Para el viceministro de Relaciones Exteriores ruso, Serguei Ryabkov, se trata de "una vuelta al doble rasero" que "daña directamente las posibilidades de convocar la conferencia internacional de paz" que Moscú y Washington están tratando de organizar, según lo cita la agencia de noticias rusa Itar-Tass.

“Gasolina al fuego”

Por su parte, el embajador ruso ante la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Alexander Grushko, dijo que la medida "solamente echa gasolina al fuego". La agencia estatal siria Sana comentó a su vez que la decisión muestra que se han impuesto en la UE "las tradicionales potencias coloniales".

En opinión de Sana, una solución negociada implicaría una derrota de Londres y París en política exterior, porque tanto Reino Unido como Francia apoyan la caída del presidente Bashar al Assad y consiguieron dividir al bloque europeo entre quienes apoyan una solución política y quienes quieren la guerra.  Además, destaca la agencia gubernamental, ambos países quieren resolver sus actuales problemas económicos con lucrativos negocios de venta de armas.

"Gracias, pero…"

Por su parte, la oposición siria elogió y críticó al mismo tiempo la decisión, que no levanta el embargo de inmediato, sino a partir de agosto, para dar tiempo a la conferencia de paz que en teoría se celebrará en junio en Ginebra pero que aún no ha sido convocada.

"Damos la bienvenida a la decisión y creemos que es una medida positiva de la comunidad internacional", dijo Louay al Mokdad, el cordinador político y de medios del Ejército Libre de Siria, a la agencia alemana de noticias dpa. "Pero esperar tres meses enteros hasta que decidan comenzar a armar a los rebeldes le dará al régimen más tiempo para matar a la gente en Siria. Pedimos a la UE que acelere esa medida", añadió.

"Es definitivamente un paso positivo, pero tememos que es muy limitado y llega muy tarde", declaró Luay Safi, vocero de la opositora Coalición Nacional Siria, a la agencia de noticias francesa AFP en Estambul. El pueblo sirio está "decepcionado", pues la gente esperaba que "las democracias se ocuparan de aquellos que anhelan la democracia", agregó Safi. "Esperamos que se trate de una decisión efectiva y no sólo de palabras", dijo también a AFP Kassem Saadeddin, vocero del Ejército Libre de Siria.

¿Y ahora qué?

Los Gobiernos de la UE no lograron acortar sus diferencias este lunes en torno al suministro de armas a los rebeldes sirios, pero decidieron permitir que expire una prohibición sobre proveer armas a los opositores al Gobierno del presidente sirio, Bashar al-Assad.

Mientras países del bloque como Austria temen que el envío de armas a los rebeldes sirios solo contribuya a ensangrentar aún más al país árabe, otros como Gran Bretaña y Francia, que se opusieron especialmente a renovar el embargo, dejaron claro que no entregarán armas "en esta etapa", pero funcionarios de la UE dijeron que el compromiso expira efectivamente el 1 de agosto.

Rusia y Estados Unidos anunciaron el 7 de mayo que intentarían convocar al Gobierno de Assad y a sus opositores a una conferencia para buscar poner fin a un conflicto de 26 meses en el que más de 80.000 personas murieron.

El ministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergei Lavrov, y el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, volvieron a reunirse el lunes en París para discutir la conferencia propuesta, pero no anunciaron planes específicos. Y las perspectivas de la reunión podrían efectivamente complicarse tras este levantamiento del embargo de armas.

rml (dpa, afp, reuters)