Día de la Técnica en Wurzburgo: todo es posible
27 de octubre de 2004Tres grandes pantallas, detrás computadoras, proyectores y espejos de desviación. Delante, un visitante con anteojos que permiten ver en tres dimensiones y que no cesa de asombrarse de la perfecta ilusión que se genera a su alrededor.
Cámaras de luz infrarroja transmiten la posición y los movimientos del visitante a computadoras. Éstas generan en las pantallas imágenes realistas, que dan al observador la impresión de moverse por ejemplo dentro de una molécula en forma de espiral.
Normalmente, el equipo, llamado "Cave", no es utilizado para hacer asombrar a los visitantes. Los investigadores del departamento de informática de la universidad recurren a él para realizar estudios acerca de cómo guiar robots a distancia.
Una impresión realista
Vehículos robot equipados con videocámaras pueden por ejemplo captar el entorno en situaciones peligrosas, ya sea en Marte, en desiertos o en acciones de rescate en caso de catástrofes, y proporcionar una impresión realista de la situación a través de "Cave".
En el "Día de la Técnica", los visitantes pueden informarse también acerca de los principios de la transmisión de datos con la técnica UTMS para celulares, las posibilidades de Internet en el futuro y cómo se fabrican los microprocesadores.
En el programa también figura un satélite experimental desarrollado por la Universidad, el UWE 1: un minisatélite de forma cúbica y 10 centímetros de canto, que en 2005 será enviado al espacio. Su misión: probar protocolos de Internet en condiciones espaciales. La técnica para comandarlo desde Wurzburgo ya ha sido instalada sobre el techo de la universidad.
Menos celeste
Gaele Winters, director del Centro Europeo de Operaciones del Espacio informará por su parte en una conferencia acerca de los resultados de las últimas misiones espaciales europeas, que actualmente se controlan desde la ciudad alemana de Darmstadt.
Menos celeste y más terrenal es otra técnica desarrollada también en la Universidad de Wurzburgo: el CEP, acrónimo de "código electrónico de productos". El CEP no es otra cosa que una etiqueta electrónica.
El CEP conforma la base para la identificación de productos comerciales a través de la tecnología de identificación por radiofrecuencia (RFID). En el futuro, los productos ya no serán identificados ópticamente con barras de código impresas, sino a través de un transpondedor: un pequeño emisor que envía los datos a un receptor.
Adiós a la barra de códigos
La gran ventaja es que ya no tiene que haber contacto óptico entre el aparato lector y la mercadería. Los artículos pueden ser identificados así no sólo mucho más rápidamente, sino también varios a la vez.
Además, el volumen de datos que pueden ser almacenados en un transpondedor es mucho mayor que el que encierran las barras de códigos impresas. Ello facilita la distribución y la logística de los productos.
La visión de futuro para el comprador en un supermercado: el cliente pasa con su carrito por un portal de salida. Allí, la botella de leche, la tableta de chocolate o el paquete de galletitas le transmiten a un aparato registrador sus precios, éste hace la suma y descuenta automáticamente el importe de la cuenta bancaria del cliente. ¡Un nuevo mundo feliz!