La Coalición Nacional Siria había dado seis horas a la ONU para retirar la invitación a Irán para que concurriera a la cumbre de Ginebra 2. En caso contrario, la mayor plataforma opositora no asistiría a la cita y le restaría toda credibilidad al esfuerzo internacional que busca una salida política a la guerra civil. Francia, Estados Unidos y Arabia Saudita se habían unido a las críticas que desató la inesperada decisión de Naciones Unidas.

No pasaron las seis horas del plazo cuando el secretario general Ban Ki-moon retiró, este lunes (20.01.2014), la invitación a la república islámica, cuyo embajador ante la ONU había dicho, horas antes, que su país no acudiría a las reuniones en Suiza si para ello era necesario aceptar los acuerdos alcanzados en Ginebra previamente, que incluyen la posibilidad de formar un Gobierno de transición.

Ki-moon dijo estar “profundamente decepcionado” por las condiciones que puso Irán. Su portavoz, Martin Nesirky, detalló que el secretario general tomó la determinación teniendo en cuenta la postura iraní de “permanecer fuera de un entendimiento básico, por lo que la reunión de un día en Montreaux se llevará a cabo sin la participación de Irán”. Este encuentro antecederá a otro que se realizará en Ginebra.

Sorpresa para todos

El domingo 19 de enero, Ki-moon sorprendió a todos al extender la invitación a Irán, que primero aceptó sin condiciones, pero luego puso sobre la mesa su exigencia de no considerar los acuerdos alcanzados previamente. “Irán ha sido siempre partidario de encontrar una solución política a la crisis. Sin embargo, la República Islámica no aceptará ninguna condición previa para su participación en la conferencia de Ginebra II. Si la participación está condicionada a la aceptación del comunicado de Ginebra I, Irán no participará en Ginebra II”, dijo el embajador Mohammad Khazaee.

La idea del secretario general de invitar a Irán el pasado domingo 19 de enero provocó inmediatas repercusiones, y la Coalición Nacional Siria, el mayor grupo opositor en el exilio, amenazó con restarse de los diálogos y exigió a Irán a retirar sus milicias de territorio sirio. Estados Unidos, en tanto, dijo que la invitación debía ser retirada si Irán se negaba a aceptar la premisa de un Gobierno transitorio en Siria. Eso fue lo que finalmente ocurrió.

Ban dijo previamente que la declaración pública de Irán de que no apoyaba el acuerdo de Ginebra del 2012 no era “consistente” con las afirmaciones que le hizo el ministro de Relaciones Exteriores Mohammad Javad Zarif. Aun así, “instó a Teherán a sumarse al consenso global tras el comunicado de Ginebra”, dijo el portavoz Nesirky. En tanto, la Coalición Nacional Siria confirmó su asistencia al encuentro.

DZC (AP, AFP, Reuters)