Centenares de agentes de seguridad y de la policía cerraron todos los accesos al hotel Nacional, que a principios del siglo pasado fue sede del gobierno bolchevique tras el traslado de la capital rusa de San Petersburgo a Moscú. En ese lujoso hotel, a unos escasos centenares de metros del Kremlin, comenzó con un desayuno de trabajo la primera reunión del G-8 desde que Rusia asume este año la presidencia del club.

Y como 700 periodistas...

Ni siquiera la prensa acreditada -más de 700 periodistas de 20 países- ha tenido acceso al edificio a excepción de los reporteros gráficos y las cámaras de televisión que fueron admitidas para grabar los primeros minutos del encuentro.

Para poder hacerlo, han tenido que cruzar varios cordones de seguridad, pese a que en Moscú no está prevista manifestación alguna de movimientos antiglobalistas u otros. En la sesión principal, que por primera vez preside el ministro ruso Alekséi Kudrinn participan los titulares de Finanzas del Reino Unido, Gordon Brawn; de EEUU, John Snow; de Francia, Thierry Breton; de Canadá, Jim Flaherty; de Italia, Giulio Tremonti, del Japón, Sadakazu Tanigaki; de Alemania, Peer Steinbruck.

Brasil desayuna en Rusia

Además, han sido invitados al evento el director del Fondo Monetario Internacional (FMI), Rodrigo Rato, el presidente del Banco Mundial (BM), Paul Wolfowitz y representantes de China, la India, Brasil y Sudáfrica. Según informó el ministerio de Finanzas ruso, durante el desayuno de trabajo, al que asisten los titulares de Brasil y la India, así como los viceministros de Finanzas de China y Sudáfrica, se abordarán temas relacionados con la economía y el comercio mundiales.

Más tarde, los 8 serán analizados los temas principales de esta reunión: economía mundial, mercado de hidrocarburos, desarrollo y energía, así como cuestiones concretas relacionadas con la condonación de las deudas contraídas por los países más pobres ante las

SIDA, terrorismo y blanqueo de dinero

En esta reunión del G-8 también está previsto abordar temas como la lucha contra las enfermedades infecciosas, la financiación del terrorismo y el blanqueo de dinero. Se espera que al final de la reunión sea aprobado un comunicado conjunto y por la tarde los participantes se reúnan en el Kremlin con el presidente ruso, Vladímir Putin.