1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

¿De Estado fallido a Estado emergente?

10 de noviembre de 2011

A Colombia le falta mucho para ser un Estado emergente, opinan dos expertos germanos sobre los perceptibles avances económicos, pero imperantes retos sociales, así como el fortalecimiento del Estado de derecho.

Das Internationale Komitee vom Roten Kreuz unterhält mobile Krankenstationen entlang des Flusses Caguan, innerhalb der Konfliktzone Zona Roja in Kolumbien. Juni 2011. Photo: Imogen Foulkes/ICRC
Inclusión social, uno de los mayores retos de Colombia.Imagen: Imogen Foulkes/ICRC

El país andino ha mejorado. Así lo indican las cifras. La economía colombiana crece a tasas anuales cercanas al cinco por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), sus ciudades son más seguras, las inversiones directas extranjeras se cuadriplicaron desde el 2002, y las exportaciones se incrementaron en un 175 por ciento, según cifras oficiales. Sin embargo, existe una discrepancia entre la prosperidad económica y las consecuencias humanitarias del conflicto que ha padecido el país, así como la situación de los derechos humanos.

Durante décadas Colombia fue considerada por expertos y medios internacionales como un ‘Estado fallido’. De acuerdo con el centro de investigación estadounidense Fondo para la Paz (The Fund for Peace en inglés), existen 12 indicadores económicos, sociales, políticos y militares para determinar si un Estado está en riesgo de fracasar. Algunos de ellos son la pérdida de control del territorio, la incapacidad de recaudar impuestos, así como el desplazamiento interno forzoso de la población.

"De las 177 naciones analizadas por el Fondo para la Paz, Colombia ocupó en el 2005 el puesto 14. Pero en el 2011, se ubicó en la casilla 44. ¿Pasó entonces Colombia de ser un ‘Estado fallido’ a una ‘estrella emergente’? Justamente, ésta es la pregunta que busca responder el congreso LatiF 2011, que se lleva a cabo desde este viernes (11.11) en la Universidad de Colonia, Alemania. Para ello la facultad de Ciencias Regionales de Latinoamérica invitó a expertos europeos y colombianos para debatir durante tres días en torno a esta pregunta. Deutsche Welle conversó con dos de ellos previo al evento: Sabine Kurtenbach, investigadora senior del Instituto de Estudios Latinoamericanos (ILAS) de Hamburgo, y Werner Hörtner, experto austriaco en América Latina, y editor de la revista Lateinamerika anders (La otra América Latina).

Ni ‘Estado fallido’...

"El caso de Colombia nos enseña muy bien que el concepto de ‘Estado fallido’ es equivocado, porque en la historia nunca hubo un Estado tal y como el modelo europeo, teniendo el monopolio de la fuerza o sobre los impuestos. El Estado colombiano nunca en su historia ha controlado todo el territorio colombiano”, explica la experta en Colombia, Sabine Kurtenbach. Sin embargo, la investigadora del ILAS también reconoce que durante estos últimos años “sí hubo una serie de avances en el control territorial. Pero estos son frágiles,porque no están basados en una integración social ni política. Esto no puede ser sostenible en el tiempo”.

Ni tampoco ‘estrella emergente’

“Hoy en día, Colombia es el país con más estabilidad si se compara con los otros países andinos. Pero para estrella emergente todavía falta mucho”, opina Kurtenbach. A su vez, Werner Hörtner alude que “por lo menos en el campo macroeconómico Colombia sí es un país emergente. Pero en otros campos, como en el social y el de derechos humanos, no lo diría. Se ven esfuerzos, pero todavía falta que se plasmen en la realidad”, dice el experto en América Latina.

“Colombia es un Estado con muchos problemas internos todavía, con bastante polarización, con falta de control del sistema judicial y de las fuerzas públicas que cometen atroces violaciones de derechos humanos. Siguen los asesinatos de sindicalistas y de activistas de movimientos sociales”, explica Hörtner.

Ambos expertos coinciden en que el discurso del actual Gobierno es más democrático. “Hace un año nadie se hubiera imaginado que el presidente Santos fuera a abrir esa agenda política social y de Estado de derecho que abrió. Si va por ese lado, va a ser un presidente muy importante para la historia colombiana”, opina Kurtenbach. Hörtner va más allá y agrega que “el Gobierno también ha asumido la responsabilidad de la violación fuerte de derechos humanos, así como la responsabilidad de otras matanzas”. Sin embargo, estas acciones no son suficientes.

Estado de Derecho e inclusión social, los retos

Para Kurtenbach, el país andino enfrenta dos importantes retos. El primero es que “hay que apoyar y soportar todos los mecanismos del Estado de derecho. Si en Colombia existe una impunidad muy grande, tampoco podemos hablar de que hay un Estado fuerte. El Estado de derecho tiene que sancionar toda la violencia que es ilegal”, dice la experta del ILAS.

Hörtner, que ha seguido desde la década de los 70 los procesos sociales en Colombia, enfatiza en la importancia de “una lucha fuerte para depurar las filas de las fuerzas de seguridad que cooperan con el paramilitarismo. Así como de los sectores políticos que trabajan con éste”, dice.

El otro gran reto es “la inclusión social, lo que comprende también todo el tema de la tierra y el modelo de desarrollo social y económico. Colombia es el país más desigual, no sólo de toda América Latina”, dice Kurtenbach. De acuerdo con el Fondo para la Paz, Colombia es el octavo país más desigual del mundo.

Paz en Colombia, en veremos

Con la reciente muerte del comandante de las FARC, Alfonso Cano, también surge la pregunta de si está cercana la paz en el país andino. “Por el momento no veo que habrá negociaciones fuera de hablar sobre cómo personas o grupos organizados van a dejar las armas. Yo lo veo muy difícil. Porque para negociaciones hay que tener también alguien que necesite negociar. Y por el momento el Estado colombiano no necesita negociar. Con la muerte de Alfonso Cano ésta es una señal muy clara”, dice Kurtenbach.

Para Hörtner la negociación de la paz entre el Gobierno y la guerrilla de las FARC debe ser “la tarea máxima, mucho más importante que las mejoras macroeconómicas. Porque sin paz no hay una verdadera recuperación del país”, afirma. Kurtenbach añade a esto que “para que se pueda dar una reconciliación, primero se necesita un reconocimiento de que la vía civil debe ser la vía de todos. Mientras no se acepten a los que piensan de manera diferente como iguales, entonces será muy difícil reconciliarse”.


Autora: Cristina Mendoza Weber
Editor: Enrique López

Los colombianos siguen anhelando la paz de su país.Imagen: AP
Werner HörtnerImagen: privat
Sabine KurtenbachImagen: GIGA
Una de las mayores consecuencias del conflicto en Colombia es el desplazamiento. En el 2011 la cifra rodea los 3, 4 millones.Imagen: picture-alliance / dpa
Ir a la siguiente sección Descubra más
Ir a la siguiente sección Tema del día DW

Tema del día DW

Ir a la siguiente sección Más de DW