La alta traición y planificación de un golpe de Estado con que fue acusado Jang Song Thaek, el segundo hombre más poderoso de Corea del Norte y tío del líder Kim Jong-un, no solamente terminaron con Jang muerto, sino también con su familia completa asesinada, de acuerdo a reportes publicados este domingo (26.01.2014) por la prensa surcoreana, que cita a diversas fuentes.

“Todos los familiares directos de Jang están muertos, incluso sus hijos”, asegura la información. Entre las víctimas estarían también los hijos, hijas y nietos de sus dos hermanos. También la hermana de Jang y su marido, el embajador norocoreano en Cuba, así como su sobrino, el embajador en Malasia, habrían sido ejecutados. “Las ejecuciones significan que no quiere que queden rastros de Jang” dijo un informante a la agencia Yonhap.

Jang, marido de una tía carnal de Kim y considerado durante mucho tiempo uno de los cerebros en la sombra del régimen y además mentor de Kim, cayó en desgracia en diciembre y fue ejecutado. También fue acusado de malversación de divisas y corrupción. En su momento, algunos medios de prensa publicaron que Jang fue lanzado a una jauría de 120 perros hambrientos, lo que posteriormente fue completamente descartado.

Purga continuaría

Según informa la prensa surcoreana, los familiares de Jang que vivían en el extranjero, como los embajadores, fueron citados a Corea del Norte y posiblemente fueron ejecutados poco después de la muerte del exnúmero dos del régimen. Algunos incluso habrían sido fusilados en público, según la información, que no fue confirmada desde Pyongyang. Otras fuentes afirman que la purga continúa.

“Algunos fueron abatidos a tiros mientras les sacaban a rastras de sus apartamentos”, hizo saber otra persona, que solicitó no ser identificada por la prensa surcoreana. Algún familiar indirecto, como la esposa del embajador en Malasia, habría sobrevivido a esta masacre, según las fuentes de la agencia oficial surcoreana, aunque no se especifican las razones para que no fuese ejecutada como el resto de sus cercanos.

La noticia se produce en un momento en que Corea del Sur tiene fuertes dudas de que su vecino del norte vaya en serio con sus recientes propuestas para relajar la tensión en la península coreana, tal como expresó en su mensaje televisado de año nuevo el líder del Estado comunista, Kim Jong-un. Seúl teme una mayor inestabilidad en el país vecino tras las ejecuciones.

DZC (dpa, Europa Press)