La tercera cumbre Iniciativa de la Franja y la Ruta (BRI, por sus siglas en inglés) o la Nueva Ruta de la Seda tiene lugar este 17 y 18 de octubre en China. Líderes y representantes de todo el mundo de más de 100 países se dan cita en Pekín, entre ellos, el presidente ruso Vladimir Putin.

Putin está interesado en intensificar las relaciones con China y demostrar que no está aislado internacionalmente, dijo a DW Alexei Chigadaev, el experto en Rusia. 

En 2013, Xi Xinping propuso un ambicioso concepto como núcleo de la "diplomacia del país" para hacer realidad el "sueño chino".

Diez años después, la BRI se ha expandido a Europa, Asia, África y América Latina, superando con creces la escala de la antigua Ruta de la Seda, pero parece enfrentar más desafíos que nunca.

¿Muchos éxitos?

Según datos oficiales chinos, hasta junio de 2023, el país ha firmado más de 200 acuerdos de cooperación con 152 países y 32 organizaciones internacionales. La BRI ha superado el billón de dólares (950 mil millones de euros) en participación acumulada desde su creación en 2013, según el Centro de Desarrollo y Finanzas Verdes de la Universidad de Fudan.

Chien-fu Chen, director ejecutivo del Centro de Investigación de la Franja y la Ruta de la Universidad Tamkang en Taiwán, dijo a DW que "la BRI ha llegado ahora a África, América Central e incluso el sudeste asiático. También se ha extendido a las islas del Pacífico Sur. La BRI se ha transformado desde la construcción de infraestructura, en sus primeras etapas, hasta el control de energía y se ha convertido en un importante puesto militar estratégico. China espera impulsar su influencia diplomática, militar y política hacia afuera haciendo esfuerzos nacionales".

En octubre, por ejemplo, acaba de inaugurarse el tren de alta velocidad Yakarta-Bandung en Indonesia. Este proyecto emblemático fue construido por empresas estatales chinas e indonesias. China proporcionó parte de la financiación a través de préstamos. Se trata del primer ferrocarril de alta velocidad en el sudeste asiático y el primer proyecto ferroviario de alta velocidad de China en el extranjero.

¿Muchos fracasos?

Sin embargo, no todo son éxitos.

China publicó recientemente un documento sobre la BRI, afirmando que de 2013 a 2022, la inversión directa en países de co-construcción superó los 240 mil millones de dólares, y "ni un solo país ha caído en una crisis de deuda debido a su participación en la cooperación de la Franja y la Ruta".

Sin embargo, Chien-fu Chen afirma a DW que dicho documento "subestima" la parte del déficit de deuda y no refleja la situación real.

En la última década, China se ha convertido en el mayor acreedor de muchos países en desarrollo. Occidente ha criticado a China por llevar a cabo una "diplomacia de la trampa de la deuda" a través de la BRI.

Uno de los ejemplos más comunes es Sri Lanka, que se declaró en quiebra en 2022. China es el mayor acreedor de Sri Lanka, con alrededor del 52% de su deuda total. Sri Lanka pidió un préstamo a China para construir el puerto de Hambantota, pero no pudo pagar la deuda. En 2017, el puerto fue arrendado a China por 99 años.

Otro ejemplo es el ferrocarril de alta velocidad Yakarta-Bandung en Indonesia; el presupuesto final excedió la estimación original de alrededor de 5.500 millones de dólares y aumentó a más de 7.000 millones de dólares.

Ian Chong, profesor asociado del Departamento de Ciencias Políticas de la Universidad Nacional de Singapur, explicó a DW que "en el futuro, China será más cautelosa en términos de gestión de riesgos".

¿Puede China seguir gastando mucho?

El debilitamiento de la economía china también desafía la Iniciativa de la Franja y la Ruta. Según los últimos datos del Centro de Desarrollo y Finanzas Verdes de la Universidad de Fudan, en lo tocante a proyectos de construcción, el tamaño del acuerdo en el primer semestre de 2023 fue el más bajo desde que se anunció la BRI en 2013.

Un documento publicado el mes pasado por el Centro de Políticas de Desarrollo Global (GCI) de la Universidad de Boston señaló que los préstamos de China en África en 2021 y 2022 tuvieron el nivel más bajo en 20 años.

Muchos observadores han señalado que la BRI se está alejando de gastar mucho dinero en infraestructuras importantes.

Chen dijo a DW que China en el futuro hará hincapié en proyectos de "la Franja y la Ruta de alta calidad" en vez de gastar mucho. Además de desarrollar la Ruta de la Seda Digital en el comercio electrónico, los proyectos de inversión también deben generar retornos. Según Chen, esto puede incluir "dejar que China explote los minerales, controle los recursos raros o tenga un valor militar especial".

El presidente Xi propuso recientemente varios conceptos que han llamado la atención, como la Iniciativa de Desarrollo Global, la Iniciativa de Seguridad Global y la Iniciativa de Civilización Global. Algunos creen que estas tres "iniciativas globales" podrían reemplazar a la BRI como núcleo del marco diplomático de China durante la próxima década.

Yun Sun, experto en China del Centro Stimson, también cree que a medida que estas "iniciativas globales" se conviertan en nuevos puntos focales, la atención internacional sobre la BRI disminuirá significativamente. Es natural que la BRI pase a su siguiente etapa, pero no será fácil detenerla.

(rmr/er)