Coronel Assimi Goita se presenta como nuevo lider de Mali
20 de agosto de 2020
El oficial golpista, que dirige el Comité Nacional para la Salvación del Pueblo, mantiene detenido al expresidente Ibrahim Bubacar Keita pese a la condena mundial.
Imagen: Getty Images/AFP/A. Risemberg
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Un oficial maliense, el coronel Assimi Goita, se presentó el miércoles (19.08.2020) como el nuevo hombre fuerte de Mali al frente de la junta militar que depuso la víspera al presidente Ibrahim Bubacar Keita, un "motín" condenado de manera unánime por la comunidad internacional.
"Me presento: soy el coronel Assimi Goita, presidente del Comité Nacional para la Salvación del Pueblo (CNSP)", declaró a la prensa este oficial que ya había aparecido ante las cámaras, sin tomar la palabra, en la noche del martes, cuando un grupo de militares anunció la creación de ese comité que provocó la dimisión del presidente Keita.
Goita dijo que su país se encontraba "en una situación de crisis sociopolítica, de seguridad" y aseguró: "ya no podemos equivocarnos más".
El coronel no podrá, sin embargo, contar con el apoyo de Estados Unidos, la Unión Europea y la Unión Africana que exigieron la liberación "inmediata" de Keita y condenaron el "motín".
El Consejo de Seguridad de la ONU pidió a los soldados amotinados "regresar a sus cuarteles sin demora" y la liberación del presidente, además de subrayar "la imperiosa necesidad de restablecer el Estado de derecho".
El presidente francés, Emmanuel Macron, cuyo país mantiene una importante presencia militar en Mali pacombatir a grupos yihadistas en la zona del Sahel, también consideró que "la lucha contra grupos terroristas y la defensa de la democracia y del Estado de derecho son indisociables".
"Salir de ella supone provocar inestabilidad y debilitar nuestra lucha. No es aceptable", añadió Macron en su cuenta de Twitter en la que pidió que "se devuelva el poder a los civiles".
Tras una cumbre extraordinaria de la UE, los 27 reclamaron un "retorno inmediato al Estado de derecho" en Malí y subrayaron la "gran preocupación" europea.
Washington exigió, por su parte, que "la libertad y seguridad de los funcionarios del gobierno" sea garantizada.
"Estados Unidos condena firmemente el motín del 18 de agosto en Malí, como condenamos cualquier toma del poder por la fuerza", señaló el secretario de Estado Mike Pompeo en un comunicado, sin mencionar un golpe de Estado. Llamó a "obrar para el restablecimiento de un gobierno constitucional".
gs (afp, ap, CNN)
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Los años sangrientos de Mali
Pese a la misión de la ONU y los acuerdos de paz, la violencia en Mali no cesa. Desde 2012, tuareg e islamistas luchan contra el Gobierno en Bamako. En varias ocasiones también extranjeros se han convertido en blanco.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/H. Traore
Ataque en el corazón de la capital
Los grupos terroristas Al Qaeda del Magreb Islámico y Al Murabitun reivindicaron el atentado contra el hotel Radisson Blu en Bamako, en el que los islamistas tomaron como rehenes a 170 personas. Decenas de huéspedes y empleados del hotel lograron escapar. 18 personas podrían haber muerto. El hotel alberga a muchos diplomáticos y periodistas de todo el mundo.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/H. Traore
Islamistas en el norte
En el país existen muchos grupos armados. Por ejemplo, las milicias islamistas Ansar Dine, que se autodenominan “Defensores de la Fe” y que están bajo el mando de Iyad Ag Ghaly. Desde 2012, luchan por un Estado islámico en el norte de Mali.
Imagen: Romaric Hien/AFP/GettyImages
Terror y destrucción del patrimonio cultural
En 2012, Ansar Dine se hizo en poco tiempo con el control de amplias regiones del norte de Mali. Allí las milicias establecieron un régimen de terror, por ejemplo, cortaban las manos a presuntos ladrones y lapidaban a presuntos adúlteros. Ansar Dine llamó la atención mundial por la destrucción sistemática del valioso patrimonio cultural del país, como esta mezquita del siglo XV en Tombuctú.
Imagen: Getty Images
Bombas sobre Trípoli, con réplicas en Mali
También la guerra en Libia atizó el conflicto en Mali. Como consecuencia del caos y de los enfrentamientos armados tras el derrocamiento del dictador Gadafi, a partir de 2011 grandes cantidades de armas y numerosos combatientes cruzaron la frontera de Mali.
Imagen: picture alliance / dpa
¿Azawad o Estado islámico?
Después de haber luchado conjuntamente durante cierto tiempo, las milicias islamistas desplazaron también a los rebeldes tuareg más moderados. Por ejemplo al Movimiento Nacional para la Liberación del Azawad (MNLA), que lucha por un territorio independiente de la tribu tuareg en el norte de Mali.
Imagen: picture-alliance/dpa/Bindra
Operación Serval
A principios de 2013, los islamistas amenazaban con entrar en la capital, Bamako, ante lo cual el presidente francés, François Hollande, ordenó una operación militar contra los rebeldes. Hasta el verano de ese año, los franceses lograron reconquistar, con el apoyo de tropas malíes y de África Occidental, las ciudades más importantes del norte de Mali, en el marco de la llamada Operación Serval.
Imagen: dapd
MINUSMA deberá garantizar estabilidad
Alrededor de 10.000 soldados de la ONU deberán preservar la frágil paz en Mali. También el Ejército alemán ha enviado a 200 soldados al sur del país. Además, en la capital de Bamako están estacionados otros 50 soldados germanos, en el marco de una misión europea de entrenamiento para el ejército local. En la imagen se puede ver a la ministra de Defensa alemana visitando a las tropas en Mali.
Imagen: Reuters
Un poco de paz
No obstante, rebeldes y delincuentes no dejan que el país recobre la tranquilidad. Las noticias sobre atentados y secuestros están a la orden del día. En años recientes, cientos de miles de malíes se han visto obligados a abandonar su país. Los niños en la imagen viven en un campamento de refugiados en el país vecino, Burkina Faso.