Un diputado conservador británico está recibiendo numerosas críticas por haber sido sorprendido jugando al videojuego “Candy Crush Saga” en su iPad durante una sesión de un comité. “Fue una sesión larga sobre la política de pensiones”, se excusó el diputado tory Nigel Mills en declaraciones al diario The Sun. Según explicó, hubo una parte que no le interesaba demasiado y comenzó a jugar “una o dos partidas”. Una fuente anónima dijo al diario que Mills estuvo jugando durante dos horas y media.

“Intentaré en el futuro no volver a hacerlo”, apostilló Mills al diario. En Westminster suele ser habitual que durante los complejos debates, los diputados acudan a los pubs cercanos para pasar algo de tiempo. En muchos bares siguen existiendo las denominadas “Division Bells”, las campanas que se hacen sonar para que los diputados regresen a la Cámara Baja y no se pierdan la votación de decisiones importantes. (dpa)