Coronavirus: Italia trata de evitar un confinamiento gener
18 de octubre de 2020
Los alcaldes italianos podrán cerrar las áreas de sus ciudades donde se produzcan aglomeraciones.
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Los alcaldes italianos podrán clausurar las zonas más concurridas de sus ciudades, como las de fiesta, en caso de aglomeraciones para frenar los contagios, últimamente disparados, anunció este domingo (18.10.2020) en rueda de prensa el primer ministro, Giuseppe Conte.
Los regidores podrán tomar esta medida a partir de las 21.00 locales (19.00 GMT) si detectan que en un zona determinada se genera una aglomeración de personas, como en las áreas de fiesta nocturna, según el último decreto aprobado este domingo.
"No podemos perder tiempo para evitar un nuevo confinamiento general, el país no puede permitírselo", justificó Conte al ilustrar estas medidas, centradas especialmente en regular la vida en bares, restaurantes, gimnasios y escuelas, entre otros espacios.
"Los alcaldes disponen el cierre al público, tras las 21.00, de calles y plazas de las ciudades donde se creen aglomeraciones", se lee en el texto, aunque se permitirá entrar a la zona a quienes acudan a sus comercios "legítimamente abiertos" o a sus domicilios.
El nuevo decreto, válido hasta el 13 de noviembre, llega cuando Italia registra una media de unos 9.000 infecciones diarias desde la última semana tras uno verano tranquilo y hoy se detectaron 11.705 nuevos positivos, la cifra más alta de la pandemia en el país, aunque ahora se hacen muchas más pruebas que al principio.
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04:42
El Gobierno convino estas medidas con los representantes de las regiones, que se opusieron a propuestas que habían sonado en los últimos días como el cierre de los gimnasios y piscinas, algo que finalmente no se ha llevado a cabo.
Sin embargo Conte ha dado a estos centros deportivos el plazo de una semana para respetar a rajatabla los protocolos sanitarios: "Si no es así, lo avanzo, la semana que viene nos veremos obligados a cerrarlos", avisó el primer ministro.
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Golpe a la hostelería
El decreto de este domingo aporta modificaciones a otro aprobado el pasado 13 de octubre con el que se obligó a cerrar restaurantes y bares antes de la medianoche, algo que sigue vigente, y a las 21.00 horas en caso de que no tengan servicio de mesa.
No obstante, desde ahora los restaurantes, heladerías, bares, pub o bares que no permitan sentarse a su clientela deberán cerrar a las 18.00 (16.00 GMT), aunque el reparto a domicilio seguirá permitido. En los restaurantes además solo podrán sentarse a la misma mesa un máximo de seis personas. Las salas de juego, de apuestas y bingos solo podrán abrir hasta las nueve de la noche.
En cuanto al sistema educativo, las lecciones en las escuelas de primaria seguirán siendo presenciales, al considerarlas "un activo fundamental", pero ya desde secundaria "se favorecerán métodos más flexibles" y se organizarán entradas por turnos.
El primer ministro reconoció que entiende los sacrificios de los empresarios afectados por esta medida pero prometió ayudas.
Italia permanecerá en estado de emergencia hasta el 31 de enero del año que viene.
eal (efe, reppublica.it, corriere.it)
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Sobre la importancia de las mascarillas
"Mientras no tengamos una vacuna, sigue siendo muy importante el uso de la mascarilla. Es un símbolo de solidaridad con el prójimo. Un escudo sencillo y al alcance de todos. La evidencia de que funciona es cada vez mayor. Probablemente a nadie le gusta usarla, pero hay que recordar que podemos ser asintomáticos y, al mismo tiempo, contribuir a que otros se infecten".
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Sobre la importancia del intercambio con América Latina
Cooperamos con América Latina porque son los que más están sufriendo en esta primera fase de la pandemia. Alemania puede aprender mucho de la dimensión del COVID-19 allí y de las medidas que se han tomado. Es errado pensar que los países de la región deben aprender de Alemania o que nosotros somos los profesores y los latinoamericanos son los alumnos que escuchan. La cooperación no funciona así.
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Sobre las lecciones de la primera ola en América Latina
Los países latinoamericanos deberían preparar y fortalecer mejor sus sistemas de salud pública. También trabajar en la descentralización de la salud para que funcione no solo en la capital. Esa sería una gran lección, y ojalá sea parte del aprendizaje de América Latina. Veremos si se llega a implementar.
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Sobre la desinformación y los políticos que utilizan la pandemia
Esto existe en todos los países del mundo. La desinformación y el rechazo de las personas a tomarse el trabajo de informarse bien y buscar fuentes sólidas está en todas partes. Ojalá que haya un fortalecimiento de la distribución de hechos científicos y salud por parte del Gobierno, que es el indicado para ese rol. Estados Unidos es el peor ejemplo que existe.
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Sobre el factor del clima
Es probable que la trasmisión se reduzca por el clima, pero el virus no va a parar por eso. Antes se decía que con altas temperaturas ya no habría problemas, pero luego vimos los casos en la Amazonía. También se dijo que en las zonas altas de los Andes el virus no era estable, y estamos viendo brotes enormes en esas zonas. Hay que tener mucho cuidado con esas conclusiones.
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Sobre la vacuna rusa y otras posibles vacunas
Hay que esperar y no crear falsas esperanzas. Ojalá funcione para 2021. Muchas de las vacunas que se están desarrollando son muy buenas. Yo soy amigo de todas las vacunas y no tengo preferencias. La demanda es tan grande que necesitamos todas. Por ahora, hay que tener confianza en las autoridades sanitarias de los países de la región, que están haciendo su trabajo dentro de sus posibilidades.
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Sobre el peligro que el coronavirus mute y la vacuna ya no sirva
Ese es un gran interrogante. Según propios análisis, yo creo que el riesgo de que el virus mute lo suficiente para escapar de la inmunidad inducida por la vacuna en la población es muy bajo. El virus de influenza A cambia muy rápidamente sus proteínas, pero los coronavirus no. Los coronavirus, incluyendo probablemente el SARS-CoV-2, tienen una proteína que corrige errores en su genoma.