Así lucen muchas salas de exposiciones en la feria: robots por donde se mire. Grandes, fuertes, pero también pequeñas máquinas de acero. Y todas presuntamente con un solo fin: ayudar a los seres humanos.

Este simpático compañero (derecha) sólo quiere jugar con fichas de Lego. La empresa alemana Schunk no construye ella misma ningún robot, pero no pierde de vista sus manos: la técnica de “agarre” de esta compañía es demandada en todo el mundo.

Grande, ruidosa y sucia: eso era en el pasado. La fábrica del futuro es pequeña, silenciosa y limpia. Con una construcción modular, en un juego conjunto con componentes de distintos proveedores, una producción flexible es totalmente posible: primero un ejemplar, luego la producción en masa.

El que siempre pensó que Dr. Oetker sólo producía pizzas y cervezas, se equivocó. También Symmedia pertenece al grupo. Con el software de la compañía, 15.000 fábricas ya están conectadas. El gerente Peter Barkowsky muestra el último producto: unos anteojos electrónicos con los que es posible un servicio digital para máquinas separadas por miles de kilómetros entre sí.

Los anteojos electrónicos ya se encuentran disponibles en muchos puestos de la feria. En conjunto con el gigante Microsoft, desarrollaron una interfaz con la que toda una línea de producción puede controlarse a distancia. Aquí los clics con el ratón son prácticamente virtuales.

“El iPhone nunca se hubiese realizado con tanta rapidez si alguien no hubiese estado ahí para decir 'no necesitamos más unas instrucciones de uso'. Y esta mentalidad se introduce ahora en la fábrica”, sostiene Jochen Köckler, organizador de la feria. Muchos productores, entre ellos Universal Robots de Dinamarca, muestran soluciones digitales similares.

Las fábricas están sobrecargadas con una gran cantidad de señales de seguridad. ¿Cómo sería si en un futuro próximo un Smartwatch te avisara cuándo y dónde debes usar las botas de seguridad?

Con tanto futuro por delante, es bueno echar un vistazo al pasado. Hace exactamente 70 años comenzó la primera “Feria de Exportación” en Hannover. En los 21 días que duró, se cerraron contratos por alrededor de 32 millones de dólares. La feria recuerda ahora ese año con una flota de pequeños Bulli T1, todo un símbolo del milagro económico.

Este ejemplar es, sin duda, más moderno que el T1, sobre todo su fuente de impulso: una pila de combustible. Para eso implementa Ursus, un fabricante asociado de Polonia, distintas escalas. Una coproducción polaco-alemana es también posible: en las ruedas traseras se encuentran instaladas dos unidades eléctricas de la empresa alemana Ziehl-Abegg.

Aprender de la naturaleza: este enfoque sigue hace tiempo el especialista en automatización Festo. Una vez fue un drone con alas como un ave, luego fue una trompa de elefante. Este año presenta un brazo de agarre modelado con tentáculos de pulpo. La canciller Angela Merkel se ve aún un tanto escéptica.

Cada mano robótica tiene mecanismos que deben ser lo más pequeños posibles y, a la vez, de gran rendimiento. En su fabricación se ha especializado la empresa familiar alemana Faulhaber. A la izquierda se ve un componente de la sonda Rosetta de la ESA: luego de diez años en el espacio exterior y 6,5 millones de kilómetros recorridos, aún sobrevive sin problemas.

Quien a menudo y por largo tiempo tiene que trabajar cargando aparatos pesados, sabe qué tan agotador puede ser. Para esto los exoesqueletos pueden ser de gran ayuda. Los investigadores de la Universidad Militar de Alemania muestran en Hannover cómo se ve esta ayuda que hace el trabajo mucho más simple. ¡Sólo para fines pacíficos!

Esta nube de la que todos hablan, ¿dónde se encuentra realmente? Aquí, por ejemplo, en Hannover. Pero sólo simbólicamente. Después de todo, incluso el gigante del comercio online Amazon se encuentra, entretanto, en medio de los expositores en Hannover. Porque el servicio en la nube de almacenamiento remoto de datos es un negocio gigante.

Por suerte no todo es digital en la Feria de Hannover, donde la principal preocupación de la mayoría de las 6.500 empresas participantes es la digitalización. Si la computadora se bloquea o el servidor no está accesible, esta es la última herramienta de emergencia disponible en la exposición ferial.