En la Eurocámara, Cristina Fernández tuvo un encuentro en Bruselas con sus compañeros de lucha. Los temas fueron la derechización del electorado latinoamericano, los medios, la mujer, los avances y retrocesos sociales.
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"No al 2x1 de genocidas” y "Cristina = Educación” se leía en las pancartas que sostenía el público que asistió a la conferencia que Cristina Fernández de Kirchner dio en el Parlamento Europeo. Así como también otra pancarta, una sola, con "Korruptos welcome”.
En Bruselas, invitada a esta charla por el Grupo Confederal de la Izquierda Europea, la ex presidente argentina –procesada actualmente por asociación ilícita, corrupción y lavado de dinero- dibujó el momento político de América Latina. El enfoque: la tendencia hacia la derecha que ha definido resultados electorales decisivos, como Argentina y Venezuela, o ha generado sismos como el brasileño.
"¿La gente quiere comer menos? ¿La gente quiere vivir en la calle? ¿La gente no quiere tener trabajo? ¿La gente quiere que se le pague poco? ¿No quieren tener educación, ni salud ni ciencia? Mientras el mundo no quiera estas cosas, la derecha no puede estar triunfando en el mundo. ¿Entonces qué está pasando?”, planteaba la exmandataria.
En su haber están los datos de reducción de pobreza, de aumento de nivel educativo, de bienestar social y de políticas favorables a la mujer. También la revisión judicial de la cruenta historia argentina, algo que el nuevo gobierno en la Casa Rosada vuelve a enmendar.
En la capital belga, en un entorno político que se define como izquierda europea, la exmandataria propuso: "es más fácil agrupar a los que están siendo agredidos como "pueblo” y no como derecha o izquierda”.
"Ascenso mentiroso”
La ascensión del nuevo gobierno argentino, después de más de doce años de kirchnerismo, se explica, en su opinión, por las falsas promesas electorales del gobierno de Mauricio Macri.
"Sólo iban a cambiar las cosas que estaban mal”, denunció. Entretanto, según cifras barajadas en la conferencia, hay un millón y medio de desempleados más y la pobreza energética –los que no pueden pagar ni luz, ni gas, ni agua- se ha disparado y "el 50% de la población no llega a fin de mes”.
¿Mordaza a las mujeres?
No obstante, según la expresidenta argentina, ésta situación no llega a los medios porque éstos están al servicio de las grandes corporaciones. Éstos, prosigue Kirchner, crean paraísos o infiernos mediáticos. En los primeros todo está bien; en los otros, lo contrario. Ella misma, según su percepción, como líder sufre difamación concertada. La caricatura poniéndole mordaza fue el ejemplo: "¿Nos quieren calladitas? No nos callaremos”.
"Mientras seamos cosas y no personas para los medios de comunicación, mientras continúen viéndonos de cierta manera y no como personas, estamos en peligro. Y eso es muy difícil de combatir cuando tienes gobiernos misóginos”, comentó a DW al respecto, la eurodiputada española Estefanía Torres, del partido español Podemos, que forma parte de la bancada de la izquierda europea.
"Las mujeres siempre corremos el riesgo de perder nuestros derechos, mientras los medios de comunicación y el mercado en general continúe cosificándonos”, añadió.
"La estigmatización es más brutal para las mujeres"
"Si encabezar un proyecto popular afectando a los intereses de la riqueza concentrada es difícil para un hombre, para una mujer lo es el triple. La estigmatización es más brutal, no se dirige a lo político, sino a la forma de hablar, a la forma de vestirse”, declaró Kirchner, puntualizando que mientras la violencia simbólica sea aceptada socialmente, sirve para nutrir hechos como el que en Argentina haya una muerta cada 30 horas.
"Cristina ha hecho una exposición brillante de la situación actual”, concluye Estefanía Torres, quien desearía para su país la revisión de los hechos de la dictadura, como lo hizo Argentina. Y quien, ante la violencia de género y el acoso se hace eco del mensaje de la ex mandataria y concluye: "No debemos dejar de combatir la violencia simbólica ni la física. No debemos callarnos. Les gustaría que callásemos pero no lo vamos a hacer”.
Cristina Fernández de Kirchner vuelve al ruedo
A la expresidenta argentina algunos le reprochan su estilo entre autoritario y maternal y una peculiar tendencia a la dramaturgia. Sin embargo, muchos otros claman: "Abrázame hasta que vuelva Cristina".
Imagen: Getty Images/AFP/F. Monteforte
El retorno de Cristina
La expresidenta Cristina Fernández de Kirchner obtuvo poco más del 34 por ciento de los votos en la provincia de Buenos Aires en las primarias celebradas el 13 de agosto, prácticamente igualando al candidato oficialista. Se posiciona así como candidata con opción a un escaño en el Senado y como figura de liderazgo en la oposición al gobierno del presidente Macri.
Imagen: Getty Images/AFP/E. Abramovich
Oposición contra Macri
Cristina Fernández de Kirchner es vista por la oposición como una figura capaz de aglutinar el descontento contra la presidencia de Macri y las medidas económicas que ha adoptado, con fuerte impacto a nivel social. El gobierno afirma que han sido medidas necesarias para rectificar las fallidas políticas del gobierno anterior.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/A.Marcarian
Saliendo del tribunal
La expresidenta ha estado en el blanco de investigaciones judiciales por presuntas maniobras de lavado de dinero y pago de sobornos. Cristina Fernández de Kirchner ha negado haber cometido cualquier acto ilícito durante su gobierno.
Imagen: Reuters/M. Brindicci
Cristina Fernández, "relato" y dramaturgia
La presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, marcó con su estilo, su "relato" propio de la realidad y su dramaturgia casi una década de gobierno. Ahora, luego de las elecciones, abandona el sillón de Rivadavia, pero sigue influyendo en la política argentina, ya que el Congreso aún cuenta con una mayoría kirchnerista. A pesar de eso, la era de CFK llegó a su fin.
Imagen: Getty Images/A.Pagni
La sucesora de Néstor Kirchner
Cristina Fernández de Kirchner comenzó su carrera política en 1989 como diputada provincial de Santa Cruz. Conoció a Néstor Kirchner durante su militancia peronista, en 1974, y se casaron en 1975. Llegó a la presidencia argentina en diciembre de 2007, y fue reelecta en 2011. La muerte de Néstor Kirchner, el 27 de octubre de 2010, fue un duro golpe para ella y para sus hijos, Florencia y Máximo.
Imagen: D. Garcia/AFP/Getty Images
Fuertes vínculos en el Mercosur
Aquí, la presidenta y su homólogo de Bolivia, Evo Morales, comparten la indumentaria típica boliviana durante una ceremonia en la Casa Rosada. La presidenta anunció en 2013 que impulsaría "la reconstitución del Mercosur" y siempre resaltó los vínculos con los países vecinos. También instó a "un fuerte pronunciamiento" del Mercosur por el espionaje cibernético de la NSA a países lationamericanos.
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Victoria con el 54,11 por ciento
Aquí, Cristina Fernández saluda al público tras su investidura como presidenta de los argentinos en su segundo mandato, en 2011, al que accedió con un 54,11 de los votos. Posa junto a sus hijos, Máximo y Florencia frente al Congreso Nacional, en Buenos Aires. Máximo, candidato a diputado, es investigado por presuntas cuentas secretas en EE. UU. e Irán. Él niega las acusaciones.
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Un vicepresidente en apuros
La designación de Amado Boudou como vicepresidente en el segundo mandato de Cristina Fernández fue más tarde criticada tanto por el perfil un tanto frívolo de Boudou como por las acusaciones en causas aún abiertas en su contra, como el caso "Ciccone", por haber adquirido una empresa monopólica quebrada a fin de que pudiera operar con el Estado en la impresión de billetes y documentos oficiales.
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La pelea con el grupo "Clarín"
El debate sobre la concentración de los medios sigue abierto en Argentina. La presidenta sostuvo una larga disputa con el grupo Clarín, al que acusó de ser un monopolio mediático. Al mismo tiempo, se le critica que alentara el desarrollo de un grupo de medios oficialistas: "Cristina crea un holding de medios adictos al gobierno", dijo a DW la escritora y periodista Laura di Marco.
Imagen: picture alliance/dpa Fotografia
Derechos humanos e individuales
Cristina Fernández dio continuidad a la política de derechos humanos de Néstor Kirchner, apoyando la búsqueda de nietos de desaparecidos, entre otras cosas, y amplió los derechos individuales con la aprobación del matrimonio igualitario y otras leyes en torno a la transexualidad. Aquí, con Estela de Carlotto, una de las Abuelas de Plaza de Mayo, y su nieto, que recuperó su verdadera identidad.
Imagen: picture-alliance/dpa
Discursos por cadena nacional
La presidenta argentina acostumbraba a hablar por cadena nacional, algo aplaudido por sus seguidores y denostado por la oposición. Al dirigirse al público, su estilo siempre fue personal y, para muchos, carismático. Según dijo en una de sus alocuciones, "el kirchnerismo dio independencia a Argentina".
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Reformas opacadas por falta de transparencia
En junio de 2015, la presidenta argentina anunció el envío al Parlamento de un proyecto de ley para que algunos beneficios sociales, entre ellos la Asignación Universal por Hijo (AUH), fueran ajustados periódicamente. Estos avances sociales se ven opacados por la falta de transparencia en los índices de pobreza, por una elevada tasa inflacionaria y por el déficit fiscal.
Imagen: Reuters/E. Marcarian
Larga disputa por los "fondos buitre"
La disputa entre Argentina y los “fondos buitre” sigue siendo explosiva, también en 2015. Cuando la ONU aprobó, el 10.9.2015, una resolución impulsada por Argentina que propone la creación de un marco regulatorio para la reestructuración de deudas soberanas, el ministro de Economía, Axel Kiciloff (dcha.), dijo que era "un paso fundamental contra esos ataques, también a otros países."
Imagen: Leo La Valle/AFP/Getty Images
Cristina y las religiones
El Papa Francisco recibió en septiembre de 2014 a su compatriota, la presidenta argentina, en una audiencia privada en el Vaticano. La presidenta de Argentina reveló que había sido "amenazada" por la organización terrorista Estado Islámico debido a su posición diplomática ante el conflicto en Cercano Oriente, en favor de "la existencia del Estado de Palestina y del Estado de Israel".
Imagen: picture-alliance/dpa
Gran impulso a la cultura
A nivel nacional, el gobierno de Cristina Fernández dio un importante impulso a las manifestaciones culturales y artísticas, pero con un estilo marcadamente personalista. En la foto, la inauguración del Centro Cultural Kirchner, en la capital argentina.
Imagen: Reuters/Argentine Presidency
Dos operaciones
Durante sus dos mandatos, Cristina Fernández fue sometida a dos operaciones serias: una, para drenar un hematoma cerebral, y la otra, para extirpar un tumor en la tiroides, recuperándose de ambas.
Imagen: picture-alliance/dpa
Negocios con Rusia
De la reunión de Cristina Fernández de Kirchner con Vladimir Putin, en abril de 2015, se derivó bastante más que la firma de acuerdos energéticos y económicos. En el año electoral de Argentina, este gesto de acercamiento a Rusia puede interpretarse también como una clara jugada en lo referente al alineamiento de Argentina con el eje Rusia-China.
Imagen: Reuters/A. Nemenov
El caso Nisman sacude al país
La muerte -aún no esclarecida- del fiscal Alberto Nisman golpeó a la sociedad argentina y sigue pesando como una deuda pendiente de la Justicia. Nisman fue hallado muerto en su vivienda el 18 de enero, cuatro días antes de presentar una acusación contra la presidenta por una supuesta complicidad con los implicados iraníes en el atentado de la AMIA, en 1994, que dejó 85 muertos.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/Pisarenko
Daniel Scioli, ¿continuador de la era Kirchner?
Daniel Scioli es candidato que, de ganar las elecciones, daría continuidad al programa político del kirchnerismo. Según expertos, el gobierno deja serios problemas económicos estructurales, pero también algunos logros sociales y un aumento en el nivel de consumo.
Imagen: Reuters/A.Marcarian
Adiós a una figura que polariza
Cristina Fernández de Kirchner polarizó a la sociedad argentina y la marcó con su estilo entre autoritario y maternal. Estuvo rodeada de acusaciones de corrupción y la inseguridad jurídica creció durante su gobierno, pero dio impulso a la cultura y a los derechos civiles. Su adiós deja un legado complejo al próximo gobierno, y es probable que no se aleje del todo del quehacer político de su país.