La primera reunión de trabajo de los líderes del Grupo de los Siete (G7) transcurrió este viernes (08.06.2018) de manera "realmente cordial y productiva", dijo la ministra de Relaciones Exteriores de Canadá, Chrystia Freeland.

Los jefes de Estado y de Gobierno de Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido tuvieron un almuerzo de trabajo en el hotel sede, en la localidad de La Malbaie, en el arranque de la cumbre de dos días en Canadá.

Pese a los desacuerdos con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, por aranceles, medio ambiente y relaciones con Irán, el ambiente de la reunión fue "relativamente relajado", dijo también una fuente europea.

Sin embargo, en esta primera reunión, que giró sobre el tema de cómo hacer que la economía funcione para todos, los líderes del G7 no abordaron todavía temas difíciles como aranceles y la retirada de Estados Unidos del acuerdo nuclear con Irán.

Incertidumbre sobre acuerdo conjunto

Hasta ahora no se sabe si la cita que se desarrolla unos 140 kilómetros al noreste de Quebec podrá concluir con un comunicado conjunto final, precisamente por las diferencias de fondo con Trump.

"El trabajo en el comunicado continúa. Veremos en qué queda", dijo Freeland en una conferencia de prensa. Esa labor está en manos de los llamados "sherpas", representantes de cada país que están encargados de la redacción de los textos. Además, se trabaja en declaraciones específicas sobre distintos temas.

Al respecto, la canciller alemana Angela Merkel dijo hoy que es preferible no tener un comunicado final conjunto que dar marcha atrás en los avances logrados por el G7.

"Desde mi punto de vista es en todo caso importante no retroceder respecto de los acuerdos que alcanzamos también el año pasado", dijo Merkel y añadió "que es más sincero llamar por su nombre a las diferencias de opinión y seguir trabajando para superarlas, a hacer ahora como si todo estuviera en orden".  

CT (EFE, dpa)