Día Internacional de la Mujer: Fifty-fifty hasta el 2030
Helle Jeppesen (MZ/ER)8 de marzo de 2016
Igualdad de oportunidades y derechos para las mujeres hasta el 2030. El Día Internacional de la Mujer 2016 se centra en la inclusión de la igualdad de género en los nuevos objetivos globales de desarrollo sostenible.
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“China apoyará a las mujeres, para que puedan cumplir sus esperanzas y sueños tanto en sus trabajos como en sus vidas”, prometió Xi Jinping, presidente de la República Popular China, en Nueva York, cuando se aprobaron los nuevos objetivos globales de desarrollo sostenible en la Asamblea General de la ONU. Admitió que todavía queda un largo camino por recorrer antes de que las mujeres logren la “mitad del cielo” que les corresponde.
A finales de septiembre del 2015 los Jefes de Estado y de Gobierno de todo el mundo incluyeron la igualdad de derechos y oportunidades para las mujeres en la la lista de los nuevos objetivos de desarrollo sostenible. No faltaron promesas de apoyo.
“Como Jefes de Estado y de Gobierno tendrán la posibilidad y la responsabilidad de fortalecer la igualdad de derechos de las mujeres como prioridad nacional”, dijo el Secretario General de las Naciones Unidas, Ban Ki Moon, a la asamblea.
Progreso mensurable y más control
¿Eso ayuda? Karin Nordmeyer es la presidenta del Comité Nacional de Mujeres de la ONU en Alemania. Critica mucho documentos anteriores, declaraciones y planes de acción, porque muy pocos de ellos se han puesto en práctica.
Pero está completamente convencida de que esta vez será distinto, por la integración de la igualdad entre hombres y mujeres en los objetivos de desarrollo sostenible.
“Ahora tenemos una agenda que involucra a la comunidad mundial,” expresa y subraya al mismo tiempo el control a nivel nacional e internacional. Normalmente se lleva a cabo una revisión cada cuatro o cinco años. “Pero esta vez en el próximo año, 2017, se llevarán a cabo las primeras revisiones en la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer. Eso significa un progreso concreto y mensurable”, afirma Nordmeyer.
“El avance es lento”
La campaña “Fifty-fifty hasta el 2030” ayudará también a medir los resultados. Hasta el momento, ningún país del mundo ha logrado una verdadera igualdad de derechos para las mujeres. Con ocasión del Día Internacional de la Mujer, la oficina federal de estadística alemana llama la atención sobre el hecho de que la representación femenina en los puestos más altos todavía es inferior a la media en la Unión Europea.
En todo el mundo las mujeres ganan en promedio un 25 por ciento menos que los hombres. En el mercado de trabajo, las mujeres enfrentan muchos más obstáculos que los hombres. A escala mundial, dos de cada tres personas que viven por debajo del umbral de pobreza, son mujeres. Y aún hoy en día, por cada 100 alumnos, hay sólo 70 alumnas.
Ahora la igualdad entre los géneros, como objetivo número cinco, está en lo alto de la agenda internacional de desarrollo.
Las mujeres de Casa Xochiquetzal
En México se encuentra el único albergue en el mundo para trabajadoras sexuales de la tercera edad. La directora de Casa Xochiquetzal, Jesica Vargas González, lucha incansablemente por sacar adelante el proyecto.
Imagen: Ronaldo Schemidt/AFP/Getty Images
Mi casa es tu casa
“Trabajamos con personas que requieren de nuestra atención y cariño. Entonces hay que ponerle todo el corazón, pues es su casa. Finalmente nosotros solo estamos de visita, pero la casa es de ellas, y hay que tratarlas con todo el respeto”, dice Jesica Vargas González, directora de Casa Xochiquetzal.
Imagen: Pedro Pardo/AFP/Getty Images
Un destino compartido
El perfil de las mujeres que son admitidas como residentes en la casa hogar es específico: tienen que ser trabajadoras sexuales o haber ejercido este oficio, ser mayores de 55 años de edad y no contar con el apoyo de familiares o programas sociales.
Imagen: Casa Xochiquetzal
Un descanso para el alma
Cada una de las 24 señoras que viven en Casa Xochiquetzal cuentan con un cuarto con cama. Asimismo, reciben tres comidas al día. Muchas vivían en situación de calle y han encontrado en el albergue su primer hogar en décadas.
Imagen: picture-alliance/dpa/M. Guzman
Actividades fijas
En la casa hogar, las mujeres tienen actividades fijas para “dar estructura a sus vidas, porque están acostumbradas a estar en la calle, a no saber si van a comer, lograr tener algún cliente o pasar la noche seguras”, cuenta la directora de Casa Xochiquetzal. Las residentes tienen horarios para comer, limpiar sus cuartos, asistir a sus talleres, salir a pasear y hacer ejercicio al parque.
Imagen: Casa Xochiquetzal
Asistencia integral
La meta del albergue Casa Xochiquetzal es ofrecer un espacio digno a trabajadoras sexuales de la tercera edad. Aparte de la vivienda y comida, las señoras también reciben atención médica, psicológica y asesoría legal.
Imagen: Casa Xochiquetzal
Más vale tarde que nunca
Asimismo, las mujeres de Casa Xochiquetzal asisten a la escuela para concluir sus estudios primarios y secundarios. Algunas incluso aprendieron a leer y escribir en el albergue. En enero de 2015, a sus 83 años, la residente de mayor edad se graduó de la primaria. Ahora está estudiando la secundaria.
Imagen: Casa Xochiquetzal
Talleres re(creativos)
A las habitantes del albergue se les proporcionan talleres ocupacionales, por ejemplo, de pintura, bordado y cartonería, donde pueden dar rienda suelta a su imaginación. El trabajo manual es al mismo tiempo una terapia recreativa.
Imagen: Casa Xochiquetzal
Una casa hogar de puertas abiertas
Las mujeres también salen de la casa hogar para trabajar o visitar a sus amigas. A veces, invitan a sus colegas y excolegas a vivir en el albergue cuando las ven en un estado vulnerable, cuenta Jesica Vargas. Casa Xochiquetzal también ofrece asistencia médica, psicologica y asesoría jurídica gratuita a trabajadoras sexuales de la tercera edad que no residen allí.