Cuando sunitas y chiítas se masacran en Irak o en Siria, la causa normalmente no es una diferente interpretación del Islam. En la mayoría de los casos se trata de problemas políticos o socioeconómicos que, azuzados por diferencias religiosas o étnicas, desembocan en violencia. En Irak, por ejemplo, fue la política del primer ministro Nuri al-Maliki de favorecer a los chiítas en detrimento de kurdos, sunitas y otros grupos, lo que avivó la desconfianza entre éstos. En casos como estos, la religión solo es una cualidad que sirve para distinguir a los diferentes grupos y sobre todo como pretexto para legitimar la violencia.
Tampoco en los enfrentamientos entre cristianos y musulmanes en la República Centroafricana, son las diferencias religiosas el factor determinante. En países como Myanmar o Sri Lanka, es la mayoría budista la que emplea la violencia contra la minoría musulmana. Una vez más, la religión sólo es una bandera cuando se trata de afianzarse en el poder y mantener la influencia en detrimento de una minoría étnica o religiosa. Sin embargo, aunque la religión no sea el origen de un conflicto, cuando se la instrumentaliza para fines políticos suele ser fermento de una violencia desmesurada.
¿Cómo se puede salir de un conflicto avivado por factores religiosos? ¿Puede la misma religión ser una herramienta para solucionar conflictos?
Demasiada fe: religión que aviva conflictos
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Nuestros invitados:
Rosalia Sánchez Gutiérrez - Tras formarse como periodista en la Universidad de Salamanca, España, trabajó como periodista para diversos medios. Vivió y trabajó en Colombia durante un tiempo y luego regresó a España. Hoy es la corresponsal en Berlín de la radio española COPE y del periódico “El mundo”.
Bernd Pickert - El politólogo se desempeñó como periodista independiente para varios periódicos. Desde 1994 trabaja para la sección internacional del diario berlinés "die tageszeitung". Está especializado en Estados Unidos, América Latina y Derechos Humanos.
Martín Gak - recibió su doctorado en Filosofía de la New School for Social Research en Nueva York. Su campo de trabajo es la ética en la teoría y la práctica. Escribió su tésis sobre la moral religiosa y la ética secular como bases de la política. Radicado en Berlin, Martin Gak es colaborador habitual de varios periódicos, revistas y blogs.