La Cruz Roja ha alertado de que 57.000 personas refugiadas y migrantes se encuentran atrapadas desde hace meses en Grecia viviendo en condiciones difíciles en los campos de todo el país, donde las necesidades humanitarias continúan siendo inmensas. A lo largo de este año, 250.000 personas han llegado a Europa por mar y 3.000 han muerto en el Mediterráneo, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).

Cruz Roja explica que en las diferentes islas griegas, más de 8.500 personas están a la espera de su nuevo destino ya que la mayoría llegaron después del acuerdo entre la UE y Turquía, que entró en vigor el 20 de marzo, y que establece su devolución a Turquía. Mientras tanto, en la Grecia continental, alrededor de 42.000 personas más, principalmente sirios, llevan tres meses atrapados desde que se cerraran las fronteras y esperan que se resuelvan sus solicitudes de asilo.

Por otro lado, desde hace varios meses, miles de personas han ido llegando desde Serbia hasta Hungría y están esperando en las zonas de tránsito en Röszke y Tompa, en la frontera, mientras esperan que les den el asilo o que puedan continuar su viaje al centro y norte de Europa. Ante esta situación, Cruz Roja ha reforzado su intervención, principalmente en los campos de refugiados de Skaramagas y Ritsona (región de Attica) y en la isla de Chíos. (EFE)