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Crisis humanitaria

26 de marzo de 2003

La dramática situación que padece la población civil en amplias regiones de Irak, provoca alarma internacional. El asedio militar conducirá a catástrofes en ciudades, advierten organizaciones humanitarias.

Una escuela para niñas en Basora, destruída por los bombardeos.Imagen: AP

La guerra en Irak ya ha causado devastadoras consecuencias para la población civil en las zonas de combate, pero las organizaciones humanitarias no pueden actuar porque la situación es sumamente peligrosa. A pesar de que existe una reserva de alimentos para abastecer a la población durante seis meses, según afirma el régimen iraquí, las agencias humanitarias están sumamente preocupadas por la falta de agua potable.

Las fuerzas aliadas reportaron tener asegurado el puerto de Um Qasar, al sur de Irak, a través del cual se distribuirán en un lapso de 48 horas, los paquetes de ayuda humanitaria que prometió Estados Unidos. Pero en la ciudad de Basora los combates recrudecen. Asediada desde hace cuatro días, la segunda ciudad más grande de Irak, con 1,5 millones de habitantes, así como los poblados aledaños, tienen los suministros de agua y luz cortados tras los intensos bombardeos. No podrán pasar a los convoys de ayuda humanitaria, mientras la ciudad no se encuentre bajo el firme control de fuerzas anglo-estadounidenses.

Alerta humanitaria

Según estimaciones del grupo 'Accion Alemania Ayuda' (ADH), que integra a nueve organizaciones no gubernamentales alemanas, unos diez millones de personas en las ciudades de Basora y Mosul, padecen ya la falta de abastecimiento de agua potable, alimentos y medicinas. Entre más se prolongue la guerra, aumenta el riesgo de se produzca un desastre humanitario, según el coordinador, Heribert Roehrig.

El experto sostiene que significa igual peligro si millones de personas intentan huír de las ciudades en las que se libran los combates, como si permanecen en ellas sin poder ser abastecidos. Otro miembro de la agrupación, Wolfgang Jamann, recordó que antes del comienzo de la guerra la mayoría de la población civil ya dependía de la ayuda humanitaria, y advirtió que alrededor de medio millón de personas han abandonado ya sus casas.

Fischer critica la guerra

El ministro alemán del Exterior, Joschka Fischer, criticó nuevamente la ofensiva bélica contra Irak y enfatizó que la ONU es la institución más importante para preservar la paz y la estabilidad. "Había otra alternativa a la guerra para hacer cumplir a Irak las demandas de la comunidad internacional sobre el desarme", dijo Fischer ante la Comisión de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, en Ginebra, Suiza .

El ministro advirtió que en tiempos de guerra, los derechos humanos se encuentran particularmente amenazados y que las mujeres y los niños son los más vulnerables. El ministro apeló a las partes en conflicto a acatar los lineamientos del derecho internacional en materia humanitaria. También el Papa Juan Pablo II y el presidente Francés, Jacques Chirac, abogaron por el respeto a la población civil.

Ayuda de la ONU

Se prevé que esta semana, el Consejo de Seguridad de la ONU, adopte una resolución de emergencia para reiniciar los envíos de ayuda humanitaria que serán financiados por el programa "petróleo por alimentos". La resolución, que es apoyada al parecer, por los 15 países miembros del Consejo, otorgará un mandato limitado a 45 días para suministrar con lo indispensable a la población iraquí.

El secretario general de la ONU, Kofi Annan, mostró su preocupación por la situación que atraviesa la población, en particular la de Basora, y prometió que la organización hará todo lo posible para hacer llegar la ayuda humanitaria. Sin embargo recordó: 'en tiempos de guerra, son las partes beligerantes responsables del bienestar y la seguridad de la gente. "En cualquier situación de ocupación, es la fuerza ocupante la que tiene la responsabilidad del bienestar de la población", dijo Annan.

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