El caso de Opel es dramático: a partir del lunes próximo, la cadena de producción de la planta de Eisenach se detendrá por tres semanas, en la planta de Bochum se dejan de montar automóviles por dos semanas.

Debido al descenso de la demanda, Opel montará 40.000 vehículos menos de lo planeado inicialmente. "Como consecuencia de la crisis financiera, la gente no gasta dinero y compra menos automóviles de lo habitual", dijo un portavoz de la empresa.

Agregó que Opel no quiere montar automóviles para mantenerlos en depósito, porque ello tira a la baja los precios de los coches, tanto de los nuevos como de los de segunda mano.

Luego de haber trabajado muchas horas extra en la primera mitad de año, los trabajadores de Opel se toman ahora en las plantas de Bochum y Eisenach, obligadamente, días libres. La empresa no cuenta con que tenga que despedir a trabajadores.

En Sarreluis, la Ford alemana sí despidió a 200 trabajadores temporales y reducirá algo la producción. Los trabajadores cesados habían sido contratados para hacer frente a un esperado aumento de la demanda hacia fines de año, que, en vista de la crisis, no se producirá.

España y Estados Unidos: los mercados tambalean

Muchos menos coches se están comprando sobre todo en España, golpeada por la crisis en el sector de la construcción, amén de la inseguridad general. Opel no reducirá la producción sólo en Alemania, también plantas en España y Gran Bretaña se verán afectadas.

BMW reduce su producción hasta fin de año en 20.000 a 25.000 unidades, que inicialmente estaban destinados al mercado estadounidense, según comunicó la empresa,. "En caso de ser necesario, bajaremos aún más la producción", dijo un portavoz de BMW en Múnich. Los trabajadores se tomarán también en este caso días libres, para compensar horas extras acumuladas antes de la crisis.

Daimler anunció que reducirá su producción "un poco en todas las plantas y todos los modelos", a efectos de repartir los efectos y que ninguna fábrica se vea perjudicada más que otra. "Tratamos de producir de acuerdo con la demanda", dijo un portavoz de la empresa en Stuttgart.

El singular caso de Volkswagen

El único que se salva de una disminución de la producción es por ahora el grupo Volkswagen. "VW ha superado hasta ahora con éxito el difícil entorno de mercado generado por la crisis financiera", manifestó Michael Brendel, portavoz de VW, en Wolfsburgo, sede central del grupo.

La marca Audi, que pertenece al Grupo Volkswagen, anunció incluso ventas récord para septiembre: 95.000 unidades más que el mes anterior, lo que supone un aumento del 12 por ciento.

A contracorriente de las tendencias actuales en bolsa, el valor de las acciones de VW subió este martes por la mañana hasta un 50 por ciento, llegándose a cotizar a 440 euros. Al cierre de bolsa, las acciones de VW estaban cotizándose a 350 euros, lo que supone un nada despreciable aumento de valor del 19 por ciento con respecto al día anterior.