El Colonia ha vivido etapas de máxima gloria en el fútbol alemán. Sí, aunque usted no lo crea. Junto con Eintracht Frankfurt, Borussia Dortmund, Stuttgart, Schalke, Werder Bremen y Hertha Berlín, es uno de los clubes fundadores de la Bundesliga que actualmente se encuentran en la primera división (Bayern Múnich se incorporó apenas en 1965).

En aquella temporada, en 1963, el Colonia se coronó como primer campeón de la Bundesliga en toda su historia, título que llevará hasta la eternidad. Sus jugadores de entonces se volvieron leyenda, e incluso, algunos como Wolfgang Overath cobraron fama internacional debido a su participación en los Mundiales de Inglaterra en 1966, y México, en 1970.

Para entonces, en el horizonte de la Bundesliga ya había aparecido otra estrella fulgurante: el Bayern Múnich, que conquistó su primer título de liga en el torneo 1968/1969. Pero el Colonia siguió siendo un referente del fútbol alemán en cuanto a competitividad, y hasta principios de los años 70 encabezó la tabla histórica de la Bundesliga. Al momento de publicarse este artículo (5 de febrero de 2021), el Colonia ocupaba el noveno lugar en la llamada "tabla eterna”.

Pese al dominio cada vez más claro del Bayern, el Colonia vivió más días de gloria con el campeonato en el torneo 1977/1978, bajo la batuta de Hennes Weisweiler, entrenador aún venerado en la ciudad de la catedral gótica. Entonces se forjó la gran rivalidad entre el club y el Borussia Mönchengladbach, que junto con el Bayern era la medida de todas las cosas en el balompié alemán.

Altibajos y descensos

La orgullosa hinchada del Colonia se acostumbró a que su equipo jugara en la primera división, aunque el club oscilaba en la media tabla, con algunas excepciones. La década de los 90 marcó las primeras crisis.

En el torneo 1992/1993, con el técnico Morten Olsen, el Colonia acabó en lugar 12 de la tabla. Pero, a diferencia de otras épocas, ya no pudo regresar a los primeros lugares, y en la temporada 1997/1998 vino el shock: el club descendió a la segunda división por primera vez en su historia. Desde entonces, el Colonia ha caído otras cinco veces en el purgatorio.

Daum y Stöger

En este carrusel ha habido dos momentos excepcionales, con los cuales la hinchada refresca el orgullo abollado. Uno ocurrió en el torneo 2008/2009 en el Allianz Arena de Múnich. Con goles de Fabrice Ehret y Daniel Brosinski, el Colonia se impuso al multicampeón en la propia casa de los muniqueses.

En el banquillo del Colonia, el técnico Christoph Daum vivió una suerte de venganza contra Uli Höneß, presidente del Bayern. Muchos atribuyen a Höneß la delación del año 2000, que los medios transformaron en opereta, sobre consumo de cocaína que costó a Daum el puesto de seleccionador alemán. El las tradicionales Kneipen donde se reúnen las cofradías de hinchas del Colonia, esa victoria aún se recuerda con fervor.

La segunda probadita de gloria para el Colonia en años recientes fue toda una sorpresa. Dirigido por el austríaco Peter Stöger, el club regresó a la primera división en el torneo 2014/2015. En su cuarto torneo como técnico del Colonia, Stöger llevó al equipo a competencia europeas, al acabar en quinto lugar en a temporada 2016/2017. Colonia no se metía a los primeros cinco de la Bundesliga desde 1992.

Pero al año siguiente, el Colonia se derrumbó estrepitosamente y el carnaval se tornó drama: el club volvió a descender. Actualmente lleva dos temporadas en el máximo circuito. La posibilidad de un séptimo descenso es real. Aunque ve de lejos a los dos últimos lugares, Schalke y Mainz, el Colonia está a solo un punto de sitio de repechaje con el que tendría que luchar la permanencia contra el tercer lugar de la segunda división.

El partido contra los potros de Mönchengladbach, además de revivir un clásico del fútbol alemán, es de vida o muerte para el Colonia y, sobre todo, decisivo en el destino del técnico Markus Gisdol.