Los barcos que se aventuran por las costas de Somalia son asaltados una y otra vez por piratas en lanchas rápidas. Recientemente fueron secuestrados dos alemanes. Los veleros de turistas siguen igualmente navegando por la región como si nunca hubiera pasado nada.

Los abordajes son realizado casi siempre de la misma forma: los piratas esperan a sus potenciales presas en grandes botes rápidos, con la mirada en los aparatos de radar a bordo. Hasta que en la pantalla aparece un nuevo botín: un velero, quizás un elegante yate. Entonces pasan a la acción.

La víctima es rodeada por las lanchas rápidas y escoltada hasta una bahía alejada. Dejado en libertad es sólo quien paga rescate. Un millón de dólares exigen los piratas por la liberación de una pareja de alemanes secuestrada el lunes (23.06.08) con su yate.

Los enemigos de todos los navegantes

Klaus Hympendahl conoce muchas de esas historias. Hympendahl tiene una página web en la que informa sobre la piratería de yates y advierte de no glorificar a los piratas como si fuera figuras románticas. "Todo lo contrario", escribe en su página. "Su interés es hacerse del botín cueste lo que cueste. A sus víctimas las maltratan hasta dejarlas inválidas, violan a las mujeres y no dudan de disparar sobre niños. Los piratas son los enemigos de todos los navegantes", agrega.

Pues aún sigue existiendo gente que se cree inmune. "Muchos asaltos ni siquiera se dan a conocer, porque las víctimas no hacen las correspondientes denuncias. Se avergüenzan o no quieren que la opinión pública se entere que poseen yates de lujo". El año pasado fueron contados oficialmente 31 ataques piratas ante las costas de Somalia. Pero el número de casos es en realidad mucho mayor.

El problema es conocido. En toda guía náutica están registradas las aguas peligrosas. La Oficina Náutica Internacional hace pública en su página web un "Mapamundi de la piratería", que es permanentemente actualizado y en el que la costa de Somalia está marcada como particularmente peligrosa. ¿Por qué navegantes siguen acercándose con sus yates a la región?

Es imprescindible observar las reglas de seguridad

"Porque no tienen otra opción", dice Jürgen Feyerabend, de la Asociación Alemana de Vela. "Somalia se halla en la ruta de tránsito del Mar Rojo a las Seychelles y Mauricio, uno de los destinos preferidos de los navegantes. Quien quiere ir allí, pasa necesariamente ante Somalia", agrega. Unos 400 yates alemanes navegan actualmente por los mares del mundo, muchos de ellos también cerca del Cuerno de África.

"Si observan las reglas de seguridad no hay ningún problema", explica Feyerabend. La recomendación reza: navegar a 200 millas marinas de la costa. "Tan mar afuera no salen los botes de los piratas", dice Hympendahl, que en los años 80 navegó también por la región.

Que los turistas alemanes secuestrados muy probablemente se hayan acercado más a la costa para sacar fotos es algo que no puede entender. "Es un fatal insensatez. Después de todo lo que ha pasado y se sabe, algo completamente incomprensible".