La Corte de Apelaciones de Múnich habría presentado cargos contra la presunta miembro del NSU (Nationalsozialistischer Untergrund, un movimiento de extrema derecha alemán) Beate Zschäpe, quien está acusada desde noviembre de 2012 de asesinato.

Los jueces determinaron este jueves (31.01.2013) que existía evidencia suficiente para llevar a Zschäpe, de 38 años, ante una corte bajo los cargos de asesinato, según informaron distintos medios de comunicación alemanes. Sin embargo, el vocero del tribunal se negó a confirmar o desmentir la información.

Las agencias dpa y AFP aseguraron que dos de los abogados defensores, Wolfgang Stahl y Anja Sturm, habían confirmado la decisión de la corte, que se basa en el hecho de que, para la ley, Zschäpe era un miembro del grupo al igual que sus dos compañeros, que murieron en un incendio aparentemente generado por ellos mismos.

La fiscalía ha acusado a la única sobreviviente del grupo de extrema derecha de ser cómplice de diez asesinatos. Zschäpe también enfrenta cargos por incendio agravado y por pertenecer a una organización terrorista.

Dudas y negligencia

El 4 de noviembre de 2011, el aparente suicido de los miembros de NSU Uwe Mundlos y Uwe Boenhardt dejó en evidencia a este grupo de tres neonazis, de quienes se cree son los responsables del asesinato de nueve inmigrantes turcos y griegos, así como la de una mujer policía, crímenes ocurridos entre los años 2000 y 2007.

La policía había atribuido esos asesinatos al crimen organizado, lo que llevó al Parlamento alemán a investigar las razones que motivaron estos errores en la investigación. El grupo también es acusado de ataques con bombas y de asaltos a bancos.

El caso ha atraído la atención de la ciudadanía debido a que parece demostrar una negligencia generalizada en las instituciones encargadas de mantener a raya estos peligros para la sociedad, en especial porque fallaron en ligar los atentados con agrupaciones de extremaderecha.

Los abogados de Zschäpe han negado sistemáticamente que la mujer esté relacionada con los crímenes. Desde su arresto, en noviembre de 2011, ella se ha rehusado a declarar sobre su supuesta actividad dentro del grupo extremista.

DZ (AFP, Reuters, dpa)