El artículo publicado en este espacio hace una semana,"AMLO y las negociaciones con el narco”, se convirtió en uno de los principales temas de debate y discusión en las redes sociales en México. Desde hace dos años sigo la pista a las presuntas negociaciones y contactos entre emisarios del gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador y miembros de diferentes organizaciones criminales.

De los contactos entre miembros del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) fundado por AMLO, e integrantes del crimen organizado llama particularmente el caso de Rubén Rocha Mora, quien en alianza con el Partido de Sinaloa (PAS) ganó el pasado 6 de junio la gubernatura en Sinaloa. De acuerdo a nueva información obtenida, sus contactos con Ismael "El Mayo” Zambada, líder del Cartel de Sinaloa, no nacieron durante la pasada campaña electoral, sino que tienen una historia más larga.

Rocha Moya, considerado un hombre de izquierda, fue ex Secretario General de la Universidad Autónoma de Sinaloa (1993-1997), y en el pasado ya había intentado ser gobernador de Sinaloa cuando fue candidato del  Movimiento Popular Sinaloense y Partido de la Revolución Democrática (PRD). Perdió.

Él no es un desconocido para AMLO. El propio Rocha Moya presume en su cuenta de Facebook antiguas fotos que dan cuenta de su vieja relación que data al menos de 1998, cuando el ahora Presidente de México era dirigente nacional del PRD.

Rocha Moya era coordinador del partido Morena en ese estado en 2017, cuando despegaba la precampaña presidencial de AMLO. Y en 2018 fue candidato de la alianza encabezada por Morena "Juntos haremos historia” al Senado de la República. Ganó su curul de senador.

De acuerdo a la reconstrucción que pude hacer de sus primeros pasos como senador de Morena, tuve información directa de que ya desde entonces, finales de 2018, Rocha Moya hablaba de sus contactos con "El Mayo” Zambada. Lo habló incluso con integrantes de Morena en Sinaloa. Le preocupaba que esto se filtrara.

Eso significaría que cuando en diciembre de 2020 Rocha Moya fue designado candidato a la gubernatura a través de una encuesta interna de Morena, ya tenía una relación previa con el Cartel de Sinaloa. La reunión con "El Mayo”, de la que hablaron personas del círculo más cercano a Rocha Moya durante la pasada elección no era el inicio, sino la continuación de lo que sería una antigua relación.

En entrevistas que dio siendo candidato a la gubernatura de Sinaloa, el hombre cercano a AMLO dijo que era necesario encontrar un mecanismo que permitiera el diálogo con el narco bajo una política establecida, es decir, la pax narca de la que hablé en el artículo anterior. Más recientemente dijo que combatirá al narco.

Rocha Moya niega los contactos con "El Mayo”, aunque estos existen desde al menos 2018, según los nuevos testimonios.

Más indicios

A principios de 2018, para entrevistar a Rafael Caro Quintero, a quien el gobierno de Estados Unidos acusa de ser un narcotraficante activo e integrante del Cartel de Sinaloa,  fui al llamado Triángulo Dorado. El territorio donde confluyen los estados de Sinaloa, Durango y Chihuahua durante décadas ha sido centro de producción de amapola y mariguana de la organización criminal.

El largo trayecto para entrevistar a Caro Quintero, tuvo como punto de partida Culiacán, Sinaloa, pasando por Badiraguato- lugar natal de Rocha Moya- hasta subir a la sierra. Durante el viaje, en el cual hubo diversos cambios de vehículos y personas, escuché de viva voz que varios de los allegados al otrora líder del Cartel de Guadalajara, hablaban de que iban a votar por AMLO en la elección presidencial, y que en todo el Triángulo Dorado en los círculos de la "maña” habría un voto mayoritario a su favor.

De acuerdo a nuevas fuentes de información, simpatizantes de Morena en Sinaloa afirman que en 2018 corrió la indicación a las huestes del Cartel de Sinaloa que para la elección presidencial había que votar por "el viejito”, así identificaban a AMLO. No es posible medir si fue definitorio el voto del narco en las elecciones de Sinaloa en 2018, lo que es un hecho es que Morena arrasó en ese estado en la elección presidencial y por primera vez ganó las alcaldías en las ciudades clave.

Forma equipo con quienes gobernaron en plazas de "El Mayo”

En Sinaloa, quienes están enterados de manera directa de las revelaciones de Rocha Moya y sus supuestos encuentros con "El Mayo”, me señalaron que lo que revelaría con más claridad si el gobernador electo tiene o no compromisos concretos con el líder del Cartel de Sinaloa será la conformación de su equipo.

El 28 de junio acaba de nombrar como secretario particular a Alejandro Higuera Osuna. Fue su coordinador de campaa en la contienda que acaba de terminar. Postulado por el PAN, fue alcalde de Mazatlán en tres periodos: 1999-2001, 2005-2007 y 2011-2013.

De acuerdo al testimonio dado por Vicente Zambada Niebla, hijo de "El Mayo” al gobierno de Estados Unidos, al contenido de su diario del cual tengo copia y publiqué en el libro "El Traidor”, así como a testimonios rendidos durante el juicio contra Joaquín Guzmán Loera en Nueva York, "El Mayo” controlaba Mazatlán en las fechas en que Higuera Osuna fue alcalde de esa ciudad ubicada en el Pacífico. Ejerció el mismo control en el periodo en que su secretario del Ayuntamiento, Pedro Osuna Amparo- también del PAN-, lo relevó y ocupó el cargo de presidente municipal interino durante un mes a mitad de 2007, y cuando otro panista y tesorero del gobierno de Higuera Osuna, Isaac López Arregui,  ocupó el cargo de alcalde interino de agosto a diciembre de 2007.

De acuerdo al testimonio de Vicente Zambada, en ese período el Cartel de Sinaloa ocupaba las playas de Mazatlán para la descarga de lanchas rápidas cargadas de cocaína las cuales a su vez descargan la droga de buques provenientes de Sudamérica que estaban en altamar.

En Mazatlán había narcobodegas donde se almacenaba la droga, y la familia de "El Mayo” se sentía tan protegida en Mazatlán, que ahí compró propiedades y constituyó negocios.

Avanzan en EE.UU. contra narco-política

Mientras en México crece una nueva camada de servidores públicos y gobernantes con señalamientos de contactos con el narcotráfico, en Estados Unidos se comienza a cerrar el cerco contra uno de los personajes emblemáticos de la historia reciente del narcogobierno en México: Genaro García Luna.

García Luna encabeza una antigua y peligrosa camada de policías y funcionarios públicos corruptos que fue protegida durante los gobiernos de Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto. Fue ex titular de la Agencia Federal de Investigaciones con Fox, Secretario de Seguridad Pública con Calderón, y contratista con Peña Nieto.

Luego de su arresto y encarcelamiento en 2019, el Departamento de Justicia ha incriminado a otros de sus cómplices: los también comandantes policiacos Luis Cárdenas Palomino y Ramón Pequeño García.

De acuerdo a documentos de la Corte de Distrito Este de Nueva York, luego de casi año y medio de negociaciones, la Fiscalía finalmente está a punto de concretar un acuerdo de culpabilidad con Iván Reyes Arzate, ex comandante de la Policía Federal y pieza clave en la red de narcotráfico y corrupción encabezada por García Luna durante al menos 19 años.

El 8 de junio pasado, los abogados de Reyes Arzate y la Fiscalía enviaron al juez Brian M Cogan-el mismo que sentenció a"El Chapo” Guzmán a cadena perpetua- un documento en donde afirman que están ya por concretar el acuerdo de culpabilidad de Reyes Arzate. Incluso se afirma que existe ya un borrador del acuerdo.

El acusado y la Fiscalía pidieron la suspensión de la audiencia que estaba programada para el 16 de junio y esta fue reprogramada para agosto, "para permitir a las partes (acusado y Fiscalía) continuar con sus esfuerzos en la negociación de culpabilidad, y para que el acusado y su abogado defensor revisen la propuesta de acuerdo de culpabilidad propuesto por el gobierno”, se afirma textualmente en el documento que está en los archivos de la corte.

Reyes Arzate era Director General de Apoyo Táctico contra el Narcotráfico y Delitos Conexos cuando García Luna era el responsable de la Seguridad pública a nivel nacional. Fue testigo directo de reuniones entre el grupo criminal de policías encabezado por García Luna, Luis Cárdenas Palomino, Ramón Pequeño, Armando Espinosa de Benito, Facundo Rosas Ross, entre otros, con miembros del Cartel de Sinaloa y del Cartel de los Beltrán Leyva.

Si el acuerdo con la Fiscalía se concreta, Iván tendrá mucho que decir sobre funcionarios públicos del sexenio de Calderón involucrados en la red de narco-corrupción. Algunos inactivos, pero otros activos en diversas áreas de gobiernos estatales, municipales y federal.

El caso judicial contra García Luna, cuyo juicio podría comenzar la próxima primavera,  debería de servir como recordatorio a quienes actualmente gobiernan, y a los que resultaron electos el pasado 6 de junio, que ni aún un hombre poderoso, intocable y con importantes relaciones de alto nivel con el gobierno de Estados Unidos como lo fue el ex Secretario de Seguridad Pública Federal puede permanecer para siempre impune.