Comité de crisis en Buenos Aires por ola de calor
29 de diciembre de 2013 Las autoridades nacionales y provinciales anunciaron que se coordinarán para hacer frente a la crisis energética que afecta a Argentina, en especial al gran Buenos Aires, donde se decretó el sábado 28 de diciembre la emergencia energética. Entre las medidas adoptadas por el gobierno porteño está declarar día de asueto administrativo este lunes 30 de diciembre, como una forma de disminuir el consumo. El Gobierno anunció la misma medida este domingo (29.12.2013).
Hasta ahora, los cortes de luz han afectado desde hace dos semanas a más de 800.000 personas, y ni las empresas eléctricas ni el Gobierno pueden dar una respuesta clara de cuándo será repuesta. Esto supone la pérdida de alimentos y, en muchos casos, también de electrodomésticos. El Gobierno, en tanto, baraja el pago de compensaciones de entre 240 y 600 pesos argentinos (27-67 euros) para cada usuario afectado.
“Ya venimos trabajando en forma conjunta por ambos gobiernos y lo vamos a seguir haciendo mucho mejor desde la conformación de este comité”, afirmó este domingo la vicejefa de Gobierno porteño, María Eugenia Vidal. El jefe de Gabinete de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, destacó por su parte que la prioridad es devolver el servicio de electricidad a los afectados por los cortes.
Medidas excepcionales
Una forma de medir el tenor de la crisis es con la reacción de algunos políticos, como el diputado kirchnerista Juan Cabandié, quien llegó al comité de crisis a exigir que se solucione el problema cuanto antes, porque “la gente me está puteando, me amenazan en mi casa”. Según Clarín, mientras el político hacía su particular queja, la luz ya había regresado a su barrio. A diferencia de otros, donde llevan cientos de horas sin poder encender una ampolleta.
El comité de crisis también acordó reforzar la asistencia médica a los afectados por la agobiante ola de calor y posteriormente analizar la necesidad de “un mayor nivel de inversión en la distribución y generación de energía”. Además de Buenos Aires, ciudades como Córdoba y Rosario también se han visto perjudicadas. Y esto ha tenido efectos secundarios graves, como la muerte de tres personas en un incendio en Avellaneda, provocado por una vela encendida debido a la falta de luz.
Otras medidas adoptadas serán el reparto de agua por medio de camiones sanitarios y facilitar la evacuación de quienes hayan quedado sin agua potable en sus casas. “Habrá tres refugios abiertos a disposición de personas que no puedan autoevacuarse o reubicarse en casas de amigos o vecinos”, dijo en rueda de prensa tras la reunión la vicejefa del Gobierno de Buenos Aires, María Eugenia Vidal. También se abrieron las puertas de los polideportivos para que las personas puedan beber agua fresca y bañarse.
DZC (dpa, EFE, Clarín)