Desde la antigüedad, el hombre se ha visto obligado a conservar alimentos. Cuando se hizo sedentario y apareció la agricultura y la ganadería, surgió la necesidad de guardar parte de las provisiones para prevenir la escasez. Muchas veces, las técnicas de conservación fueron fruto de la casualidad; otras, de la inventiva. Hoy hablaremos de algunas de ellas.