estado colombiano, y Rodrigo Londoño Echeverri, alias “Timochenko”, líder de las FARC, rubricaron el acuerdo que pone fin a 52 años de conflicto armado entre ambos. El convenio es fruto de casi cuatro años de diálogos celebrados en La Habana y fue sellado en Cartagena de Indias ante más de 2.500 invitados.
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El shock del NO
El recelo ante los puntos negociados con las FARC cristalizó en una campaña contra el acuerdo de paz liderada por el expresidente derechista Álvaro Uribe. Sorpresivamente, el "No" terminó imponiéndose, aunque por muy estrecho margen, en un referéndum celebrado el 2 de octubre de 2016.
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El Nobel de la Paz
Cinco días después del shock del referendo, la noticia fue un bálsamo para los partidarios del acuerdo con las FARC: el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, fue galardonado con el Premio Nobel de la Paz. La entrega tuvo lugar en diciembre, en Oslo (foto).
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Aprobación del Congreso
Tras una serie de negociaciones, se introdujeron cambios en el acuerdo original. El nuevo texto fue presentado al Congreso, que le dio su aprobación a fines de noviembre de 2016.
Imagen: Getty Images/AFP/G. Legaria
Diálogo con el ELN
Tras la liberación de un rehén y el indulto concedido a dos guerrileros, el Gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) iniciaron el diálogo de paz en la capital ecuatoriana, el 7 de febrero de 2017. Varios atentados ensombrecieron los esfuerzos por poner fin a la violencia y el Gobierno suspendió las conversaciones el 29 de enero de 2018.
Imagen: picture alliance/dpa/D. Ochoa
Adiós a las armas
La entrega de las armas de las FARC se llevó a cabo en tres etapas, con la supervisión de la ONU. La entrega de los últimos fusiles marcó otro hito histórico en el proceso. “Hoy 27 de junio para mí y para los colombianos es un día muy especial, un día que jamás olvidaremos, el día en que las armas se cambiaron por las palabras”, dijo Juan Manuel Santos.
Imagen: picture-alliance/dpa/A. Pineros
La nueva FARC
Las FARC, ya desarmadas, sellaron oficialmente su abadono de la lucha guerrillera en un congreso iniciado el 27 de agosto 2017. Allí decidieron la constituición de un partido político, cuyo nombre tiene la misma sigla, pero distinto significado: Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común. Rodrigo Londoño (foto) fue elegido presidente el partido. Razones de salud impidieron luego su candidatura.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/F. Vergara
Justicia Especial para la Paz
Los magistrados de la Justicia Especial para la Paz (JEP), a la que se someterán excombatientes y militares señalados de delitos atroces, tomaron posesión de sus funciones el 15 de enero de 2018. Punto clave en el acuerdo con las FARC, la JEP tiene la tarea de investigar, esclarecer, juzgar y sancionar las violaciones a los derechos humanos cometidas em el marco del conflicto armado.
Imagen: Justicia Especial para la Paz
Participación parlamentaria
Por primera vez tras el término del conflicto armado, representantes de FARC participaron en los comicios parlamentarios celebrados en Colombia el 11 de marzo de 2018. Obtuvieron escasamente unos 50.000 votos, pero en virtud de lo pactado en el acuerdo de paz, FARC tendrá cinco diputados y cinco senadores en el Congreso. Bien parado salió de los comicios el partido de Uribe, Centro Democrático.