El alto representante aseguró que los Estados miembro del bloque están demorando la entrega de las ayudas ya aprobadas, por valor de 2.500 millones de euros (unos 2.800 millones de dólares).

Juncker instó a los países, en un tono inusitadamente directo, a llevar a la práctica las medidas ya aprobadas para hacer frente al problema de los refugiados y para cooperar con países en Cercano Oriente y en África. "No basta con hacer promesas", criticó Juncker en el Parlamento Europeo. También hay que ofrecer las pruebas de los hechos".

Entre otras cosas, el presidente de la Comisión precisó que de los 1.800 millones de euros aprobados en septiembre para paliar las causas de la ola migratoria en África sólo ingresaron 9 millones.

También faltan casi 500 millones de euros en el fondo europeo destinado a respaldar a países vecinos de Siria como Turquía, Jordania y el Líbano, y 225 millones de euros que deben ir a las arcas de la lucha contra el hambre mundial, detalló Juncker.

Mientras tanto, el Parlamento Europeo liberó hoy otros 401,3 millones de euros (456 millones de dólares) que serán destinados a afrontar esta crisis migratoria en Europa.

Cumbre de líderes con foco en Turquía

Los jefes de Estado y de gobierno sostendrán este jueves 15 de octubre una cumbre en Bruselas para tratar la crisis migratoria. Uno de los focos estará puesto en Turquía, país de tránsito clave del flujo migratorio que llega a Europa.

El vicepresidente de la Comisión Europea, Frans Timmermans, que también criticó a los países de la UE por el incumpliento de sus compromisos, partió precisamente hacia Ankara. En su visita a Turquía se abordará el plan de acción que el país piensa implementar para afrontar el flujo migratorio. El gobierno de Ankara recibirá este año y el próximo hasta 1.000 millones de euros para atender a los refugiados.

Los europeos confían así en detener parte del flujo de solicitantes de asilo. A cambio se ha planteado avanzar en uno de los temas eternos entre el bloque y Turquía: la liberalización del visado para ciudadanos turcos. El plan de acción sobre el tema se abordará en la cumbre de la UE de esta semana.

¿Revisión de regla de Dublín?

Bruselas sigue esperando que las capitales de la UE digan a cuántos solicitantes de asilo puede asumir después de que los países miembros se comprometieran a reubicar a 160.000 personas que habían entrado por Grecia e Italia. Hasta el momento, sólo 19 personas han sido trasladadas de Italia a otro país de la UE.

Timmermans criticó además que, hasta la fecha, la respuesta de las naciones europeas para emplear a cerca de un millar de expertos nacionales que ayuden con el registro y la recepción de inmigrantes en Grecia e Italia ha sido "mucho menor" de la requerida, con excepciones como Austria, un buen ejemplo.

La Unión Europea afronta el mayor flujo migratorio desde la Segunda Guerra Mundial a raíz de la gran cantidad de personas que huyen de países en guerra como Siria. Uno de los puntos que generan mayor controversia en la antesala a la cumbre de este jueves es la disposición de la Convención de Dublín de que las solicitudes de asilo deben ser asumidas por el primer país del bloque que pisa un refugiado.

El primer ministro Matteo Renzi, cuyo país se ve fuertemente presionado por el arribo de miles de personas por las aguas del Mediterráneo, sostiene que la regla está desactualizada. La canciller alemana Angela Merkel también dijo que la medida era "obsoleta". Sin embargo, altos representantes defienden el sistema.

RML (dpa, efe)