Colombia: fuerzas armadas dan muerte a 13 guerrilleros
23 de julio de 2014 Una ofensiva militar de las fuerzas armadas de Colombia mató a trece rebeldes de las dos mayores guerrillas operativas en el país sudamericano, las FARC y el ELN. El ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, aseguró durante una visita a la base militar de Tolemaida, en Tolima, que “esto demuestra la ofensiva de nuestras Fuerzas Militares y la Policía, que trabajan sin descanso contra el terrorismo”.
La primera acción se llevó a cabo en el centro del país, en el departamento de Meta, donde cinco integrantes del Frente 27 de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) fueron abatidos en un ataque a su campamento. El general Juan Pablo Amaya aseguró que los hombres formaban parte de una célula que había cometido dos ataques con explosivos contra una carretera, cortando la comunicación entre algunas localidades.
Por otro lado, también este miércoles (23.07.2014), ocho miembros del Ejército de Liberación Nacional (ELN) murieron en dos operaciones desarrolladas en el departamento de Arauca, fronterizo con Venezuela. Cinco de ellos perdieron la vida en Fortul, mientras que los otros tres cayeron en combate en Saravena, en acciones militares que contaron con el apoyo de la Fuerza Aérea de Colombia.
Había menores de edad
Otros ocho guerrilleros del ELN fueron detenidos, mientras que otros diez se entregaron a las autoridades en medio de los enfrentamientos. Alguno de los combatientes eran menores de edad, los que quedarán bajo protección de los organismos del Estado pertinentes. También se incautaron fusiles y otras armas. La ofensiva militar del gobierno continúa pese a las negociaciones de paz que se siguen realizando en La Habana.
Las FARC y el ELN, activos desde hace 50 años, han aumentado en las últimas semanas sus acciones armadas. El primer grupo se ha dedicado a activar bombas contra carreteras y puentes, mientras que el segundo ha dirigido sus atentados contra la red de oleoductos y torres de transmisión eléctrica. Las FARC, además, han obligado a camiones que transportan petróleo a vaciar el combustible, ocasionando serios daños al ecosistema.
DZC (dpa, EFE)