El 6 de agosto, tras un viaje de ocho meses, un robot de la agencia estadounidense del espacio y la aeronáutica, NASA, volvió a descender exitosamente sobre la superficie de Marte. El objetivo del vehículo explorador Curiosity es obtener mayor información sobre su corteza para propiciar, algún día, el envío de una misión tripulada a ese planeta. Deutsche Welle habló sobre este tema con el ingeniero Johann-Dietrich Wörner, directivo del Centro Aeroespacial Alemán (DLR), una de las instituciones involucradas en el proyecto Curiosity.

Deutsche Welle: ¿Cuándo podremos construir las primeras casas en Marte y emigrar a ese planeta?

Johann-Dietrich Wörner: En este momento, la idea de emigrar a Marte no tiene nada de gracioso: las condiciones que presenta el planeta no favorecerían la supervivencia de la raza humana. En el mejor de los casos, nos veríamos obligados a usar trajes espaciales y a depender de los suministros que llegan de la Tierra todo el tiempo.

Desde hace más de cincuenta años estamos invirtiendo mucho dinero en el envío de sondas y robots para que analicen el planeta Marte. ¿Dónde están los éxitos de estos proyectos astronáuticos?

Cada una de las sondas enviadas a Marte ha tenido propósitos específicos. Por ejemplo, desarrollar tecnología para descender suavemente sobre su superficie e inspeccionarla con precisión. En el caso más reciente, Curiosity permitirá medir por primera vez la intensidad con que los rayos solares llegan a la superficie del planeta.

Eso tiene mucha importancia para determinar si puede existir vida en Marte o no; la energía solar puede hacer que la vida prospere y evolucione, estimulando las mutaciones celulares, pero también puede extinguirla. Para cumplir su cometido, Curiosity está armado con sensores nuevos, en cuyo diseño han participado investigadores alemanes.

Las próximas misiones a Marte ya están siendo planificadas. ¿Qué sueños tiene la aeronáutica de cara al “planeta rojo”?

Entender mejor al planeta, cómo está constituido, qué se esconde bajo su corteza. Y es que, si de conseguir alguna forma de vida en Marte se trata, hay que buscarla en sus profundidades. Las probabilidades apuntan a que no estamos solos en el universo. Si encontramos vida en Marte, ese será un hallazgo que le dará un gran impulso a nuestro trabajo.

¿Cuándo cree usted que se pueda enviar una misión tripulada a Marte?

Hay distintas estimaciones. La mayoría de ellas apunta a que nuestros astronautas dejarán sus huellas en la superficie del planeta por primera vez entre los años 2030 y 2040. Eso sí, de aquí a allá hay mucho trabajo que hacer para que eso sea posible. De momento carecemos de la tecnología necesaria para llevar a un ser humano a Marte y traerlo de vuelta.

Autores: Nicole Scherschun / Evan Romero-Castillo

Editor: Pablo Kummetz